Un nuevo año comienza y, casi como si la vida fuera un almanaque en el que se arranca una página para pasar a la siguiente, el inicio de un nuevo ciclo trae consigo oportunidades para reflexionar y decidir qué queremos lograr en los 365 días por delante.
¿Cuántas veces nos indignamos al ver residuos tirados en los lugares naturales de nuestra ciudad? Si somos capaces de disfrutar de unos mates al lado de la orilla del lago, o jugar con nuestros niños en las plazas, ¿por qué no somos capaces de llevarnos o disponer correctamente los residuos que generamos?
La semana pasada se llevaron a cabo dos eventos muy importantes en la Ciudad de Buenos Aires, el Women Economic Forum y el BID Lab Forum. Organizados por entidades distintas, pero con un punto clave en común: la importancia de desarrollar ecosistemas para impulsar a las Empresas Sociales y de Impacto.
A medida que crecen los emprendimientos y empresas que buscan hacer negocios con impacto positivo en las personas y el planeta, también crece el interés por saber cómo lograrlo. La Mesa de Impacto Tandil trae una propuesta dinámica para visibilizar esta manera de emprender, desde nuestra ciudad.
A medida que se acerca fin de año, en las PyMEs y grandes empresas comienza a circular la pregunta “¿qué regalamos para fin de año?”. Este momento, es una gran oportunidad para promover iniciativas de compra sostenible, en donde no solo se considera el precio y calidad de los productos y servicios que se buscan, sino también contribuir a generar impacto positivo.
Que existan empresas que buscan generar impacto positivo en la sociedad y el ambiente, no es novedad. Su surgimiento, crecimiento y expansión alrededor del mundo se debe a los ecosistemas de impacto que generan terrenos fértiles para que estas organizaciones prosperen.
El próximo domingo 24 de noviembre se llevará a cabo una acción de sustentabilidad en la ciudad, que tiene como objetivo movilizar a la comunidad y generar un impacto positivo en nuestro entorno natural.
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El mundo empresarial está evolucionando. El enfoque ya no se centra únicamente en aumentar la rentabilidad, sino en cuidar y regenerar el planeta, reducir la inequidad y mejorar el bienestar de las personas.
Cuando desde Argentina se piensa en India, generalmente las imágenes asociadas a dicho país son de calles pequeñas, sucias y abarrotadas de gente de bajos recursos. Pero esa es solo una de las facetas de India. En este vasto y diverso país, también se encuentran soluciones innovadoras, tecnología de punta, una clase media ascendente y estrategias que logran que millones de personas salgan de la pobreza cada año.
¿Qué tiene que ver limpiar las costas de los mares con anteojos de diseño?¿cómo pueden las personas en situación de calle ser empleadas en una pizzería?¿cómo se crea un servicio para empresas brindado por personas ciegas? No son preguntas retóricas, sino casos concretos de Marcas que nacen poniendo a las personas y al planeta primero.
En una región tan diversa y extensa como América Latina, los desafíos sociales y ambientales tienden a ser complejos y similares a lo largo del continente. Por eso, la búsqueda de soluciones conjuntas se convierte en una necesidad y una oportunidad al mismo tiempo.
Las oportunidades entre América Latina, India y el Reino Unido son mucho más amplias de lo que parece a simple vista. En cada una de estas regiones, los desafíos sociales y ambientales están siendo abordados por Empresas Sociales y de Impacto, apoyadas por los Ecosistemas que las impulsan.
