A la espera de definiciones oficiales, en el sector privado pusieron reparos ante el bono de 30 mil pesos

Diversas voces a favor y en contra se manifestaron a nivel nacional luego de que el Ministro de Economía Sergio Massa haya anunciado la implementación de un bono de 60 mil pesos, otorgados en dos tramos de 30 mil cada uno, para el conjunto de los trabajadores públicos y privados.

Por el impacto local de la medida también se expresaron, en relación al personal de la comuna, el secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales, Roberto Martínez Lastra. Al respecto consideró que en el marco del reciente acuerdo concretado, aguardarán para observar las decisiones que tomen otras Municipalidades para después determinar o no exigir el beneficio.

En cuanto al sector privado, fueron consultados por este Diario dos referentes del comercio y la industria en Tandil, Agustín Usandizaga de la Cámara Empresaria y Omar Farah, de Apymet. Ambos coincidieron en plantear diversas críticas al anuncio, en particular por la falta de consulta de parte de las autoridades nacionales, y por la superposición con la negociación paritaria en puerta.

“Como han mencionado algunas entidades no fue una medida consulta ni acordada, ahora se ve que no fue ni siquiera acordada con las Provincias ni los Municipios, porque hay muchos que han dicho que no están en condiciones ni van a pagar el bono. Y las entidades tampoco estaban al tanto”, comenzó Usandizaga.

Si bien el referente empresarial consideró que el bono “puede ser una medida necesaria para recomponer poder adquisitivo después de la devaluación post PASO”, reiteró también la necesidad de que tales objetivos podrían realizarse “de una manera acordada para tratar de que eso se pueda pagar y asumir”.

En concreto, indicó Usandizaga, “no todas las empresas están en condiciones de asumirlo, y no todos los sectores porque hay algunos que han acordado paritarias recientemente. Nosotros tal cual se expresaron algunas de las Cámaras, toda negociación de alguna remuneración adicional debe ir en un acuerdo paritario”, observó aclarando que “no negamos que es necesario”.

La complejidad del contexto, señaló, afecta tanto a los trabajadores como a los propios empresarios. “Creo que estamos en una situación complicada todos, los empleados y las empresas que necesitan subsistir, necesitan cumplir con sus compromisos, los plazos de pago se han acortado y los plazos son prácticamente nulos. Las empresas tienen que estar muy bien capitalizadas porque no tienen financiamiento para cumplir con todos sus compromisos y seguir adelante”, expresó.

En paralelo, agregó, se suman a la situación los efectos de la devaluación. Las empresas, indicó “tienen restricciones de venta porque por los nuevos precios la demanda se va a frenar mucho, y restricciones de abastecimiento”. En dicho marco, lamentó “aparecen decisiones unilaterales del Gobierno que las empresas tienen que cumplir bajo amenaza de que si no van a tener multa”.

“Se hace campaña con dinero ajeno”

Por su parte Omar Farah, empresario y presidente de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas de Tandil (Apymet), planteó que “la medida la tomamos como un abuso, porque además la mayor parte de los gremios involucrados dentro de la actividad industrial de acá de Tandil tienen su acuerdo paritario. Donde prácticamente en la mayoría de los casos hablamos de montos similares, que ya se han otorgado como suma fija. En particular el caso de la UOM es el mismo monto”.

A su vez se refirió a que a la fecha no existe publicación oficial con respecto a la medida. “Entonces no sabemos cómo juega esto con las paritarias de cada sector, considerando que está dicho que este bono es absorbido por los acuerdos de paritarias posteriores. Eso todavía no está aclarado”, manifestó.

Agregó también que el anunció “cae mal porque no se prevé. O sea, están haciendo campaña con dinero ajeno. Es muy sutil todo esto, y no es bien recibido en ese sentido. Aunque el objetivo final estemos de acuerdo, en lo demás ya somos todos conocedores de cómo viene la mano”.

Consultado acerca de si las empresas de la ciudad está en condiciones de afrontar el pago del bono, señaló que la mayoría se encuentra observando cómo afectará y por donde pasará la obligatoriedad de la medida. “En el medio te encontrás con muchas situaciones disímiles. Algunas le van a hacer frente independientemente de los acuerdos paritarios y otras han decidido esperar bien cómo son las cosas”, precisó.

Recordó a su vez que durante octubre próximo hasta diciembre comenzarán a actualizarse los salarios en función de la inflación. “No hay que olvidar que las paritarias para adelante no son livianas tampoco”, consideró en ese sentido.

Concluyó indicando que “la voluntad de la gente está en todos lados, las empresas han quedado con el equipo de trabajo bien reducidos y consecuentemente el trato es muy directo, con lo cual una mejora salarial es bienvenida por todo el mundo. El tema es poder pagarlo”.