Santa Fe: buscan a un hombre y su hijo de 3 años tras hallar su lancha a la deriva
Pablo Ovando y su hijo salieron a navegar el martes y no regresaron. La embarcación fue hallada sin ocupantes y continúa un intenso operativo de búsqueda en Reconquista.
La comunidad de Reconquista, ciudad argentina del nordeste de la provincia de Santa fe, permanece en vilo tras la misteriosa desaparición de Pablo Ovando, un guía de pesca local, y su hijo de tres años, quienes salieron a navegar el martes al mediodía y hasta el momento no han sido encontrados.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailSegún la información oficial, la última vez que se vio a Ovando fue el martes 15 de abril, alrededor de las 14:30, cuando zarpó en su lancha desde un punto conocido como el puesto de la familia Díaz, acompañado por su hijo menor. Ambos iban a bordo de una embarcación que conocían bien y en una zona que el navegante solía recorrer con frecuencia.
Al caer la noche, al no regresar a su hogar, los familiares encendieron las alarmas. Durante la mañana del miércoles, la lancha fue hallada a la deriva, con el motor apagado, sin rastros de sus ocupantes. El celular de Ovando se encontraba dentro de la embarcación, sin actividad desde el momento en que salieron.
La zona donde fue hallada la lancha, una curva pronunciada del riacho San Jerónimo, es conocida por sus fuertes corrientes y la presencia de bancos de arena, lo que la convierte en un punto riesgoso para la navegación.
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Actualmente, la Prefectura Naval Argentina encabeza el operativo de búsqueda junto a buzos tácticos, efectivos policiales, voluntarios y pescadores locales, quienes rastrillan tanto el río como las islas cercanas en busca de cualquier pista. Sin embargo, hasta el momento, no se han encontrado indicios que permitan reconstruir con claridad qué ocurrió.
Los familiares de Pablo insisten en que el guía era un hombre experimentado, con pleno conocimiento del área. Aún mantienen la esperanza de que, ante alguna emergencia, padre e hijo hayan logrado llegar a tierra firme y estén esperando ser encontrados.
Mientras crece la preocupación en la zona, la comunidad se mantiene atenta y acompaña el operativo con cadenas de oración y mensajes de apoyo.