Inseguridad vial
Proponen desviar el tránsito de la 226 hacia otras rutas y que el tramo urbano pase al Municipio
La ONG Estrellas Amarillas elevó tres proyectos viales al Concejo y pidió la Banca 21 para exponerlos. La primera iniciativa solicita que la comuna suscriba un convenio con Nación para que la traza urbana de la 226, desde la Ruta 30 hasta el acceso El Paraíso, pase al dominio público municipal y se genere una variante que desvíe el tránsito fuera de la ciudad, por las rutas 74 y 30. Además, propusieron que se construyan más rampas y la creación de un parque temático de educación vial.
La filial local de la ONG Estrellas Amarillas elevó ayer al Concejo Deliberante un pedido para acceder a la Banca 21 con el objeto de exponer tres proyectos orientados a la temática vial y poder instalar una vez más el debate.
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En paralelo, la problemática del tránsito empeora y las herramientas para intervenir son más bien escasas. De hecho, el lunes a la noche un peatón fue embestido por un automóvil al intentar cruzar la Ruta 226 a la altura de Falucho y falleció en el acto.
En aras de atacar el problema y proponer soluciones concretas, la entidad presentó un proyecto ante el Legislativo para autorizar al Departamento Ejecutivo a negociar y suscribir un convenio de cesión o transferencia del tramo urbano de la Ruta Nacional 226 al dominio público municipal y trasladarla a las trazas de la rutas provinciales 74 y 30.
Cabe destacar que las rutas son competencia de Nación y Provincia, respectivamente. En este caso, la 226 es jurisdicción de la Dirección Nacional de Vialidad. De este modo, el pasado 16 de marzo, Estrellas Amarillas Tandil junto a otras 24 instituciones educativas, deportivas, religiosas y asociaciones civiles de la ciudad, elevaron un requerimiento formal ante el organismo nacional dirigido por Gustavo Arrieta solicitando la urgente intervención de dicho organismo en el trayecto urbano de la Ruta 226 y colectoras aledañas.
En correlación y en el marco de la iniciativa presentada ante el Deliberativo, argumentaron que el crecimiento urbano local, tanto hacia el norte como hacia el sur de la 226, ha generado que cotidianamente gran cantidad de vecinos deban cruzar o circular sobre dicha arteria varias veces al día. Esto, sumado al tráfico propio de la arteria, provoca a diario un número alarmante de siniestros viales, con personas lesionadas y víctimas fatales.
En tal sentido, el texto indica que “la estructura actual de la RN 226 con las rotondas existentes ha quedado obsoleta ante el gran flujo de vehículos que cruza en forma permanente la citada ruta”.
En consecuencia, el proyecto propone crear una ordenanza que autorice al Ejecutivo a negociar y suscribir con Vialidad Nacional la cesión o transferencia del tramo urbano de la Ruta Nacional 226 -desde la intersección de la Ruta Provincial 30 hasta el acceso El Paraíso- al dominio público municipal.
Vale reseñar que ayer el intendente Miguel Lunghi y el secretario de Planeamiento y Obras Públicas, Luciano Lafosse, mantuvieron un encuentro en Capital Federal con el titular de Vialidad para gestionar soluciones efectivas sobre la inserción urbana de la polémica arteria.
Traslado del tránsito rutero
Asimismo, según explicó en contacto con este medio Hernán Mansilla, referente de la ONG, la propuesta contempla el traslado de dicho tramo urbano de la ruta nacional en forma superpuesta con las rutas 74 y 30. Es decir, se crearía una variante natural que desvíe el tránsito fuera de la ciudad.
Las alternativas antes descriptas fueron tratadas con representantes de Vialidad Nacional y de la Unicen en una reunión desarrollada el 1 de junio de 2022 para ponderar su factibilidad.
De acuerdo a lo expuesto en el proyecto, este tipo de obras viales (variantes/circunvalaciones) solucionaron en forma definitiva problemáticas viales como las que provoca la Ruta 226, por ejemplo, en Neuquén, Córdoba, Rosario, Posadas, Lujan, San Andrés de Giles, San Antonio de Areco, Arrecifes, Pergamino.
En tanto, también señalaron que “este proyecto, además de erradicar el tránsito pasante que no beneficia a la ciudad, permitiría urbanizar definitivamente las dos partes hoy divididas por la ruta nacional”.
En este tren de iniciativas, respecto a las anteriores propuestas realizadas sobre la problemática, consideraron que el proyecto de desviar la traza de la Ruta 226 al norte de la ciudad por la avenida Circunvalación, “actualmente resulta inviable dado que en dicha zona ya existen barrios como Graduados, Villa Leonor, La Unión, entre otros”, entonces sólo se trasladaría la problemática actual a otro sector del ejido urbano.
Por otro lado, esgrimieron que tampoco es viable la propuesta de elevar la RN 226 sobre los cruces de las rotondas de avenida Espora y/o avenida Falucho, porque estas obras no priorizan el cruce de peatones ni de ciclistas, y además hay clubes y escuelas a ambos lados de la cinta asfáltica. En esta línea, repararon que la problemática no sólo se enfoca en dichos cruces viales, sino a lo largo del trayecto comprendido entre el acceso El Paraíso y la Ruta Provincial 30.
Rampas y accesibilidad
Dentro del arco de proyectos desplegados, cuya intención es poder exhibirlos en la Banca 21 dentro de 15 días si el Concejo lo autoriza, la organización también giró un proyecto para proteger y asegurar el acceso a las personas con discapacidad a servicios, instalaciones y espacios públicos de la ciudad.
La solicitud cuenta, en tanto, con la adhesión de instituciones como la Escuela de Educación Especial 501; el Centro de Formación Laboral 1; el centro terapéutico El Andamio; Ciane Tandil; y Centro de Día Manos Abiertas.
La propuesta surge a partir de un relevamiento que realizaron de las rampas para personas con discapacidad en la ciudad y la “gravedad” que arrojaron los datos recabados: las vinculaciones entre las veredas y las calles son insuficientes.
Así, frente a la escasez de rampas que garanticen el acceso a quienes se desplazan en silla de ruedas o presentan movilidad reducida, las entidades involucradas pidieron al Deliberativo que legisle sobre el tema.
De esta manera, el proyecto exhorta a que el Estado construya progresivamente rampas donde no las hay, para vincular la vereda con la calzada y facilitar la movilidad urbana de las personas con discapacidad.
En otra parte del proyecto, por consiguiente, buscan establecer la obligatoriedad de construcción de rampas en las nuevas calles donde se construyan cordones cunetas o asfalto en las calles de Tandil, "para promover el pleno ejercicio de todos los derechos humanos y las libertades fundamentales de las personas con discapacidad sin discriminación alguna y, por lo tanto, a adoptar todas las medidas legislativas y administrativas que sean pertinentes para hacer efectivos los derechos reconocidos constitucionalmente”.
Parque temático
La última de la iniciativas ingresadas al Concejo habla de la creación de un parque temático para la educación vial de los niños. “Un parque infantil de educación vial está destinado a la educación de nuestros hijos, teniendo como objeto aprovechar su tiempo de ocio en su formación mientras se divierten, al enseñar cómo tienen que conducirse desde pequeños, hay muchas más probabilidades que internalicen los peligros a los que se exponen y los que pueden causar cuando ya tengan edad de conducir”, describe el proyecto.
En esta línea, el texto valora que la creación de un parque de estas características constituye un recurso “inagotable” para implementar prácticas concretas con sentido didáctico-pedagógico, y fomentar conductas y actitudes desde temprana edad para lograr usuarios responsables en la vía pública, a los fines de disminuir los accidentes de tránsito y atenuar el impacto económico y social que los mismos generan en la sociedad.
“Es de suma importancia abordar esta temática en niños/as desde los 3 años, fomentando la enseñanza de la prevención y seguridad vial en los primeros años de vida, periodo en el que se consolidan las actitudes, los valores y el respeto”, sostuvieron desde la ONG.
Para hacer esto posible, el proyecto refiere que las instalaciones podrán contar con un aula de capacitación, y un circuito que reproduce calles y señalizaciones que pueden encontrarse en toda ciudad.
Dichas instalaciones podrán ser utilizadas por alumnos de los distintos niveles educativos de la ciudad (jardín, primario y secundario), en pos de asegurar que todos los estudiantes de la ciudad reciban educación en la materia.