La actividad económica local registró una baja del 4% en febrero y lo atribuyen a la caída del consumo

La actividad económica local registró una caída de cerca del 4% en febrero en comparación con el mes de enero. 

El dato, surgido a partir del informe de indicadores económicos que elaboran mensualmente la Cámara Empresaria de Tandil (CET) y la Facultad de Ciencias Económicas de la Unicen, refleja una desaceleración de la actividad general y revierte el signo positivo exhibido el mes pasado (+11%).

Las causas, variadas, evidencian que Tandil no escapa a lo que se registra a nivel nacional, donde la retracción del consumo se hace notar con fuerza.

“Actividad agroindustrial con realidades dispares (las relacionadas al ganado bovino en negativo, las relacionadas al porcino en crecimiento), fuerte caída del consumo (desde el consumo energético en los hogares hasta la disminución de los volúmenes de combustibles comercializados en la ciudad y el campo) y la pérdida de poder adquisitivo del poder económico del Municipio (en fondos coparticipados y recaudación propia)”, son algunas de las variables que contribuyeron a la caída, se enumeró en el informe presentado la semana pasada.

El doctor en Economía Daniel Hoyos Maldonado, que forma parte del equipo que realizó el estudio, explicó que “los indicadores que tienen que ver con el consumo han mostrado un descenso; es lo que más ha incidido sobre el índice para la retracción respecto del período anterior”.

“A su vez, aquellos que han mostrado alguna mejora, aunque no necesariamente tienen su réplica a nivel nacional, tienen que ver con el movimiento del sector automotriz, tanto en lo que es patentamiento de nuevas unidades como el mercado del usado”, agregó ante la pregunta de “La Mañana de El Eco”, por ECO TV y la 104.1 FM.

De todas maneras, -señaló el profesional- “en este período, hemos tenido movimientos ascendentes y descendentes; no tenemos un sector que muestre estancamientos”.

Consultado acerca de qué aspectos de la macroeconomía pudieron haber llevado a este descenso de la actividad local, el docente de la Facultad de Ciencias Económicas de la Unicen consideró que “Tandil no escapa de la realidad general: la oleada inflacionaria que hemos tenido claramente ha repercutido sobre el nivel de ingresos en la ciudad y eso, naturalmente, ha impactado sobre los niveles de consumo”.

En ese sentido, evitó endilgarle toda la responsabilidad a las políticas implementadas por el actual gobierno nacional a cargo de Javier Milei. “Esto no se puede asignar estrictamente a este período sino que estamos viviendo un proceso inflacionario que viene de larga data”, aseguró. 

“Durante la última parte del año pasado hubo muchos controles de precios que, cuando se relajan o se quitan, se produce un ajuste, que es lo que estamos viviendo”, apuntó. 

Y añadió que “naturalmente, como el ajuste de los ingresos -sobre todo de aquellos que son ingresos fijos como jubilaciones y asalariados- llevan más tiempo, eso repercute en caída de los ingresos reales”.

“Indicadores favorables”

Por otra parte, el economista sostuvo que hay algunos indicadores que se posicionan como favorables para la economía tandilense, “sobre todo los que tienen que ver con el sector primario”. 

“El cambio de reglas en términos del movimiento del tipo de cambio, claramente va a favorecer” a la actividad comercial de este Municipio, señaló.

Y acotó que “luego, en el resto de los sectores, deberíamos esperar una mejora en la medida en que se eliminen las trabas que hoy están pesando sobre la economía argentina en general”.

“La economía de Tandil es muy dinámica; ha respondido en relación a las economías de otras ciudades, pero claramente sobre ella pesan muchas regulaciones”, consideró Hoyos Maldonado y remarcó que “es crucial que se resuelva ese tema”.

En ese marco, apuntó a “la carga impositiva”, que es “un lastre que va a pesar sobre la recuperación de la economía”.

“Si se aprueban las leyes de desregulación y se empiezan a ver algunos efectos, por ejemplo algún tipo de cronograma o proyección de reducción de la carga impositiva, podríamos estar viendo resultados positivos en el segundo semestre y la primera parte del año que viene”, aventuró. 

Hoyos Maldonado también refirió que, para el óptimo funcionamiento de la economía local, es fundamental que la inflación baje, al menos “al 3 ó 4% mensual”, y que se elimine el cepo cambiario.

El informe

De acuerdo al último informe de la CET, “la actividad económica tandilense volvió a mostrarse en desaceleración durante el mes de febrero, registrando el indicador una caída del 3,9% intermensual”. 

“Esto revierte el signo positivo exhibido en enero (+11,0%) y vuelve al tono del último trimestre de 2023, cuando concluyó con una contracción acumulada por debajo del -12%”, se indicó en el trabajo elaborado en conjunto con la Unicen.

Además se añadió que “si bien se percibe aún un nivel de actividad por sobre el del año pasado (+2,7% interanual en febrero, tras el +2,6% de enero), el nivel general muestra claras señales de recesión”. 

El informe mensual es elaborado desde 2019, tras la firma de un convenio entre la CET y la casa de altos estudios, y se construye a partir de indicadores parciales de la actividad económica que incluye elementos como el consumo eléctrico y de combustibles, los movimientos ganaderos y la coparticipación que recibe el Municipio, entre otros.