Nacieron entre el 2004 y el 2007, y aunque la mayoría de ellos vota hoy por primera vez, no será su primera incursión en política. Algunos ya fiscalizaron en las PASO para distintas fuerzas, y además presiden los centros de estudiantes de las escuelas secundarias públicas en las que cursan sus últimos años. Son jóvenes que eligen participar, y contaron su experiencia y su mirada del presente en una charla con El Eco de Tandil.Entre otros temas, surgieron los motivos por los cuales se involucraron, su perspectiva con respecto a la posibilidad de la privatización de la educación, las “fallas del sistema educativo”, y lo que significa para ellos la política. Pero consultados sobre la principal preocupación de los jóvenes, coincidieron en señalar que “es pensar en el futuro, decir si puedo vivir en la Argentina o me tengo que ir”.<figure class="image"><img src="https://cdn.eleco.com.ar/media/2023/10/centro_de_estudiantes_21_10_23_1.jpeg" alt="Centro de estudiantes 21-10-23 - 2"></figure>Agustín Straubinger tiene 17 años y es el presidente del centro de estudiantes de la Escuela Técnica 2. Aunque todavía no definió la ciudad en la que lo hará, tiene en claro que quiere estudiar ingeniería química. Chabela Coronel Ruiz tiene 16 y es la presidenta del centro de la Escuela 19. Actualmente hace teatro y tiene pensado seguir formándose en la disciplina. Santiago Cuviller tiene 19 y es el primer presidente del centro –creado hace poco tiempo- de la Escuela 17 de La Movediza. Orgulloso de lo que lograron hasta el momento en la institución, también piensa en su futuro como estudiante de Derecho en Azul. Samuel Corredoira, de 17 años, preside el centro de la Escuela Sábato, y todavía analiza si estudiar Derecho o Historia en la Facultad de Humanas.Además de las tareas que realizan para sus propias instituciones, conformaron recientemente la Federación Tandilense de Centros de Estudiantes. Allí se nuclean gran parte de los órganos de representación estudiantil de los establecimientos públicos, y proyectan también incorporar a los privados. Se reúnen cada 3 meses y elevan diversos reclamos a la Jefatura Distrital.&nbsp;La Ley de Ciudadanía del año 2012 sumó al universo de votantes a los jóvenes de 16 y 17 años. Desde entonces, tal vez la elección de hoy sea una en la que pese particularmente el voto joven.&nbsp;No sólo porque alrededor de la mitad de los electores tiene entre 16 y 35 años, sino también por el impacto de las redes sociales en la opinión pública. Puede mencionarse además que durante la campaña los postulantes apelaron a evocar –como amenaza o como promesa-momentos históricos que para gran parte del electorado forman parte de un pasado desconocido.&nbsp;En este marco, los tres presidentes, y la presidenta de los centros de estudiantes de algunas de las escuelas de diferentes barrios de la ciudad, guardaron sus celulares y dialogaron El Eco de Tandil.<h2>Política, presente y futuro</h2>-Hoy son las elecciones. Vivimos un presente donde se habla de la “apatía” de la juventud, de la falta de participación. Sin embargo ustedes presiden centros de estudiantes y eligieron involucrarse. ¿Qué los motivó a hacerlo?- Agustín: Para mí fue ver a todos mis compañeros. Antes de postularme tenía un montón de gente que me decía que lo haga, aunque no era mi intención al principio. Y cuando me di cuenta que tenía la potestad de cambiar las cosas, dije “les voy a hacer caso”. Yo tengo un sentido de pertenencia enorme y también fue eso. Me fue bien, así que vamos por mejorar la situación de la escuela.&nbsp;Chabela: Yo vivo con una familia política, fui toda la vida a marchas y movilizaciones. Entonces, como que siempre tuve este sueño de chiquita. Veía las películas yanquis en las que estaba el centro de estudiantes, y tenía como una idealización de eso y de lo que era la política.Antes iba a la Escuela 15, ahora me cambié a secundaria 19 y sentí el apoyo de parte de los directivos y de mis compañeros.&nbsp; Tenía muchas ganas, me había hecho amiga de algunas chicas que ya eran parte del centro, y entonces me dieron ganas de movilizarme.&nbsp;Santiago:&nbsp;Nosotros no teníamos centro de estudiantes, se conformó el año pasado. Para mí fue algo que no esperaba porque no sabía lo que era un centro de estudiantes y miré la película “La noche de los lápices”. Nuestra directora Tere nos fue apoyando, hicimos reuniones, fuimos&nbsp; a las elecciones y las ganamos.&nbsp;Para mi fue muy importante porque hace 15 años que estoy en esa escuela. Y saber que hemos logrado cambiar su identidad, su mirada, porque como que siempre, en el plano de Tandil, eran las cuatro avenidas, y después nos dieron un poco más de bolilla. Hace seis años atrás era una escuela muy conflictiva, entró gente y un equipo directivo nuevo y la cambió de pies a cabeza. Ayudamos a pintar, pusimos las puertas de los baños, logramos cambiar su identidad y es como que vivimos trabajando “24/7” en esto. El centro de estudiantes es importante porque es escuchar las voces de tus compañeros y ser escuchado.Samuel: Mi escuela hace más de 10 años que tiene centro de estudiantes, siempre logró conformar listas que compitan con otras, y siempre estuvimos involucrados institucionalmente. Nuestra escuela da mucho apoyo a la participación estudiantil. Y desde lo personal, yo me metí primero, como decía recién Agustín, por el empuje de tus compañeros a involucrarte. Yo al centro de estudiantes lo veo sólo como representación de los estudiantes, también lo veo un lugar donde está como la retaguardia de los derechos estudiantiles. Muchas veces no tenés una persona que te vaya a defender a vos. Entonces, si no tenés una persona que te vaya a defender a vos, necesitas auto defenderte.<figure class="image"><img src="https://cdn.eleco.com.ar/media/2023/10/centro_de_estudiantes_21_10_23_2.jpeg" alt="Centro de estudiantes 21-10-23 - 3"></figure>-En el presente la palabra “política” no tiene buena prensa. Como presidentes de centros de estudiantes ¿lo sienten así en ustedes y sus pares?Samuel: Es elemental terminar con ese punto de que la política es conflictiva. Es entender que la política es una herramienta de cambio, una herramienta de transformación, que fue tomada mal durante muchísimo tiempo. Y desde el punto de vista estudiantil, yo no tengo un referente que me represente a mí como estudiante. Entonces es muy complicado, en democracia, no tener a una persona que diga que me representa. Creo que ahora los adolescentes, y hablo por mí, estamos en una crisis de representatividad enorme. Y es eso lo conflictivo que hace que la política sea mal vista, no tener como un buen representante.Santiago: Hablar de política no tiene nada malo, es como que te sentás a hablar con tus propios compañeros para ver qué querés hacer. Nos juntamos con los chicos del centro y vemos lo que hacemos o queremos hacer, y bueno, vas sabiendo lo que es la política.Chabela: Cuando estoy con mis compañeros en Centro no siento que estemos haciendo la misma política que hace un presidente. Sí es lo mismo, tiene el mismo nombre, lo tratan de juntar, pero no siento que sea lo mismo. Creo que en el Centro nos están formando para participar como ciudadanos. Nos convocaron para que todos los estudiantes pudiéramos entender lo que es el Estado.Agustín: A mí me parece igual que uno tiene que entender que cuando se habla de política, lo que se está diciendo es que hay que tratar los asuntos que nos incumben a todos. Y por eso está bien hecha la separación de lo que es política de Estado y política estudiantil.&nbsp;Como presidente del centro de estudiantes, yo trato los temas que le interesan a los alumnos de mi escuela. Además creo que porque somos de una escuela técnica, vamos todos por el mismo camino. Ya por el hecho de ser Técnica, es como que la mirada es más simple, más sencilla. Esto sirve, esto no sirve. Y siempre vamos por la practicidad. No nos enfocamos tanto en las discusiones, a pesar de que tengamos disidencias ideológicas y demás, siempre vamos por mejorar la escuela. Entonces, eso es la política para nosotros. No tiene nada malo, al contrario. Si vos te ocupás de mejorar la calidad de tus representados, no tenés por qué relacionarlo con algo malo. Y eso los alumnos de mi escuela creo que lo tienen bastante claro.-Los cuatro son alumnos de escuelas públicas. ¿Sienten que hay cierta amenaza hacia la escuela pública? Más allá de lo partidario, de parte de un discurso que rechaza lo público sobre lo privado.Santiago: Me genera miedo. Votar a una persona que quiere liberalizar todo, es como que te estás sacando vos tu propio derecho. Estás diciendo que hay que pagar una escuela que te da un voucher. Yo creo que hoy tendríamos que pensar con la cabeza. Sabemos que hoy como Argentina estamos pasando muchas cosas malas, pero tampoco estamos tan mal. Y si hay que votar, hay que votar con el corazón, no con bronca. Entonces hay que votar bien. Votar porque las escuelas públicas tienen que seguir siendo públicas.Agustín: Yo no sé si veo una amenaza. La educación pública está presente en Argentina desde que Sarmiento y Roca la instauraron. Y sigue siendo pública y va a seguir siendo pública. Gane quien gane. Porque todos van a tener acceso a ella. Ya sea de gestión estatal o de gestión privada. Más allá de que un voucher después uno lo tenga que pagar.&nbsp;La idea en realidad sería que las cosas mejoren en general. Yo apunto a que uno pueda ganar más, pueda encontrar laburo. Después tenga los recursos para poder pagarlo sin que a uno le duela esto de tener el voucher. Durante la formación uno tiene que lograr aprender. Yo creo, por ejemplo, que actualmente el título secundario se está desvalorizando un montón. Pero es porque hay una falla en lo que es el sistema educativo.&nbsp;Chabela: Yo creo que la crítica va al Estado, pero va también al sistema educativo como es. No estamos hechos para estar sentados más de 6 horas. Paso por la primaria y veo a los chiquitos ahí sentados. Yo no estoy en todo caso de acuerdo con cómo funciona el sistema educativo en sí. Siento que podemos seguir avanzando.Samuel: Veo en los adolescentes primero esta crisis de representación, y también veo mucha desinformación. En el sentido de que vemos los medios y nos dicen una cosa. Vamos a nuestra casa, aparece otra. Vamos a las redes sociales, aparece otra cosa. Vamos a la escuela, nos dicen otra cosa.&nbsp;Primero hay que verdaderamente sentarse y leer las propuestas y después discutirlas. No quiero meterme en la discusión de si es público o no es privado, pero hasta el momento no hay propuestas de campaña de privatizar todo. Hay propuestas que son como voucher, pero no es algo de privatización. Y no me voy a meter si está bien o si está mal, pero primero creo que como Centro de Estudiantes tenemos que dar un mensaje que nos informamos y después vamos a votar. Eso es lo fundamental para mí.&nbsp;- Como presidentes de centros de estudiantes ¿Cuál creen que es la principal preocupación, la principal demanda de los jóvenes en este momento?&nbsp;Samuel: Yo creo que la mayoría de los jóvenes, o de mis amigos, no tienen una preocupación tal porque quieren irse. Entonces no hay una preocupación porque saben que van a irse del país, proyectar su vida en otro lugar que no sea la Argentina. Y recién, por todo lo que salió acá, tampoco queremos ir a votar y tampoco nos sentimos identificados. Pero tampoco nos movilizamos.&nbsp;Es decir, tampoco los adolescentes quieren resolver sus problemas, o no lo dan a entender. O sea, estamos en la era de la información, pero no del conocimiento. Recibimos muchísima información, pero no hacemos nada con eso, entonces nuestros problemas quedan ahí. Pero contestando a la pregunta, yo creo que es pensar en el futuro, decir, bueno, ¿puedo vivir en la Argentina o me tengo que ir?.Santiago: Pienso lo mismo que dijo Samuel, es si podés tener un futuro acá o no.&nbsp;Chabela: Tengo mucha gente alrededor mío que se quiere ir del país, pero también nace esto de “aprobar y ya está”. Muchos no disfrutan la secundaria. Me parece una cosa terrible que un adolescente no disfrute estar en la secundaria, que no disfrute estar aprendiendo.&nbsp;

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Jóvenes presidentes de Centros de Estudiantes: “Nuestra preocupación es si podemos tener futuro acá o no”

Entrevista a fondo con 4 jóvenes que presiden centros de estudiantes de diferentes escuelas de Tandil.