En Tandil también se siente la baja de ventas en comercios minoristas

La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) dio a conocer el Índice de Ventas Minoristas Pymes del mes de mayo, que arrojó una baja de 2,8 por ciento a nivel nacional.

Consultado por la situación a nivel local, el responsable del Área de Comercio de la Cámara Empresaria de Tandil, Emiliano Salvarezza, señaló de que las mismas bajas se registran en la ciudad. Además precisó detalles de una realidad compleja cuyas principales causas ubicó como parte de un “problema macroeconómico”.

En diálogo con El Eco Multimedios, Salvarezza sostuvo que la baja registrada por el informe de la CAME dio cuenta de “un panorama complicado porque se suma a los 5 meses que van del año en baja, casi de un 2 por ciento desde enero a mayo y las ventas han bajado en casi todos  los rubros”.

Se refirió en particular a rubros que registraron mermas significativas, como el de indumentaria y textil que bajó un 8 por ciento, y alimentos y bebidas, cuyas ventas descendieron un 4 por ciento. “Son bajas considerables que hacen que la actividad se resienta fuertemente”, indicó. El único sector que no arrojó bajas, agregó, fue el de farmacias.

A su vez señaló que en los comercios de la ciudad “todos los meses hay cambios de precios”, en consonancia con los aumentos que anuncia el INDEC, incluso algunos en cifras mayores. 

Frente a este panorama, planteó, “cada comerciante busca siempre hacer promociones y aumentar las ventas desde su lugar. Saben que se viene el Día del Padre que es un día importante para el comercio”. 

Recordó en ese sentido que desde la Cámara Empresaria impulsan para dicha fecha una acción de promoción de ventas a través de premios, para la cual, en el sitio web de la entidad todavía se encuentra abierta la inscripción para los comercios que quieran participar.

“Hoy en día la gente busca precios, busca promociones, compara por todos lados y muchas veces no pueden comprar. Eligen no comprar porque no llegan a los montos”, lamentó. Sin embargo consideró que como comerciante mantiene el optimismo. En general, expresó, en cada uno de los distinto no se resignan a pausar las ventas aunque los números no cierren.

“Estamos configurados para vender”, aseguró, aunque agregó que para los comerciantes resulta difícil hasta reponer la mercadería, aún más al no contar con financiación para tal fin.

“Vos vendés 1000 pesos con Ahora 12, y a los 10 días cobrás 570 pesos, es decir un 43 por ciento menos. De ahí tenés que girar y reponer, y te encontrás con faltantes, precios aumentados, y es muy difícil la reposición para seguir en la rueda. Es lo que nos ha tocado, ojalá esto mejore un poco”, ejemplificó.

Un problema macro

Salvarezza planteó que existen dos “cuellos de botella que frenan el consumo”. El primero los faltantes que imposibilitan las reposiciones de los comerciantes. El segundo, señaló, los intereses de las tarjetas de crédito.

El aumento de topes anunciado el mes pasado por el Gobierno Nacional “no mueve la vara” consideró argumentando que se trató de una medida que equiparó dicho número con el de la inflación. 

“Ayuda, porque para una familia que pueda financiarse un poquito más es algo importante pero no hace la diferencia en la actividad en general”, sostuvo.

A su vez brindó un detalle alarmante. “Se está viendo que se está usando la tarjeta para comprar alimentos, que es una de las peores cosas que puede tener la economía. Que las personas necesiten endeudarse para comprar alimentos”, indicó.

“Desde el lado de los comerciantes buscamos todas las opciones. Buscamos tarjetas que se rechazan, buscamos otras, a veces vienen los clientes acompañados de algún familiar que presta, pero es muy difícil”, expresó.

Sin embargo consideró que no observa una medida puntual que vaya a estabilizar la situación. “Esto es un problema macro, no lo vamos a resolver desde Tandil. Es estresante e imposible vivir así, aumentando precios todos los meses, buscando mercadería porque hay faltantes, fábricas que no pueden producir”, concluyó.