Desde la Usina aseguran que muy pocos hogares de Tandil perderán el subsidio
Porque no consumen más de 400 kilowatts. El gerente técnico de la Usina Guillermo Saab aseguró que el promedio de consumo de los usuarios de la ciudad está entre 180 y 200 kilowatts por mes. Un porcentaje menor de hogares supera el número a partir del cual se pierde el subsidio.
A partir de la nueva reglamentación que establece que el consumo de electricidad dejará de estar subsidiado a partir de los 400 Kilowatts el gerente técnico de la Usina Guillermo Saab aseguró que en Tandil hay un porcentaje muy bajo de hogares que superan ese consumo.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailEn ese sentido, afirmó que 400 kilowatts es un valor “alto” y que del promedio de 60 mil medidores que hay en la ciudad, la mayoría no llega a los 300 kilowatts.
“Tenemos vecinos que los superan pero en general son o casas muy grandes, con mucho equipamiento, mucho confort, o casas que están alejadas de la zona urbana que están sin capacidad de tener gas”, indicó.
Y agregó que “el promedio nuestro es entre 180 y 200 kilowatts por mes de los 60 mil medidores que hay tipo residencial en distintas categorías. Por arriba de los 400 que es donde se perdería el subsidio el orden varía depende la época del año, en esta época de frío son alrededor de 8 mil medidores”.
“En otro momento capaz que son 3, 4 ó 5 mil, en época de verano se vuelve a repetir esta situación de gente que usa mucho aire acondicionado, pero entre el 10 y el 12 por ciento de la población tiene consumos que superan los 400 kilowatts mensuales, por distintos motivos, muy grande, mucho equipamiento, o falta de gas de red, la ecuación económica contra el gas envasado es notoria, hasta ahora al menos”, afirmó.
Ahorro del consumo
En cuanto al ahorro en el consumo, Saab advirtió a los usuarios que “todo lo que es levantar temperatura o enfriar, es decir cambiar la temperatura ambiente por otra cosa genera consumos grandes”
Y graficó que “un microondas consume bastante, pero en general se usa muy poco tiempo para calentar la comida, una pava eléctrica consume mucho, pero en dos minutos el agua ya está caliente con lo cual no genera la diferencia a fin de mes. La diferencia más grande está básicamente en esta época del año en la calefacción”.
“Si uno tiene esos calefactores eléctricos, que uno los lleva a la habitación, a la cocina, al baño antes de ducharse, y los tiene bastante tiempo prendidos consumen mucho porque realmente son de muy mal rendimiento, es un alambrecito que se calienta, cambia de color y eso es lo que da calor”, indicó.
En cambio, un aire acondicionado frío calor de última tecnología, que se que se llaman inverter, “por la forma de control y el compresor y tienen termostatos entonces uno puede regularlo por lo cual no está en funcionamiento todo el tiempo, sino que logra una temperatura y frena y después vuelve a arrancar”.
“Esos tienen un consumo más acorde a un uso eficiente de la energía, es tecnología nueva y hoy casi todos los equipos que van conectados a la red eléctrica vienen con un etiquetado, es una señal de la eficiencia del equipo, es decir cuánto consumen para provocar el mismo efecto sobre por ejemplo un freezer, que tenemos comida y queremos que se congele. Entonces cuanto más cerca de la letra A, y color verde son los equipos que mejor rendimiento tienen, consumen menos para hacer lo mismo”, detalló.
Respecto a la iluminación, explicó que “usando todas luminarias LED, hay un ahorro muy importante frente a las luminarias viejas, no las de bajo consumo sino las anteriores, y se nota eso”.
“Hoy si uno tiene iluminación LED en la casa el tip que dábamos de apagar la luz cuando nos vamos hay que hacerlo por una cuestión de conciencia pero no se ve reflejado tanto en la factura. Si bien uno siempre aboga por si no hay nadie en la habitación apaguemos la luz, a la larga sobre la facturación final a fin de mes eso no es lo crítico”, afirmó.
Y agregó que “lo crítico es por ejemplo regular el aire acondicionado a muy alta temperatura. Hoy uno viene de la calle con temperaturas de 4 o 5 grados y si entra a una casa y el termostato del equipo está en 19 o en 20, uno se siente confortable ahí adentro de la casa con esa temperatura, no hay que llevarlo a 22 o 23 grados, y la diferencia en consumo es muy grande, cada grado que nosotros modificamos del termostato hay mucha diferencia a fin de mes, porque son muchas horas que el equipo funciona”.
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