Crece la preocupación por el desabastecimiento en los comedores barriales

El gobierno de Javier Milei, junto a la Ministra Sandra Pettovello, buscó la eliminación de intermediarios a la hora de entregar beneficios para los más necesitados. Como consecuencia de esta política, los comedores barriales de la ciudad de Tandil se encuentran sufriendo desabastecimiento en un periodo donde aumenta la demanda por la situación económica del país.

Paola Quero, quien lleva adelante un comedor en el barrio La Movediza, habló con El Eco de Tandil y contó cómo atraviesan una situación cada vez más complicada con el tema de las provisiones alimenticias en un contexto que día a día se vuelve más adverso. En ese sentido, comentó que Nación sigue con la misma mirada de no entregar alimentos a los comedores y también que “desde Municipalidad tampoco hemos tenido respuestas”. 

Al mismo tiempo agregó que se le entregó a Juliana Teerink, a cargo de la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat, el listado con los comedores y la gente que asiste a los mismos pero no recibieron más llamados desde el gobierno local.

Hasta el cambio de gestión a nivel nacional, la logística de trabajo indicaba que las organizaciones populares recibían la mercadería a través de Nación y luego la distribuían entre los comedores. Hoy el Ministerio de Capital Humano, con Sandra Pettovello a la cabeza, decidió cortar con esos intermediarios y realizó una auditoría que disparó la suspensión de las provisiones. 

La situación es compleja en todo sentido. Nación ya no envía alimentos como lo hacía anteriormente y la necesidad de la gente fue en aumento durante los últimos meses. La referente barrial contó que en el comedor previamente asistían a 165 personas y hoy superan las 200. Por esta razón, ante la falta de provisiones, tuvieron que suspender un día de cocina ya que no llegaban con la mercadería y les era imposible trabajar. “La situación es desesperante porque no sabés qué hacer”, comentó.

Una de las cuestiones que más inquieta a Quero es el futuro de los comedores. Si la situación sigue tal cual como está hasta ahora, analizó que “va a llegar un momento que no vamos a poder seguir aceptando más familias y no vamos a tener más insumos”, y luego vaticinó: “Los comedores están cerrando porque no tienen insumos y ya no pueden sostenerlo. Es lo mismo que nos va a pasar a nosotros. En algún momento no vamos a poder sostenerlo, se nos va a ser muy difícil”.

La referente barrial destacó que nunca tuvieron entrega de mercadería desde Provincia, siempre fue desde Nación, mientras que con el Municipio mantuvieron reuniones con todos los concejales pero “no pasó nada” a pesar de que se presentó un proyecto de ordenanza de la mano de Nicolás Carrillo. “Vemos que tampoco hay voluntad de hacer las cosas bien. Del lado de ellos no tenemos respuestas”, afirmó. 

La respuesta de Juliana Teerink

Desde este medio se comunicaron con la secretaria de Desarrollo Humano y Hábitat, quien confirmó las reuniones con los referentes de los comedores y aclaró que “nosotros como Municipio no teníamos la posibilidad de acceder a ese acompañamiento en términos de alimentos, si de la Provincia de Buenos Aires donde aún hoy se sostiene bimestralmente la entrega de mercadería. Si bien ha habido una reducción, la mercadería está y es con la que estamos trabajando junto con la del Municipio”.

Teerink comentó que el gobierno local no tenía contemplada en la partida presupuestaria la posibilidad de adquirir mayor cantidad de alimentos para acompañar a estos espacios. Esta situación repercute en el programa alimentario que lleva adelante el Municipio de Tandil. Según comentó la funcionaria, actualmente alrededor de 2500 familias reciben la asistencia bajo el esquema de seguridad alimentaria. El mismo es un apoyo económico que se deposita en la cuenta de las personas beneficiarias. 

Por otra parte, desde Desarrollo Humano y Hábitat confirmaron que la demanda de la asistencia incrementó en los últimos meses. La respuesta del Municipio fue a través de los módulos de alimentos secos donde, según comentó: “hemos notado el incremento de 200 módulos de entrega mensual a casi 500 módulos, desde febrero y marzo”.

A su vez, la funcionaria afirmó que no hay diálogo con Nación y remarcó: “Quisiéramos tener mayores certezas y una interlocución válida con alguien del gobierno. No la hay, no estamos teniendo esa posibilidad” y agregó que la Provincia tampoco está teniendo esta información para evaluar cómo reasignar los recursos que tiene en sus 135 municipios.