Memoria
24 de Marzo: el Concejo aprobó crear un espacio para recordar los 37 desaparecidos tandilenses
“Los pueblos que se olvidan de lo que sucedió vuelven a repetir lo mismo otra vez”, plantearon en una sesión especial.
El Concejo Deliberante aprobó por unanimidad la creación en el Municipio de un espacio reservado y destacado en recuerdo de los 37 tandilenses que fueron desaparecidos por la dictadura cívico militar que comenzó en el año 1976.
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La iniciativa fue impulsada por la Comisión de Derechos Humanos, Género, Garantías y Seguridad tras una reunión con el grupo Memoria por la Vida en Democracia, y refrendada con el aval de todos los bloques en el marco de una sesión especial llevada a cabo con motivo del Día Nacional por la Memoria, la Verdad y la Justicia que se celebrará como todos los años el próximo 24 de marzo.
Dentro del recinto estuvieron presentes referentes de derechos humanos de la ciudad como el mencionado grupo Memoria y la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, quienes concurrieron con pancartas con la leyenda “Son 30 mil, Memoria, Verdad y Justicia”.
También asistió el ex concejal Roberto Mouillerón, quien fuera parte del cuerpo durante 1973 y 1976 hasta que un operativo al mando del entonces teniente coronel Julio Zanatelli depuso al intendente Jorge Lester y como primera medida disolvió el Concejo Deliberante.
“30 mil compañeros detenidos desaparecidos, presentes, ahora y siempre”, expresaron a coro los integrantes de grupos de derechos humanos luego de que se haya dado el visto bueno al recordatorio a las víctimas de la ciudad.
La sesión comenzó poco después de las 8:30 del viernes y tomaron la palabra los ediles integrantes de la Comisión de Derechos Humanos. En primer lugar quien la preside, Nicolás Carrillo de Unión por la Patria, y luego Guillermina Cadona de Juntos – UCR, Juan Manazzoni del PRO, Federico Sánchez Chopa de La Libertad Avanza – Acción Tandilense y Oscar García Allende de Alternativa Tandil.
Carrillo inició repudiando el ataque sufrido en Capital Federal por una integrante de la agrupación HIJOS a quienes dos hombres que ingresaron en su domicilio la vendaron, abusaron y amenazaron de muerte además de dejar pintada la sigla VLLC.
El concejal hizo un repaso por la historia de los movimientos de derechos humanos en la ciudad, y planteó además que “no es verdad que la dictadura se haya caído por su propio peso, se cayó por la lucha de nuestro pueblo, y eso es lo que queremos reivindicar. Y cuando lo reivindicamos y lo tenemos más presente que nunca, no es una cuestión de memoria estancada en el pasado, de una memoria inmovilizada, es una memoria que se traza hasta el futuro, porque cada militante que lucha en nuestra ciudad para los barrios, contra la violencia de género, por derechos humanos básicos, derechos de alimentación, por empleo, seguridad, lucha contra las adicciones y una vida digna, está continuando ese legado”.
Las voces de los concejales
En el marco de las alocuciones de cada integrante de los diferentes bloques, Guillermina Cadona planteó que “hoy es un día de reflexión y de memoria”, y agregó que “las fuerzas armadas violaron todos nuestros derechos con la excusa de la reorganización nacional, instalando un terrorismo de Estado en el cual se aplicó un gran exterminio y represión que sometió a miles de personas. 30 mil desaparecidos, robos de bebés que fueron privados de su identidad, secuestros, exilios, torturas, robos de bienes y relatos que cuando alguien nos lo cuenta siguen generándonos dolor y angustia. Fue la dictadura más sangrienta de la historia del país, y fue un golpe cívico militar, porque los militares no actuaron solos”.
Juan Manazzoni hizo una mención especial por “todos aquellos hombres y mujeres que, en nombre de Jesús, pelearon por una sociedad más justa, no violenta, por la promoción social en opción por los pobres”, en referencia al Monseñor Angelelli, asesinado en La Rioja, entre otros.
Desde su historia y vínculo personal con una de las desaparecidas de Tandil, Oscar García Allende manifestó que “personalmente, conozco esta historia habiéndola vivido”, y narró cómo acompañó a un amigo suyo a acontecimientos históricos como la llegada de Juan Domingo Perón a Ezeiza.
“Nunca voy a olvidar ese pasto frío sobre en el que estuve tirado durante horas y sentí por primera vez en mi vida lo que es el terror. Hay que recordarlo, porque los pueblos que se olvidan de lo que sucedió vuelven a repetir lo mismo otra vez”, destacó.
Federico Sánchez Chopa planteó que “cuando podamos despojarnos de los intereses políticos que existen en nuestro territorio, podremos alcanzar la reconciliación que los argentinos anhelamos y deseamos. Por eso, nunca más a la violencia como camino ni a cualquier tipo de organización o tratamiento que ponga en riesgo la integridad, la convivencia pacífica y la democracia que tanto nos ha costado lograr”.
El concejal Darío Méndez fue el último de los oradores y expresó que tanto como militante como ciudadano posee una profunda preocupación porque “cuando repetimos las consignas de memoria, verdad y justicia que tienen un arraigo en el pueblo argentino no lo hacemos anclado en el pasado sino justamente para que no vuelvan a suceder estos hechos”.
A su vez extendió su preocupación hacia las principales figuras del gobierno nacional, y “las opiniones vertidas por varios miembros” como la vicepresidenta que “es reconocida en su pensamiento y defensa de genocidas”. Además consideró que “es peligroso que desde la gestión del Estado Nacional volver a poner en tela de juicio ciertos procesos que ya la sociedad había saldado y que el ministro de Defensa Luis Petri se haya fotografiado con familiares de genocidas que hace mucho tiempo buscando el indulto y la impunidad de quienes ya han sido castigados por la justicia argentina”.
