Ante la escalada de la hepatitis aguda en niños, desde Tandil expusieron los síntomas y pautas de prevención

Una nueva alerta epidemiológica alarma a nuestro país, luego que el Ministerio de Salud a través del Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC) emitiera un informe sobre la aparición de casos de hepatitis aguda grave de causa desconocida en niños, a fin de prevenir a los profesionales de la salud de los establecimientos públicos y privados a escala nacional.

Esto sucede, luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertara y comunicara sobre estos casos días atrás y, al respecto, la médica pediatra Nancy Guerrero conversó con el ciclo radial “Cosas que Pasan” de Tandil FM (104.1) confirmó que los alcances del brote que se inició en Gran Bretaña todavía no tienen causa confirmada al momento. 

Al respecto, aclaró que todas las hepatitis en los niños tienen causas virales, tóxicas o autoinmunes, pero puntualmente las virales son generalmente indeterminadas. Entonces, estos casos agudos sin motivo no es algo que llame tanto la atención, sino que el alerta se da por el alto porcentaje de pacientes que requiere trasplante.

Vale repasar que el pasado 5 de abril, el Reino Unido manifestó el incremento de estas afecciones. Las características oscilan entre el mes de nacido y los 16 años, y en la mayoría de los casos no presentan fiebre, y en ninguno de ellos se han detectado los virus asociados a a hepatitis A, B, C, D y E, según la OMS.

Hasta el 3 de mayo se han reportado más de 200 casos en 20 países, y aunque todavía en Argentina no se ha reportado ningún caso, recomendaron monitorear la situación en toda la región. 

Sintomatología y alerta

Tal como identificó la médica, alrededor del 10 por ciento de los pacientes afectados con el virus requiere de trasplante, lo cual consideró un número “altísimo”, sobre todo considerando que antes de la vacunación contra la Hepatitis A el índice era de uno cada mil.

De esta manera, explicó que más de las habituales evolucionan hacia casos irreversibles y se necesita acudir a un centro de trasplante. En este sentido, contó que en algunos casos se identificó el adenovirus, que si bien no es el principal productor de estas enfermedades, sí puede producir hepatitis o cuadros respiratorios, o bien gastrointestinales.  

“Si bien este germen se detectó en el 40 por ciento de los 200 casos europeos, no puede decirse que sea la causa, y aunque pareciera que hay alguna relación sería muy precoz afirmarlo”, asentó.

Con respecto a la sintomatología, Guerrero confirmó que comienza del mismo modo que las demás hepatitis. En el caso de la clase A, generalmente, aparecen después de haber tenido el virus durante algunas semanas, pero no necesariamente todas las personas lo manifiestan. 

Cuando se expresan, esos signos son fatiga, náuseas y vómitos repentinos, dolor o malestar abdominal, especialmente en la parte superior derecha debajo de las costillas inferiores (en la zona del hígado), evacuaciones intestinales de color arcilla, pérdida de apetito, poca fiebre o nula. 

“Lo que es muy llamativo es que los niños comienzan a tener orina de color oscuro, no es naranja, sino que parece coca cola”, resaltó. Además, pueden presentar dolor articular, color amarillento en la piel y en la parte blanca de los ojos (ictericia), y picazón intensa. “Cuando esto pasa, los papás deben consultar inmediatamente, más allá de esto que se está viviendo ahora”, recomendó

Estos síntomas pueden ser relativamente leves y desaparecer en pocas semanas. Sin embargo, a veces, la infección por hepatitis A ocasiona una enfermedad grave que dura varios meses.

“No tenemos que sembrar la alarma, si el alerta”, enfatizó e invitó que cuando se reconozcan cualquiera de esas características es necesario acudir a la consulta, sin pensar que van a presentar ese tipo de hepatitis aguda o grave, sino para buscar la causa. 

Prevención                                

La pediatra reconoció que desde que en 2006 se instaló en el Calendario Nacional de Vacunación (CNV) la preventiva contra la hepatitis A, los casos disminuyeron hasta un 80 por ciento, incluso desde 2011 se dejaron de hacer trasplantes hepáticos por esta causa. 

Además, recordó que también hay vacuna en el CNV contra la hepatitis B, aunque hay otras virales (C, D y E) para las que no hay inoculación.

Como pauta de prevención apuntó a un niño adecuadamente vacunado. Lavado de manos frecuente y  toser o estornudar en el pliegue del codo, dado que el adenovirus se transmite también por la vía aérea.