LAS MARULAS: el emprendimiento que enamora a Rosa

Rosa es, desde hace mucho tiempo, pastelera profesional, pero cuando sus hijas eran chicas tuvo que salir a trabajar para colaborar con la economía del hogar. Una vez que crecieron, pudo independizarse y dedicarse a lo que a ella le gustó siempre; así fue cómo ingresó en la Cooperativa Gastronómica Juana Azurduy. Siete años después, en una charla con su hija mayor, que hoy tiene 33 años, consideró que esa era una etapa concluida, y así empezaron a pensar y, al poco tiempo, nació Las Marulas; su emprendimiento, que la tiene completamente enamorada. 
 
Rosa Inés Meléndez, nació hace 55 años en Las Flores y a los 21 se casó en Tandil. Este proyecto que es suyo pero también de su familia, que la acompaña y apoya, arrancó con un primer objetivo: conscientizar sobre la alimentación saludable. Y, entonces, pensaron en hacer pastelería y panificados realizados a base de harina integral. Había que planificar a quién iban a apuntar, y de qué manera iban a hacerlo.  Tras esto y luego de varias pruebas en su cocina, Rosa empezó a convertir recetas clásicas cambiando harina blanca por harina integral. Siempre, asegura ella, poniéndose del lado del cliente. 

Las Marulas creció tras horas de estudio, trabajo, prueba y error para que el producto elaborado por Rosa, sea bueno desde el primer bocado al último; y que el cliente vuelva, por supuesto.

Rosa elabora desde piononos, postre balcarce, budines, panes, pizzas, alfajores de maicena, scones, pizzetas, pero todo con harina integral. Sin conservantes, al ser naturales, los productos tienen vencimiento a los 15 días.

Su rutina es diaria. Rosa elabora en su cocina con habilitación municipal y las normas correspondientes, y siempre, la música que acompaña. Entran los pedidos, chequea la materia prima y se arranca a trabajar. Rosa es quien se ocupa de la elaboración, de principio a fin. Las recetas son estandarizadas y se controlan por peso e ingredientes. 

La mayor parte de las ventas las hace por las redes, aunque también tiene un showroom. 

Para que Las Marulas se mantenga y pueda seguir creciendo, Rosa, su marido y sus dos hijas hacen un trabajo enorme, con mucho sacrificio. 

¿Objetivo? es crecer y poder generar trabajo. 

¿Desafío? llegar a la vejez con algo propio.

¿La vedette? los budines. 

En Instagram: @las_marulas
En WhatsApp: 249 4654490

Si querés mostrar tu emprendimiento, escribime a sofiarojo@eleco.com.ar o a @sofiarojo.tandil