Con “rebusques” y aprovechando promociones, comenzaron las ventas de la canasta escolar en Tandil

Se acerca la fecha del inicio de clases y como cada año comenzaron las ventas de la canasta escolar. El Eco de Tandil recorrió locales dedicados al rubro para conocer la situación del sector, y consultar los precios con los que los padres se encontrarán al momento de comprar lo necesario para llenar la mochila. 

De acuerdo al calendario oficial establecido por las autoridades, el ciclo lectivo 2023 iniciará el miércoles 1 de marzo en toda la Provincia de Buenos Aires. Las librerías de la ciudad se preparan para su pico de venta anual, y ya pueden verse cómo transformaron sus vidrieras en las que lucen útiles, mochilas, cartucheras y muchos otros elementos, promocionando la “Vuelta al cole”.

¿Cuánto sale la canasta escolar?

Como en muchos otros rubros comerciales, existe en cada uno de los productos de la canasta escolar una amplia variedad en cuanto a precios y opciones. Incluso en un mismo comercio, los valores pueden variar en hasta miles de pesos dependiendo de los modelos y sus características.

Los cuadernos clásicos, de 16 x 21 con tapa dura, pueden conseguirse desde 450 hasta poco más de 1000 pesos. Los cuadernos de tipo universitario, anillados, comienzan en 500 pesos.

Las carpetas número 3, para escuela secundaria, arrancan desde 600 pesos hasta 2250 pesos, dependiendo tanto de la calidad, como si se trata de diseños lisos o ilustrados. Los repuestos de hojas se consiguen por alrededor de 3mil pesos, pero también comienza a observarse nuevas opciones como las de caña de azúcar.

Las tijeras se ubican alrededor de los 200 pesos, lo mismo que los correctores, mientras que las gomas pueden conseguirse por 90 pesos. Los adhesivos sintéticos, por poco más de 100.

Los márgenes son mucho más notorios cuando se trata de cartucheras y mochilas. Las primeras, tipo canopla, se consiguen a partir de los 1500 pesos. Pero su valor puede escalar hasta los 10 mil cuando se trata de ilustradas con motivos de personajes, múltiples niveles y cierres reforzados.

Lo mismo sucede en las mochilas. Los modelos básicos arrancan a partir de los 3500 pesos. Pero si se trata de las versiones con “carrito” o aquellas con diseños especiales, sus valores ascienden desde los 15 mil hasta los 35 mil pesos.

En un concurrido local de calle Alem, que ya luce en su vidriera indumentaria escolar, los guardapolvos para jardín tipo pechera comienzan en 1800 pesos, mientras que los que poseen mangas cotizan poco más de 2 mil pesos.

Los guardapolvos blancos varían su valor de acuerdo al talle, y pueden conseguirse entre los 2600 y casi 7 mil pesos. En el mismo comercio, las chombas blancas cuestan entre 1900 y poco más de 3 mil pesos, mientras que en “oferta” se encuentran los pantalones joggin, a partir de los 1800 pesos. 

La voz de los comerciantes

En un contexto en el que la inflación oficial se aproximó al 100 por ciento anual, la canasta escolar no se quedó atrás y aumentó en sintonía en la mayor parte de sus productos. Como se sabe, el papel tuvo una considerable escalada de valor en el último año, marcada principalmente por su escasez.

“Hubo aumentos de todo tipo, y se aceleraron en los últimos 3 meses. Hay un ajuste generalizado que se desprende de toda la situación económica en general”, expresó Raúl, al frente de Librería Nancy. 

En el local de la avenida Perón, con más de 40 años de experiencia en el rubro en la ciudad, ya se siente el movimiento cercano al inicio de las clases. 

“Arrancamos en enero con las ventas, pero se nota que es más medida que otros años”, precisó su dueño, quien agregó que “nosotros tenemos convenios con sindicatos, empresas, y todas las promociones de tarjetas, pero el cliente compra hasta que llega a un límite. La gente deja productos para el mes siguiente o espera a ver si lo piden en la escuela”.

Por su parte Gabriela, responsable de De Librería, un local nuevo en el sector ubicado sobre calle 14 de Julio, también dio cuenta de los aumentos, que estimó cercanos al 100 por ciento, pero los cuales se dispararon principalmente sobre fines del año pasado.

En este contexto, coincidieron los comerciantes, los clientes aprovechan promociones y ofertas de diferentes bancos, incluso las esperan para concretar las compras en cantidad y valerse de los descuentos y reintegros.

Además, en mayor medida que otros años, se observan los “rebusques” que llevan a cabo padres y madres con el fin de ahorrar, aunque sea lo mínimo, a la hora de “llenar el changuito” para empezar la escuela. 

“La gente viene comprando desde noviembre pasado, gasta hasta que le devuelven el tope, van llevando de a pocos útiles, y así las madres que son más previsoras fueron armando el kit de colegio”, sostuvo Gabriela. 

También se observan grupos de padres que se organizan para comprar en cantidad, o quienes prefieren buscar por internet para concretar sus compras online. También quienes, de manera contraria a los “previsores”, aguardarán hasta que empiecen las clases para saber exactamente cuáles serán las demandas en cada escuela y luego adquirir lo necesario.

Poco o mucho, justos u holgados, buscando las primeras marcas o aquellas más económicas, las ventas ya comenzaron porque se trata de artículos de primera necesidad.