Un nuevo comienzo
Recuerdo hace un año el primer día de clases de mis hijas, en su nuevo jardín, con nuevos compañeritos, nuevas maestras, en su nueva ciudad Tandil que con tanto amor nos recibió.
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Ellas ansiosas y expectantes, y yo igual pero tratando de que no se me note demasiado, viviendo lo mismo que ellas; casi, casi a la par, porque para mí también era todo nuevo… Nuevas madres, maestras, institución, dinámica, lugar… Todo por descubrir.
Allá por marzo de 2020, a tres escasas semanas del comienzo, ya sintiendo que estábamos casi “adaptados” a la nueva rutina, irrumpió el Covid-19 y todo lo que imaginábamos presencial, de repente, comenzó a desvanecerse, para después re-convertirse en virtual.
Debo confesar que tuve mis dudas de que pudiera funcionar, sobre todo en mi caso, con dos nenas de 2 y 3 años… Fue una enorme y grata sorpresa observar cómo los docentes y las instituciones comenzaron a armar propuestas con videos y reuniones virtuales… Algunos colegios más que otros, pero todos desde la plena vocación de servicio, la mejora continua y el amor por lo que hacen cada día para nutrir la vida de nuestros hijos.
El resultado para mí fue más que satisfactorio, porque si bien hubo muchas cosas que no se pudieron hacer por la virtualidad, todos de alguna manera nos convertimos un poco en maestros de nuestros hijos y valoramos aún más su labor: Los collages hechos con lo que teníamos en casa, las temperas logradas con jugos o gelatinas en polvo, las masas caseras para jugar, los juegos de sombras con la pared, los porotos germinando, el cuidado de las plantas, aprender los números jugando al bingo, imitar al profe de educación física haciendo juegos con obstáculos con ollas, platos, sillas y mesas… y tantas cosas más que tuvimos que adaptar en cada familia, a partir de la situación de no poder salir de casa, pero con la plena convicción de que el 2020 no sería un año perdido.
Desde lo más profundo de mi corazón, siento que todos aprendimos mucho del año que pasó y que este nuevo comienzo es también una oportunidad para valorar aún más este regreso a las aulas, cuidándonos, cuidando del otro y siendo muy responsables en cada una de nuestras interacciones.
Hace unos días, cuando recibí las pautas para el inicio de clases, sentí más que nunca la necesidad de involucrar a mis hijas en la preparación de sus mochilas con todos sus objetos personales, por un lado para que empiecen a tomar conciencia y se responsabilicen por lo que tienen que llevar y traer al jardín y por el otro, para que incorporen “el orden como valor clave”, en el cuidado y mantenimiento de lo que sea que hagan.
Creo que estos son momentos únicos de aprendizaje que les permiten a nuestros hijos adquirir nuevos hábitos de organización que, sin lugar a dudas, refuerzan siempre su seguridad e independencia al actuar. Realmente estoy convencida de que cuando los niños aprenden de chiquitos a preparar sus mochilas la noche anterior o a revisarla cuando vuelven de la escuela, o a dejar su ropa lista para el día siguiente -por supuesto con nuestra ayuda-, son pequeñas cosas que les aseguro que además de ser beneficiosas para ellos, se disfrutan en la familia y favorecen el espíritu colaborativo de los niños con el resto de los quehaceres del hogar.
La educación comienza en casa, nuestros hijos emulan lo que hacemos… Siempre pienso en algo que leí hace un tiempo de una psicóloga infantil que decía algo así:
“Los niños nacen puros, somos los adultos los que influimos en ellos y en la construcción de su ser, con nuestras palabras y actos”.
Hoy más que nunca debemos redoblar la apuesta a los cuidados y como dijo Maritchu Seitun en una nota reciente sobre el comienzo de clases, no volver en piloto automático… realmente algo cambió muy profundamente en el mundo entero.
Aceptar e incorporar nuevas formas de hacer, ser tolerantes y pacientes frente a las nuevas normativas y tener flexibilidad para los cambios que se puedan presentar serán claves para poder transitar y disfrutar este tan esperado y ansiado nuevo comienzo, siempre extremando los cuidados para todos y en especial por y para ¡nuestros hijos!
¡Feliz primer día de clases!