Quesos Don Atilio, 30 años de trabajo, calidad e historia en Tandil
Una firma emblema de la ciudad que cumple 3 décadas junto a la producción quesera.
Si hay una empresa que es sinónimo de Tandil y la producción quesera, es Quesos Don Atilio, la firma de la familia Magnasco que celebra hoy tres décadas de existencia. “Hace 30 años que estamos en este lugar, apuntamos por Tandil, seguimos creciendo y generando valor en la ciudad “, expresaron desde la fábrica en la que todos los días producen quesos para la región, el país y hasta el exterior.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu email
Con materia prima que compran a productores tamberos de la cuenca Mar y Sierras, procesan una amplia gama de productos como leche fluida, dulce de leche y ricota. Y por supuesto quesos blandos, ideales para la cocina; semiduros, especiales para picadas y acompañar con un buen vino; y duros, también para picadas y para rallar. Entre otros elaboran cuartirolo, cremoso, mozzarela, cheddar, ahumado, port salut, grana tandilero, gouda, banquete, saborizados, pategrás, fontina, barra tybo, reggianito, sardo, pepato, provoleta, provoleta parrillera y un queso especial estacionado.
“Lo que buscamos es calidad, el punto número uno es lograr un queso de buen sabor, que le guste a la gente, pero sobre todo calidad”, contó Juan Esteban. El socio gerente es tercera generación de queseros, pero la historia de la empresa que comenzó su abuelo se remonta mucho más allá en el tiempo.
Los Magnasco llegaron desde Italia a la Argentina en 1855, y comenzaron a trabar en la producción láctea. Con el paso de los años se convirtieron en una empresa referente del rubro en todo el país. El joven Atilio era gerente de la zona de Tandil, donde fabricaban quesos y mantecas en distintos establecimientos, entonces conocidos como “cremerías”. Fue él quien primero se dedicó a la producción agropecuaria y lechera, para finalmente en 1993 inaugurar la planta de elaboración que luego continuarían su hijo Esteban y su nieto Juan Esteban.
En el presente, trabajan en la fábrica más de 30 personas, y emplean casi una decena en puestos administrativos. Pero el impacto regional que generan es mucho mayor. “Es una industria que está 100 por ciento integrada, partimos de un grano que transformamos en leche con la que elaboramos productos que van a las góndolas”, indicó el socio gerente en relación al conjunto de colaboradores implicados en la producción quesera de Don Atilio. Desde las plantas elaboradoras de alimento, los tambos de la zona, a los servicios de logística, mantenimiento, distribución y muchos más.
Rumbo al futuro
A lo largo de estas tres décadas, a fuerza de trabajo y dedicación, Don Atilio ha sumado instalaciones, maquinarias, y recursos tecnológicos que le permitieron crecer en la producción y el procesamiento de litros de leche, así como mejorar e incorporar nuevos elaborados.
Desde hace cuatro años atrás comenzaron un proceso de puesta a punto de sus establecimientos con el fin de acceder a la posibilidad de ampliar el mercado y exportar sus elaborados. La iniciativa surgió a partir del interés de un importador, y luego de hacer las remodelaciones y habilitaciones correspondientes, por lo que recientemente comenzaron a exportar.
Así, la provoleta en horma de 4 kilos, y las porciones condimentadas de 350 gramos para góndolas, se comercializan en Estados Unidos. En paralelo, envían muestras de otros productos a los fines de continuar ampliando el mercado.
De cara al futuro, en Don Atilio se encuentran trabajando en un proyecto de concentración de suero. Para eso realizan una considerable inversión en tecnología y maquinaria que les permitirá extraer un concentrado que podrán ofrecer en sectores como el industrial, el farmacéutico, así como también en panificadoras.
El suero seco en polvo, explicó Juan Esteban, tiene la posibilidad de comercializarse en mercados de exportación. Además de la diversificación productiva, el proyecto producirá un impacto ambiental positivo, ya que agregarán valor a un producto que actualmente resulta de descarte.
Don Atilio forma parte también del Clúster Quesero, donde confluyen casi 20 fabricantes asociados. “Se armó una linda sinergia, compartimos información, nos solucionamos problemas los unos a los otros”, señaló Juan Esteban. En el marco de ese organismo, desarrollan en conjunto el Queso Banquete, en vistas a que se convierta en un producto de denominación de origen.
Con la proyección de continuar invirtiendo en tecnología y maquinaria, así como de ampliarse a mercados internacionales aún más exigentes, Quesos Don Atilio sigue creciendo, “en ventas, en calidad y generando más valor” en Tandil, la misma ciudad en la que hace 30 años inauguraron su fábrica, y en la que continúan trabajando.
Debes iniciar sesión para poder comentar
INICIAR SESIÓN¿No tenés cuenta? Registrate aquí