Lunghi aseguró que la segunda ola de contagios es un hecho y no descartó adoptar medidas al respecto si es necesario
El Intendente reiteró que "en abril va a haber problemas" y evaluó que la escasez de vacunas es un gran escollo. Afirmó que, de haber restricciones, se consensuarán con todos los niveles de gobierno y los actores implicados, y valoró la consolidación del sistema de salud local. En materia de política, se aventuró a bromear con una eventual reelección si la normativa actual cambiara. “Cuando uno está enamorado de su ciudad como estoy yo, hasta que uno no cierra los ojos quiere seguir haciendo cosas", dijo el incansable pediatra.
En comunicación telefónica con el ciclo radial “Cosas que pasan” (104.1 Tandil FM), el jefe comunal Miguel Lunghi habló sobre la vacunación, la segunda ola de Covid-19 y no esquivó las referencias a cuestiones políticas en un año electoral que promete resucitar las viejas rivalidades.
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Sobre la situación sanitaria aseveró que “en abril vamos a estar con problemas, ya dije que íbamos a bailar todo el año, recién vamos a empezar a salir en 2022 porque seguimos rodeados por esta tragedia”.
El pediatra enfatizó que la llegada del otoño y el descenso de temperatura complicarán el cuadro epidemiológico porque no se alcanzará a vacunar a la cantidad de gente necesaria para garantizar cierto espectro de inmunidad en la población. .
“No es hacer política con las vacunas, porque de verdad no se consiguen y no tiene la culpa el Gobierno nacional. Para los países periféricos es difícil conseguirlas, los aviones salen pero no llega la cantidad suficiente, las han acaparado las grandes potencias”, analizó.
Vacunas, el bien esquivo
Asimismo, el mandatario municipal consideró que mientras no se vacune la cantidad necesaria de personas -en Tandil se contemplan alrededor de 40 mil vecinos en esta franja- “vamos a tener una segunda ola en el otoño”.
A nivel local se han aplicado cerca de 10 mil primeras dosis y se ha completado el esquema de inmunidad en 3 mil personas. En el plano nacional la estadística es similar. El goteo de vacunas obtura la masividad de la campaña y el paso del tiempo obliga a los expertos a adoptar las medidas necesarias para contener la curva de contagios y que no se genere un colapso del sistema sanitario.
En tanto, sobre el Comité pro vacuna opinó que el espíritu de la iniciativa es trabajar de forma mancomunada y compartir información al respecto, más que promocionar la vacunación, que ya lleva un buen número de inscriptos: son 39 mil las personas anotadas en el distrito.
“La gente quiere vacunarse, se anota sola, pero nos faltan vacunas y el Comité en ese sentido mucho no puede hacer, pero sí dialogamos y hacemos acuerdos, que es lo que deberíamos hacer en otros temas también”, apuntó.
El manejo de la pandemia
A un año del decreto de aislamiento obligatorio firmado por el presidente Alberto Fernández, que paralizó al país, y luego de transitar un año entero dominado por el escenario pandémico, Lunghi reveló que “hemos aprendido a trabajar de manera consensuada y veremos cómo lo vamos llevando. A nadie le va a temblar el pulso si hay que tomar medidas, pero trataremos de tener mayor coincidencia con todos los niveles y actores”.
Y aseveró que si llegara a haber restricciones, serán graduales y consensuadas porque “somos un pueblo educado que va saber interpretar la situación y no vamos a tomar ninguna medida en soledad, nos vamos a reunir con todos los actores para hacer acuerdos si es que tenemos que disminuir horarios o controlar, lo vamos a hacer con consenso y diálogo”.
Por su parte, reconoció es un hecho que hay un alto grado de relajamiento en la sociedad y que los cuidados que ejerce la población no son los mismos que meses atrás, y a esto se le suma el advenimiento de un inminente rebrote que para el cual cada localidad debe estar preparada. En este sentido, ponderó la consolidación del sistema de salud local y el refuerzo de camas y aparatología que se pudo hacer en este tiempo para aumentar la capacidad de respuesta de los efectores sanitarios, en plena articulación con el sector privado.
“Cuando hablé de colapso en diciembre fue para que la gente reaccionara y cumpliera con las normas de cuidado, para no tener que derivar a nadie a que le den oxígeno en otra ciudad”, admitió.
Vacunación VIP
En torno al escándalo de la vacunación a funcionarios ligados al Ejecutivo que suscitó una investigación por parte de las autoridades provinciales y agitó las aguas mediáticas hace un par de semanas, aseguró que se puso a disposición del jefe de Gabinete, Carlos Bianco, toda la información y las explicaciones pertinentes.
“No creo que mi Gobierno no sea transparente. Bianco escuchó, le di los argumentos y dijo que iba a estudiar el caso. Uno es inocente hasta que se demuestre lo contrario”, refirió.
Interna radical
Próximamente se llevará adelante la interna radical, en la que el Intendente apoya a Maximiliano Abad, al igual que el sector de Marcos Nicolini. No obstante, Lunghi ha optado por no hacer proselitismo en este año tan particular y ratificó su postura de que “no tiene que haber interna en este momento tan difícil”.
“Una cantidad importante de intendentes votamos para apoyar una lista pero no he hecho militancia, sólo pondré mi voto como corresponde”, se excusó.
Consultado acerca de la coincidencia con la línea de Nicolini en el respaldo a Abad, y si esa convergencia podría ser interpretada como un gesto de acercamiento de cara las PASO que se realizarán el 8 agosto, evitó hacer una alusión directa al tema y opinó que aún falta mucho para eso.
“Hay que ver qué pasa, es difícil en política porque hay egoísmo, hay hipocresía, te dicen que sí y te das vuelta y dicen que no, pasa en todos los partidos políticos”, valoró.
Además, anticipó que “bendecirá” la lista que se conforme si le “agrada” y expresó que “si hay interna, e interpreto que puede haberla, voy a aceptar al que gane”.
“Para la interna, si yo intervengo en la confección de alguna lista -todavía no estamos trabajando en eso- daría el visto bueno, porque yo no nací de un repollo y me apoyaron mucho para ser candidato a intendente. Si alguno de ellos que me apoyaron quiere ser concejal ahora y está bien posicionado, estaré al lado de él”, detalló, pero evitó dar nombres.
“Estoy más tranquilo, estoy esperando, mirando, los años te dan experiencia”, dijo.
¿Lunghi 2023?
En el devenir de la conversación en el aire de la radio, también se atrevió a arriesgar, un poco en broma y un poco en serio, que le gustaría ser reelegido y encarar otro mandato más.
Vale recordar que la normativa vigente impide en la provincia de Buenos Aires la reelección de un candidato por más de dos periodos consecutivos. Esta legislación fue modificada durante la gestión de María Eugenia Vidal para impedir que existan distritos gobernados por una sola persona durante muchos periodos y propiciar así el recambio de autoridades. Hoy, el 70 por ciento de los intendentes de la provincia de Buenos Aires vería impedida su posibilidad de ser reelecto en 2023. Por cierto, no deja de ser un tema discutido en distintas trincheras políticas e inclusive en el ámbito mismo de la Presidencia, que no vería con malos ojos que los jefes comunales pudieran volver a ser electos indefinidamente.
“¿Por qué no ser reelegido? Hay muchas cosas para hacer todavía en Tandil. Muchas obras en carpeta que se las dejaré al que gane después y que si uno pudiera terminar lo haría”, se explayó y sostuvo también que, más allá de su deseo y de la barrera legal que existe en este momento, también debería sopesar la cuestión biológica porque “en tres años se me puede caer la piedra Movediza”.
“Cuando uno está enamorado de su ciudad como estoy yo, hasta que uno no cierra los ojos quiere seguir haciendo cosas. Y si hay que retirarse con mucho gusto le daré la carpeta a la persona que entre por la puerta de la Municipalidad”, se sinceró.
