El debate subrayó la "floja" política ambiental y la nula voluntad para reglamentar la gestión residual

El debate que se desarrolló el miércoles pasado dejó algunas esquirlas, entre ellas las vinculadas al eje medioambiental, que conllevó reproches y un cruce entre el intendente Miguel Lunghi y el candidato de Unión por la Patria, Rogelio Iparraguirre.

Lo cierto es que la discusión dejó en evidencia la “desidia” de la gestión comunal para abordar la temática  y el mandatario local hizo caso omiso a ciertas acusaciones. En todo caso, adjudicó la falta de iniciativas a una cuestión inflacionaria en lugar de ejercer la autocrítica. 

Durante la exposición de propuestas,  hubo un llamado de Iparraguirre y Santamarina a reglamentar la Ordenanza de Gestión de los Residuos Sólidos Urbanos, que el Concejo aprobó en marzo de este año y todavía no se aplicó. 

Por su parte, Iparraguirre recordó que su espacio lleva “una década completa presentado iniciativas concretas para una gestión de residuos olidos urbanos que nunca fueron escuchadas”.

En tanto, recordó que en el Debate 2019 había anticipado que al relleno sanitario le quedaban 18 meses de vida útil y, en consecuencia, debían generarse alternativas para suplirlo. Sin embargo, sostuvo que el Ejecutivo “lo negó y escondió todo debajo de la alfombra”, de tal modo que el relleno colapsó y se transformó en un basural a cielo abierto, circunstancia que calificó como producto de una “irresponsabilidad”. 

“La soberbia no es sólo un defecto personal, tiene consecuencias en la calidad de vida de los ciudadanos. En marzo logramos que aprobaran la Ordenanza de Gestión de los Residuos Sólidos Urbanos. ¿Qué hizo el Intendente? No la reglamentó”, cuestionó el diputado nacional. 

Mucho ruido, pocas nueces

En rigor, el marco normativo duerme el “sueño de los justos” y no se le ha dado impulso para su instrumentación. En julio, el bloque del Frente de Todos elevó un proyecto de comunicación para que el Departamento Ejecutivo informe acerca de la reglamentación de la Ordenanza 17.961 sancionada por el Concejo Deliberante el 23 de marzo pasado que plantea un nuevo esquema para la gestión de los residuos sólidos urbanos.

Se trata de la legislación para la regulación,  generación, separación  en  origen, transporte, tratamiento y disposición final de los distintos residuos sólidos urbanos del partido de Tandil. No hubo información al respecto ni tampoco se avanzó en el proceso reglamentario para que la Ordenanza se ponga en marcha. 

En ese entonces, el arco opositor legislativo realizó una serie de cuestionamientos sobre los siguientes puntos: “¿Cuáles son los motivos por los que no se ha reglamentado la Ordenanza?; ¿cuándo se reglamentará?; ¿cómo será la implementación? ¿Se dará por etapas?; y ¿se realizaron las adecuaciones presupuestarias para la aplicación de dicha Ordenanza?”. En tanto, agrega su implementación es necesaria ante la proximidad “alcanzar el límite de operatividad del relleno sanitario”.

La normativa "dormida"

La Ordenanza en cuestión entre los objetivos principales cita: “Reducir la generación de residuos con destino a disposición final; lograr un adecuado y planificado manejo de los residuos domiciliarios mediante su gestión integral; minimizar los impactos negativos que generan en el ambiente; erradicar la generación y desarrollo de basurales y micro basurales a cielo abierto; promover y formalizar los espacios de intercambio entre los actores involucrados en la recuperación, tratamiento y valorización de los residuos; y promover la separación en origen con los Puntos Limpios autogestionados y las estaciones de puntos limpias fijas y el compostaje y/o biodigestión de residuos orgánicos”. 

Asimismo, busca formalizar los espacios de intercambio entre los actores involucrados en la recuperación, tratamiento y valorización de los Residuos Sólidos Urbanos, en el marco del convenio celebrado a través de la Ordenanza 16.225 con recuperadores urbanos y otros convenios que surjan. Además, la propuesta contempla  la promoción de la separación, compostaje o biodigestión de residuos orgánicos; y la progresiva contenerización para depositar los residuos inorgánicos en toda la planta urbana. 

Por otro lado, el texto normativo establece la creación de una Planta de Tratamiento Integral de Residuos Urbanos con el fin de fortalecer el proceso de separación iniciado por los generadores, para de esta manera aumentar la recuperación y valorización de los residuos sólidos orgánicos. 

En cuanto a la promoción ambiental, el texto promueve que el Departamento Ejecutivo a través de la Autoridad de Aplicación, deberá implementar y desarrollar un programa de Educación Ambiental, fundamental para crear hábitos, sobre todo en las nuevas generaciones, porque las políticas de separación de residuos no terminan con la acción de colocar tachos para reciclables y tachos para los que no lo son. Por ello, la legislación contempla  que es necesario “educar al ciudadano” para que genere buenas prácticas respecto al tratamiento y disposición final de los residuos como parte de la vida cotidiana. 

El aporte de los recuperadores 

Por otra parte, a comienzo de este mes el Municipio inició el proceso de licitación pública para desarrollar las obras de generación de un nuevo espacio para tratar residuos recuperables en la zona del relleno sanitario, en el que funcionará la Cooperativa del MTE.

El proyecto de la Secretaría de Planeamiento y Obras Públicas comunal, que se solventará con recursos aportados por la Nación, permitirá dar un nuevo paso en el plan integral de tratamiento de residuos de la ciudad y en la creación de un "Polo ambiental" en esa zona, según indicaron. 

La licitación pública tiene un presupuesto oficial de 137.003.937,11 de pesos y el acto de apertura de ofertas se realizará el próximo 3 de noviembre. Este "Nodo de reciclaje" para Tandil se incluyó dentro del programa de Infraestructura para entramados productivos regionales del Gobierno nacional y estará ubicado en el mismo predio donde funcionará el centro para la gestión de residuos de poda, donde también se proyecta el mentado biodigestor.