En la última sesión del año del Concejo Deliberante, el oficialismo contó con los votos de Unión por la Patria y aprobó ayer el Presupuesto de Gastos y Cálculo de Recursos para el ejercicio 2024 y las ordenanzas fiscal e impositiva tras un extenso encuentro que transcurrió entre intervenciones que reflejaron posicionamientos políticos y cruces entre los bloques políticos en el estreno de la nueva configuración.Luego del tratamiento de un extenso orden del día, que incluyó la aprobación del aumento del boleto del transporte público de pasajeros, del servicio a Gardey y María Ignacia (Vela) y de taxis, además del convenio urbanístico para el club de campo, pasado el mediodía los concejales se abocaron al tratamiento de los proyectos elevados por el Departamento Ejecutivo el pasado 11 de diciembre.En un maratónico encuentro, el oficialismo salió en defensa de la proyección de la administración para responder a lo urgente en medio de un contexto complejo, atendió los achaques de Alternativa Tandil, espacio que responde al Ateneo del Tercer Siglo, y de Acción Tandilense - La Libertad Avanza, y valoró el acompañamiento de Unión por la Patria a la hora de la votación.<section class="noteSuggested" data-id="111106" data-title="Puede interesarte"></section>En definitiva, los concejales expusieron sus miradas y opiniones durante la sesión especialmente a partir del aumento de las tasas y la&nbsp;delegación de facultades al Ejecutivo para instrumentar ajustes bimestrales de las tasas de acuerdo a la inflación.En general, el proyecto de presupuesto fue sancionado&nbsp;con 14 votos a favor de Juntos, Unión por la Patria y MID y seis en contra (Alternativa Tandil, LLA y PRO). En particular, el artículo 17 sobre los movimientos de partidas, resultó con 13 a favor y siete en contra.La ordenanza impositiva, en general reunió 17 votos a favor (sumó los tres de Alternativa Tandil) y tres en contra de La Libertad Avanza y PRO, mientras que en particular extendió la brecha ante el rechazo del nicolinismo de la delegación de poderes al ejecutivo para aplicar aumentos en las tasas mediante el IPC.El encuentro&nbsp;La sesión legislativa comenzó minutos después de 10 con el reconocimiento a Sergio Hoffman y el tratamiento del proyecto de resolución en torno a las medidas impulsadas por el Ejecutivo nacional ante la presencia del Sindicato de Trabajadores Municipales de Tandil (STMT).Luego de negociaciones contrarreloj, que trasladaron la reunión de Labor Parlamentaria a última hora de la tarde del jueves, los concejales se ubicaron en sus bancas para dar tratamiento a los proyectos elevados por la Secretaría de Economía y Administración: el Cálculo de Recursos y Presupuesto de Gastos para el ejercicio 2024 y los proyectos de ordenanza fiscal e impositiva.El debate comenzó poco después de las 12.30. La concejal María Haydeé Condino (Juntos), titular de la Comisión de Economía, defendió la visión política del Gobierno de Miguel Lunghi para el primer año de su sexto mandato en función del actual contexto nacional.“Lo necesario, lo urgente”“No voy a decir novedades”, soltó al abrir su primera intervención en el recinto. Con la presencia en la barra de los excandidatos a intendente Marcos Nicolini y Gonzalo Santamarina, entre otros referentes políticos, la edil desplegó una serie de argumentos sin perder de vista la actualidad del país. “No es un presupuesto de obras, de crecimiento. Es un presupuesto de crisis”, ratificó.De allí, los llamados a sus pares a actuar con responsabilidad para dotar a la administración comunal la herramienta para gobernar, punto que después fue retomado por su par y presidente de la bancada, Mario Civalleri. “Este tiempo que se inauguró nos dio un mensaje claro y la necesidad de ser creativos, empáticos, honestos, que reforcemos todas las posibilidades de diálogo para llevar adelante la ciudad”, reflexionó.Para Condino,&nbsp;el presupuesto está en esa línea. Es “austero, basado en lo necesario, en lo urgente, en la crisis, en lo inmediato”, que “racionaliza el gasto” y pone el foco en salud, desarrollo social y desarrollo productivo, las únicas áreas que crecieron en masa presupuestaria.“No estamos firmándole un cheque en blanco al Intendente, no estamos vulnerando derechos, no estamos poniendo el riesgo la división de poderes”, defendió en respuesta a los cuestionamientos de Alternativa Tandil.&nbsp;A diferencia de otras exposiciones, evitó brindar informes sobre partidas o números específicos de los gastos para optar por lo general. “No hay importantes obras que destacar”, sentenció y aseguró que el objetivo estará puesto en “sostener y contener la ayuda social, las escuelas municipales, programas de micro emprendimiento”, entre otros.Las tasas y el aumentoSobre la ordenanza impositiva, Condino se refirió a la “novedosa” fórmula para realizar actualizaciones bimestrales y dijo que otras ciudades la incorporaron como alternativa para “un año excepcional”.Luego, detalló los puntos modificados como resultado de la&nbsp;negociación con los otros bloques, como el aumento escalonado de las tasas (50 por ciento en enero y 30 por ciento en febrero) y la decisión de incluir un tope al Ejecutivo a la hora de aplicar el ajuste de acuerdo a lo que marque el índice referido.Por otro lado, la concejal destacó que este año creció la diferencia entre los recursos municipales y los provinciales y repasó las medidas de sostenimiento de los regímenes de eximiciones.Para cerrar, interpeló a sus pares y les pidió darle al Intendente las herramientas para que pueda gobernar. “Queremos seguir viviendo en esta ciudad, que Tandil siga siendo lo que es”.Crecimiento privadoDesde Acción Tandilense – La Libertad Avanza, Federico Sánchez Chopa adelantó la decisión de no acompañar los proyectos y compartió los motivos que la sustenta.En primer lugar, observó que la comuna “no está en sintonía con la situación que estamos viviendo” en el país y marcó la falta de “esfuerzo fiscal porque no bajaron el gasto” en referencia a los recortes en la estructura.&nbsp;También planteó que los vecinos afrontarán con los tributos la falta de certezas de los recursos que llegarán por coparticipación provincial y remarcó que “venimos solicitando una baja en las tasas, que se revisen indicadores, que ayuden al contribuyente, al que produce”.En su lectura, alertó que podrían producirse aumentos “de hasta el 300 por ciento” en las tasas prediales. “No podemos permitirlo”, sentenció.Tras un desglose de la recaudación tributaria y una estimación porcentual sobre la carga, Sánchez Chopa demandó un “Estado presente, pero con menos impuesto para liberar las fuerzas”, ya que “tenemos que dejar al sector privado que crezca”.“Un presupuesto de sábana corta”El posicionamiento de Unión por la Patria sobre la proyección presupuestaria del Gobierno de Lunghi estuvo a cargo de Severiano Mon. Con un enfoque conciso y ordenado, el concejal repasó los lineamientos políticos y marcó varios cuestionamientos para adelantar el acompañamiento de la bancada “teniendo un gran sentido de la responsabilidad” y ratificando que “vamos a estar siguiendo la ejecución de estas políticas”.Como punto de partida, marcó que el 10 de diciembre asumieron los nuevos concejales, el 11 el Departamento Ejecutivo presentó su propuesta y el 12 el Gobierno nacional “anunció medidas que dejan a ese cálculo de gastos y recursos muy debilitado”.“Hay una coyuntura que nos obliga a tener un alto grado de responsabilidad en el tratamiento de este presupuesto”, justificó y lo definió como “de sábana corta”.De todos modos, consideró que “habría que mejorar algunas cuestiones”, con el reparo de que “se cumple con la formalidad porque tenemos poco tiempo para analizarlo”.“Cuando nos adentramos en ese análisis podemos ver un presupuesto de sabana corta, con ausencia de obras públicas, pero con fondos que no tenemos garantía que van a estar, como el Fondo de Financiamiento Educativo”, analizó Mon.Por eso, sugirió como punto a tener en cuenta la elaboración de un plan de contingencia ante la eventual caída de esos fondos, pero también de políticas de acceso a la vivienda y para atender los problemas de la coyuntura económica.Asimismo, observó “gran parte” de la distribución “tiene que ver con salarios”, y precisó que el 53 por ciento corresponde a la administración central y el 67 al el sistema sanitario.Llamó a priorizar el gasto al mencionar una partida de 150 millones de pesos para semaforización y luminotécnica y recordó que “estamos frente a un presupuesto de poco margen de maniobra” y reclamó que “sería interesante” conocer hacia dónde estarán direccionadas las partidas y los proyectos y políticas que llevará adelante la Subsecretaría de Innovación Tecnológica.A modo de crítica, el concejal de la oposición detectó que resulta “complejo” encontrar un horizonte en la proyección para el próximo ejercicio y sugirió “repensar una estrategia de desarrollo para la ciudad, especialmente ante la nueva coyuntura”.Respecto de la ordenanza impositiva, Mon destacó que “logramos amainar” el porcentaje del 80 por ciento al hacerlo en dos partes, pero alertó que deberá primar la “mesura, prudencia y responsabilidad” con el ajuste “porque hoy tenemos tasa de cobrabilidad que en tiempo y forma es del 46 por ciento”.Citó la negociación en torno al “hasta” incluido en la cláusula de actualización bimestral y otras propuestas, con el compromiso de debatir a futuro una propuesta de alícuota sobre los cajeros automáticos.Sobre el cierre, mencionó algo “sustancial” en cuanto al esquema sanitario y se plantó con un llamado a discutir “cómo vamos a hacer frente a la demanda” y deslizó la posibilidad de aplicar una estrategia de regionalización de ciertos servicios para “liberar fondos”.Una discusión difícil de entenderCon el debate abierto, se sumaron las voces de más concejales, como la de Juan Salceda (Juntos) con una reflexión sobre la demanda actual y los desafíos que impone el contexto nacional.“Me resulta muy difícil entender que vamos a tener una discusión real sobre el aumento de las tasas. Estamos tratando de proteger en bolsillo de la gente, que va a sufrir y no porque una tasa aumente de 1.500 a 3 mil pesos”, graficó poniendo énfasis en los incrementos por la desregulación de “la energía, las obras sociales y prepagas, del combustible”.Apuntó a sus compañeros de La Libertad Avanza representados en el Concejo y les achacó que deberían saber que el espacio político “ya hizo su aporte en el presupuesto a través de desfinanciar las provincias, destruir la obra pública, etc.”.El planteo del nicolinismoCon una postura definida en la previa, Matías Meli (Alternativa Tandil) notó en el debate que “una cosa es pedir a nivel nacional que se baje el DNU, pero a nivel local votarle al Intendente los superpoderes” en alusión a la delegación de facultades al Ejecutivo.“Nosotros también hicimos propuestas y no fueron escuchadas”, se quejó y citó la asignación de recursos al Concejo Deliberante, “pero después nos quejamos que no tenemos plata para pagar el alquiler de la Defensoría del Pueblo”.“Me hubiese gustado votar un prepuesto equilibrado”, dijo y se enfocó en el crecimiento de la planta política y en la falta de obras.&nbsp;Su compañera de bloque, Rosana Florit tomó la definición del presupuesto “de sábana corta” para luego renegar del artículo 139 de la ordenanza impositiva. “El ‘hasta’ determina un límite, que es importante. ¿Pero quién controla si es el Poder Ejecutivo el que aplica el ‘hasta’ del IPC?”.“No nos estamos oponiendo al presupuesto, que es una herramienta de gestión. Creemos que lo debe tener, pero con reglas claras”, afirmó.Minutos después se sumó Oscar García Allende con un relato sobre el Sistema Integrado de Salud y el artículo 17 del presupuesto que habilita al Gobierno a mover partidas entre jurisdicciones.La reacción defensiva del oficialismo&nbsp;Expuestos los argumentos que sustentan las miradas, el bloque oficialista salió a responder los cuestionamientos sobre los recortes políticos y la facultad para actualizar las tasas.Condino argumentó que “hemos tenido en este recinto minutas de comunicación solicitando que se eleven los rangos de las direcciones de Mediamente, Género y Agro”, y explicó que la vicejefatura de Gabinete es una coordinación creada en 2011 a la que se le cambió el nombre. “Hay una subsecretaría nueva que es la de Desarrollo Productivo”, reconoció y explicó que el personal político representa el 2,9 por ciento del total de la planta municipal.Luego, achacó que “piden obras, pero no votan los fondos”, un mecanismo que definió como “un clásico” en el debate legislativo y aseguró que, a pedido de la oposición, acordaron que el ajuste bimestral “suba al Concejo para que se vote, estos no son superpoderes”.A su turno, Matías Tringler se enfocó en el funcionamiento del Sistema Integrado de Salud Pública –ente que presidió hasta el 10 de diciembre- y precisó que tiene “11 cargos políticos y 1.200 empleados”.Defendió también la instrumentación de la fórmula de ajuste de las tasas mediante IPC “cuando no hay previsibilidad”.“Me parece tan austero el presupuesto que hasta me da un poco de miedo sobre todo en salud; y a lo que menos miedo le tengo es al ajuste de precios. No atar la tasa al IPC hará que en diciembre paguemos un caramelo o la retributiva”, cerró.Coherencia, por favorPromediando la sesión, el presidente del Concejo Juan Pablo Frolik pidió por la vicepresidenta primera Condino lo reemplace en el estrado para poder ocupar la banca y exponer su mirada sobre el tema en debate.En respuesta al planteo de Alternativa Tandil, aseguró que Marcos Nicolini –quien lo sucedió como jefe de Gabinete en 2011- fue quien creó la Subsecretaría de Coordinación, actualmente Vicejefatura de Gabinete ocupada por Miguel Lunghi (h). “No es un peso más ni menos”, afirmó.“Meli fue concejal, integró este cuerpo y no entiendo por qué en 2011 era necesaria la Subsecretaría de Coordinación y hoy hay que eliminar. Coherencia por favor”, remató.Gobernabilidad y paz socialEl presidente del bloque Juntos, Mario Civalleri, compartió una lectura política sobre la actualidad y el debate en el recinto, para demandar que “tenemos que generar gobernabilidad para tener paz social”.Al interrogante en torno al “temor” de aplicar un ajuste por inflación, contestó que “la motosierra no está acá abajo”, en alusión a la planta baja de la Municipalidad donde se encuentra el despacho del jefe comunal.&nbsp;Dijo que Lunghi “va a hacer lo que tenga que hacer para gobernar y contener a todos los vecinos. Tengamos un voto de confianza. Este presupuesto es un dibujo porque no se puede hablar de otra cosa. Démosle un voto de confianza, no va a hacer pavadas”.Partiendo de que se trata de un presupuestado de “supervivencia”, preguntó “¿vamos a objetar el mecanismo para ajustarlo? Me parece que no tiene sentido. Demos al intendente las herramientas para que gobierne”.Una consideración sobre el plan integral en seguridad&nbsp;Desde Unión por la Patria, Noelia Domenighini realizó una exposición sobre la cuestión de la seguridad que refleja el presupuesto para la Secretaría de Protección Ciudadana.“No se explica el plan de seguridad y vemos un copie y pegue de otros años teniendo todavía pendiente la inauguración del edificio”, entre otros programas.“Si bien es cierto que la seguridad corresponde a la Provincia, el Gobierno comunal asumió una responsabilidad con la creación del área y de una tasa que va a recaudar 1.700 millones de pesos”, planteó. Por eso pidió que “se revisen los objetivos y cuál será el plan estratégico “.Por su parte, Nicolás Carrillo (Unión por la Patria) reclamó priorizar las urgencias de los vecinos (como desagües pluviales, red de agua y cloacas), recomponer el salario y el fondo urbano para la emergencia.Por último, Federico Martínez instó a dotar de la herramienta para garantizar gobernabilidad y a “defender los intereses de los tandilenses” por sobre una “pelea apresurada por la sucesión del Intendente”.Licencia del IntendenteEn el final de la sesión, los concejales aprobaron el tratamiento sobre tablas de un pedido de licencia del intendente Miguel Lunghi del 1 de febrero al 14 de febrero, y el reemplazo de Frolik al frente del Ejecutivo.En la oportunidad, el presidente del Legislativo le tomó juramento a Juana Echezarreta.