Se redujeron los índices delictivos, un dato positivo entre las consecuencias de la pandemia
Entre enero y julio se registraron 1.723 delitos en la ciudad. No hubo homicidios dolosos ni femicidios, mientras que los robos ascendieron a 335 y se computaron 678 hurtos. Durante el año pasado, el total fue de 3.819, entre los que se cuentan tres crímenes.
En tiempos de coronavirus, donde todas las noticias tienden a mostrar un empeoramiento de la situación en la mayoría de las actividades de la comunidad, surgió un dato positivo que está vinculado a un tema sensible como la inseguridad. A partir de las medidas de aislamiento y distanciamiento obligatorio, las estadísticas locales marcaron un descenso en el índice delictivo entre enero y julio. En concreto, los registros revelaron un total de 1.723 hechos frente a los 3.819 que se computaron durante los doce meses del año pasado.
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Los datos obran en el informe que el secretario de Protección Ciudadana, Atilio Della Maggiora, elevó a los concejales en ocasión de la reunión en la que trazó un balance del área, como establece la Ordenanza 13.843. En el extenso documento, dedicó un apartado a “la dimensión objetiva de la seguridad ciudadana en el primer semestre 2020”.
En cuanto a las estadísticas volcadas en el reporte de gestión, se destacó que en lo que va del año no se registraron homicidios dolosos ni femicidios. En este aspecto, reseñó que la tasa de homicidios nacional oscila entre 5,5 y 6,5 cada 100 mil habitantes, mientras en Tandil se encuentra entre 7,7 y 9,1, lo que implicaría entre 7 y 9 víctimas por año.
Por otra parte, hubo 335 casos de robos o tentativas: 74 en enero, 54 en febrero, 50 en marzo, 40 en abril, 34 en mayo, 28 en junio y 55 en julio. Además, se produjo un total de 678 hurtos y tentativas, donde también se evidenció una curva de descenso durante abril, mayo y junio, con 69, 72 y 73 casos respectivamente.
Al considerar el ámbito donde ocurrieron los hechos, el 70,15 por ciento se concretó en el interior de un ámbito privado –viviendas o comercios- y el 29,85 por ciento en el espacio público.
De los delitos que tuvieron lugar en hogares o negocios, el 74,57 por ciento se concretó cuando las víctimas estaban ausentes y el 25,43 por ciento se produjo ante la presencia de los damnificados.
Otro de los indicadores que se analizó fue la violencia desplegada para cometer el delito, donde en el 80,49 por ciento, es decir 267 casos, se desplegó sobre los bienes y en el 19,51 por ciento (67 casos) sobre las personas.
Teniendo en cuenta la violencia sobre las víctimas, el 66 por ciento fue por la fuerza física, 18 por ciento con arma de fuego y 16 por ciento con arma blanca. Entre enero y julio, los robos calificados fueron 12; no hubo en mayo y junio y sólo se registraron 1 en abril y 2 en julio.
Los números de 2019
Las estadísticas correspondientes al año pasado registraron un total de 3.819 delitos, de los cuales 2.611 fueron contra la propiedad, 135 contra las personas, 189 por violencia de género, 184 por infracción a la Ley 23.737 (comercialización de estupefacientes) y 700 correspondientes a diversas figuras legales distintas a las anteriores.
Al analizar los delitos contra las personas, en 2019 se registraron tres homicidios dolosos. En este aspecto, el área resaltó que la cifra “es muchísimo menor que la tasa de homicidios nacional”.
Otra de las conclusiones radica en que los robos se mantuvieron en un promedio estable durante el año, aunque evidenciaron un pico en junio con 102 casos y se redujeron paulatinamente hasta cerrar con 57 en diciembre. En ese aspecto, evaluaron que pudo influir la incorporación a la estadística, desde junio, del sistema de denuncias online y la “mayor transparencia del sistema de denuncias ante la Policía”.
Al analizar los hurtos, se produjo una curva ascendente en el segundo semestre. Entre enero y mayo se mantuvo estable, con 80 mensuales en promedio. En tanto, entre mayo y junio tuvo un pico de 106, se redujo y volvió a subir en noviembre, para alcanzar 123 hechos en diciembre. En este aspecto, aclaró que se vinculan mayormente a “objetos de baja repercusión patrimonial, con víctimas ausentes y, desde luego, sin violencia alguna”.
En 2019, el 47 por ciento de los delitos tuvo lugar en viviendas, un 15 por ciento en comercios y 38 por ciento en el espacio público. De aquellos que ocurrieron en lugares privados, en el 77 por ciento de los casos las víctimas estaban ausentes y en el 23 por ciento se encontraban presentes.
Al sopesar la violencia desplegada para cometer los hechos, en el 78 por ciento de los casos se ejerció sobre las cosas y en el 22 por ciento sobre las personas (13,65 por ciento física y 8,35 por ciento con armas de fuego, blanca o impropia).
Por otra parte, reseñó que 772 personas fueron puestas a disposición de la Justicia durante todo el año pasado, en distintas situaciones procesales. La edad de los que delinquieron osciló entre los 18 y 47 años, y la mayoría se ubicó entre los 18 y 27 años (42,36 por ciento del total), seguidos por los de 28 a 37 años (26 por ciento) y 38 a 47 años (9 por ciento). “Ello es una tendencia que se confirma generalmente en las sociedades occidentales”, evaluaron.
Las fuentes
Desde la Secretaría de Protección Ciudadana explicaron que los datos surgieron de mediciones propias que elaboraron junto a la Dirección de Estadísticas del Municipio, teniendo en cuenta el total de reportes al servicio de Emergencias 101, al Centro de Monitoreo de la ciudad o a las dependencias policiales. A partir de junio, también incluyeron las denuncias online, programa que se implementó en el segundo semestre del año.
“Así pues la base de análisis para la estadística local es mucho más fiable que las que se conocen a nivel provincial y/o nacional, que sólo computan los casos efectivamente denunciados ante Policía o el Poder Judicial. En nuestra ciudad, se computan también los reportes al 101, lo que acerca mucho la base de análisis a lo que realmente sucede”, expuso el secretario.