Violencia de género
Quedó detenido el hombre señalado por agredir a su mujer
Tras ratificar la denuncia la víctima, se ordenó la inmediata detención del agresor. Hoy será indagado en fiscalía
“Quedate quieto porque los mato”, le dijo el agresor al niño de cinco años que se interpuso por su mamá. El extracto se corresponde a lo volcado en el expediente judicial que se sustancia en la fiscalía temática de violencia de género que en la edición de ayer este Diario ventiló.
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La investigación prosiguió ayer en procura de contar con la ratificación de la denuncia que hiciera la víctima con residencia en María Ignacia (Vela), instancia que efectivamente sucedió y permitió a los operadores judiciales avanzar con mayor severidad frente al señalado de las agresiones, quien ya contaba con varias restricciones de acercamiento en su haber y, de hecho, tenía fecha de juicio por los sucesos antecesores para diciembre de 2025, según fijó el juzgado local.
Como se informó, cuando los velenses despedían con satisfacción la nueva edición de la fiesta del Dulce de Leche, los humores festivos se mutaron a la congoja y alerta, frente a un episodio de violencia doméstica que se reportó en una de las casas de la localidad rural, que mereció la intervención policial.
El grave suceso puertas adentro pero que no pocos vecinos alertaron a oídas, se registró en la tarde noche de lunes, en un contexto de violencia de género.
En medio de las agresiones recibidas, la víctima pudo pedir el auxilio de los policías del Destacamento de Vela, quienes lograron rescatar a la mujer y sus dos hijos menores de edad (uno de ellos también habría sido sometido a agresiones), mientras que el sujeto violento huyó de la escena.
Con el correr de las horas y el testimonio de la mujer que logró ser contenida por los resortes estatales que imperan en el protocolo de seguridad, se sustanció con mayores precisiones sobre la denuncia de la víctima y así el ministerio público pidió la detención del señalado, identificado como Franco Piere.
El nombrado fue apresado por una comisión policial ayer en Vela, donde reside, bajo la consigna del Juzgado de Garantías 2, quien le endilgó el delito tipificado por el fiscal Guillermo Vaticano como “lesiones agravadas por género, violación de domicilio y daño”.
El detenido quedó alojado en los calabozos de la Seccional Primera, donde hoy por la mañana será trasladado a la sede judicial, donde será sometido a la audiencia 308 (declaración indagatoria) en la que se le notificará sobre el delito que se lo acusa y bajo la defensa podrá optar por prestar declaración o no.
Antecedentes
Tal se detalló, de lo que trascendió del caso, no fue la primera de las agresiones ni la única intervención policial y judicial que interviene en la relación, en la que la víctima denunció en varias oportunidades al agresor y merecieron restricciones de acercamiento consecutivamente por el magistrado interviniente. De hecho, el suceso de este fin de semana sería el cuarto de los que protagonizó el victimario con la misma víctima, motivo por el cual ya se elevaron a juicio tres causas por violencia de género que aguardan por su juicio, a celebrarse recién en diciembre de 2025 (el calendario de los juzgados están atiborrados de expedientes y juicios pendientes).
En el mientras tanto, el violento mantiene el mismo modus operandi: aguarda por la finitud de la restricción impuesta por el Juzgado de Garantías y vuelve sobre sus pasos, más bien sobre sus agresiones, verbales y físicas para con la mujer y, en el último episodio, incluso con uno de los niños de cinco años que se interpuso en la pelea.
Al decir de la denuncia ahora –ayer- ratificada en sede judicial, el hombre irrumpió en la casa que compartían con la mujer, rompiendo la puerta de ingreso a patadas y luego entró en una virulenta discusión con la mujer hasta que llegaron los forcejeos e incluso agresiones físicas. En el medio, el sujeto le habría sacado el teléfono celular, impidiendo que la víctima pudiera pedir socorro.
En medio de la fuerte situación, se habría despertado uno de los hijos de la mujer, quien se interpuso en las agresiones, a lo cual el hombre lo habría tomado del cuello e increpado: “quédate quieto porque los voy a matar”.
En dicho instante, la mujer pudo recuperar su celular y alertar a la policía sobre lo que estaban padeciendo. Una vez activada la alerta, la policía se acercó al domicilio y el agresor ya se había dado a la figa, dejando los rastros de la violenta escena en los mobiliario y demás elementos de la propiedad, además del rostro de las víctimas sobre la angustia de lo vivido, una vez más.
Se confió que por estas horas se aplicaron todos los resortes del protocolo en materia de violencia de género, con la contención psicológica de la víctima y sus hijos, hasta tanto la justicia se expida sobre el grave suceso sufrido.