Las cámaras y los celulares, clave para dar con la banda de asaltantes

En la tarde de ayer, desde la Justicia se confirmó la detención de cuatro marplatenses sindicados como los autores materiales del violento robo a mano armada perpetrado a mediados de junio en una vivienda de Santos Vega al 0, en El Cerrito, donde una pareja de adultos mayores fue sorprendida mientras dormía y tras ser maniatados y maltratados, sufrió el robo de un importante botín. 

El grave suceso conmovió a la vecindad que aún respiraba por esos días con preocupación por el asalto violento contra una familia en el barrio cerrado de la zona Don Bosco. Con el paso de los días, los meses, sendos atracos parecen encaminarse a su esclarecimiento con las respectivas detenciones de los imputados.

Sobre el procedimiento de ayer, se conoció que una efectiva y dedicada pesquisa de personal de DDI local, con la colaboración de otros dependencias de localidades vecinas, bajo la coordinación de la fiscal azuleña Laura Margatic (se habían excusado de intervenir los funcionarios judiciales locales –ver aparte-), logró dar con el cuarteto de asaltantes del suceso ocurrido el pasado 21 de junio, en una propiedad de calle Santos Vega, entre Avellaneda y Roser. 

Por lo que se dejó trascender, ayer fue el corolario de una intensa investigación, con la cual ya contaban prácticamente desde anoticiados del asalto sobre la identidad de al menos dos de los sospechosos, a partir del análisis de las cámaras del Centro de Monitoreo municipal, con el aporte de dispositivos de viviendas linderas al lugar del hecho. 

Con dicho material se logró identificar los autos con el que circulaban los asaltantes y se rastreó su respectivo itinerario, incluso desde un par de días antes, cuando se considera que habían venido a hacer una tarea de inteligencia previa, siendo que los sindicados resultaban foráneos. 

Efectivamente, con la identificación de uno de los sospechosos, el cual fue observado cuando bajó previamente a una estación de servicio, más la corroborar la titularidad de dominio del auto involucrado, se dio con los hermanos Giovani y Luciano Portoni, de 23 y 19 años, respectivamente, con residencia en Mar del Plata. 

Con el seguimiento de las cámaras, consecuentemente, se logró trazar el recorrido realizado hasta la ciudad balnearia, donde aproximadamente hace un mes se realizó un allanamiento con resultados altamente favorables dado el desenlace ahora ventilado. 

En efecto, de aquella primera diligencia procesal, en la cual no se ordenó ninguna aprehensión, se secuestraron teléfonos celulares de los  hermanos en la mira, cuyos aparatos fueron analizados con herramientas informáticas que no sólo permitieron ubicar en tiempo y espacio dónde y cuándo los sospechosos estuvieron en la ciudad, también las respectivas comunicaciones escuchadas permitieron dar con los otros dos cómplices, identificados como Martín Toledo (21) y Mariano Scarpatto (45), quien ayer propició una violenta resistencia a los tiros con los uniformados que lograron disipar y, a la postre, detener, además de secuestrársele armas varias y dinero que se evaluará si formó parte de aquel botín robado al matrimonio tandilense. 

Los allanamientos de ayer tuvieron su epicentro en los domicilios de calle Filiberto al 3000 y calle Tetamantti al 2000, de la ciudad de Mar del Plata.

Los cuatro apresados quedaron a disposición de la Justicia. Hoy serían trasladados a la sede de Azul, donde la fiscal les notificaría el delito endilgado (Robo calificado en poblado y en banda) y se concretaría la audiencia indagatoria. 

El asalto y los roles

Tal se informó oportunamente, luego del fin de semana extra largo por el Día de la Bandera, un nuevo episodio de inseguridad sumó preocupación ante la seguidilla de acontecimientos de gravedad ocurridos en aquellos días. El 21 de junio por la madrugada, un grupo de delincuentes irrumpió en una vivienda de Santos Vega al 0, en el barrio El Cerrito, sorprendió a sus ocupantes mientras dormían y huyó con dinero y elementos de valor.

El hecho delictivo se manejó con extremo hermetismo por parte de la policía, no sólo a partir del pedido expreso de los damnificados -que además requirieron mantener en reserva sus identidades-, sino también para evitar entorpecer la investigación que a la postre dio sus frutos.

El caso dio inicio a una causa con intervención de la UFI 12 a cargo del doctor Damián Borean. En ese marco, personal de la Sub DDI y de las comisarías de la jurisdicción llevaron adelante una serie de diligencias en busca de elementos que permitan direccionar la investigación.

Con ese proceso en marcha, una de las acciones apuntó al análisis de las cámaras privadas instaladas en la zona, pero también de las públicas del Centro de Monitoreo del Municipio.

El atraco se registró a las 2 cuando tres delincuentes  ingresaron luego de violentar una de las ventanas de la propiedad ubicada en Santos Vega al 0, entre Roser y Avellaneda.

Se cree que un cuarto ofició de campaña en otro auto e incluso se fue de la escena cuando ya sus cómplices habían asegurado su fuga.

Una vez en el interior, se dirigieron hacia el dormitorio donde descansaba un hombre y una mujer de más de 70 años. Tras sorprenderlos bruscamente, comenzaron a exigirles la entrega de dinero mientras buscaban elementos de valor.

Los intrusos actuaron con sus rostros cubiertos con barbijos, gorras y utilizaron guantes durante la estadía en el interior de la propiedad y al menos uno de ellos portaba un arma de fuego.

Además, maniataron y privaron de la libertad a la pareja mientras revisaban los ambientes, en un accionar que se extendió durante más de dos horas. Y una vez que cumplieron con su cometido, huyeron con el destino ahora ventilado.

Cuando el hombre y la mujer -que quedaron juntos en el living- lograron liberarse, dieron aviso al Sistema de Emergencias 101 Mejorado y a sus familiares.

A partir de allí los servicios de seguridad desplegaron sus acciones con el objetivo puesto en esclarecer el atraco, ocurrido una semana después de un robo a mano armada que se registró en Santos Vega al 100. 

Si bien con la aprehensión de los cuatro citados se avanzó notoriamente en el esclarecimiento del grave suceso delictivo, los investigadores confiaron en que claramente hubo un quinto integrante que actuó como instigador o autor material tandilense, reconociéndose que será difícil hallarlo, a no ser que hoy, en plenas declaraciones frente a la fiscal, alguno de los detenidos confiese su participación y sume más elementos que permitan dar con alguien más que aportó a la banda delictiva marplatense. 

Cambio de manos del expediente

Vale aclarar sobre la participación de la UFI azuleña a cargo de la fiscal Laura Margaretic que su intervención devino tras la excusación de todos los funcionarios judiciales tandilenses, incluso hasta el propio juez de Garantías.

En efecto, primero el fiscal Damián Borean y detrás de él el resto de los integrantes del Ministerio Público, como el juez José Alberto Moragas se excusaron de intervenir por su relación con allegados a las víctimas. De allí el expediente recayó en la fiscal citada,  como así también interviene como jueza de Garantías Virginia Florencia Giombini, magistrada del Fuero Penal Juvenil local.