A un año del brutal asesinato de Bruno Vergagni, la pareja acusada aguarda por un juicio por jurados con una pena en expectativa de prisión perpetua

A un año del asesinato del productor de cine Bruno Vergagni, se cerró la investigación y quedó a la espera del juicio contra los dos imputados, quienes serán sometidos a un jurado popular para que resuelva su futuro procesal.

Al decir de las pruebas recopiladas, el futuro debate oral y público deberá emitir un fallo condenatorio entre dos figuras que calificó el fiscal Damián Borean a la hora de encuadrar el brutal acto criminal, dado que tras mantener la acusación de un homicidio en ocasión de robo añadió subsidiariamente sensibles agravamientos que llevan a una pena en expectativa de prisión perpetua. 

A más precisiones, las actuaciones seguidas a los actualmente detenidos Dante Juan Cruz Alvarez Infesta y José Luis Anriques se les endilgaron los delitos de “homicidio agravado por haber sido cometido con ensañamiento y alevosía así como también para facilitar y consumar otro delito y para procurar impunidad en concurso real con robo agravado por el uso de armas”.

Como se informó oportunamente, a poco de conocerse el brutal asesinato del reconocido cineasta y desandarse la investigación, se logró dar con los sospechosos, una pareja de jóvenes que había acordado una cita con la víctima en tren de presunto encuentro amistoso y terminó en una salvaje golpiza que, al decir de la acusación, tuvo el propósito de matarlo para luego robarle las pertenencias, parte de las cuales fueron secuestradas una vez realizado el allanamiento en el departamento donde residían los señalados. 

La acusación

Según consta en el expediente el que tuvo acceso este Diario, la hipótesis fiscal aduce que previo a las 0 del 14 septiembre de 2020, los nombrados, de común acuerdo previo, planearon quitarle la vida a Bruno Vergagni Sobral para luego robarle. Con esa finalidad, anteriormente acordaron un encuentro amistoso con Vergagni -a quien ya conocían de antemano- que se concretó en la vivienda de la víctima. 

A dicho departamento, los imputados accedieron en las últimas horas del 13 de ese mismo mes con el permiso del mismo Vergagni. Una vez allí, cada uno de estos individuos aludidos, asumieron de común acuerdo y con pleno dominio de su actuar conjunto, diferentes roles y realizaron aportes indispensables en la ejecución de los ilícitos planeados. 

Luego de transcurrido cierto tiempo durante el encuentro, más precisamente entre las últimas horas del 13 de septiembre y las primeras horas del día siguiente, siempre conforme a lo planeado y con la misma finalidad tenida en miras (matarlo para apoderarse impunemente de sus bienes), agredieron físicamente a Bruno, causándole una serie de lesiones corporales y finalmente la muerte. 

Las lesiones

En primer lugar, le produjeron con el uso de un elemento cortante filoso heridas en el antebrazo derecho con exposición ósea y desviación cubital de la mano. Asimismo, le aplicaron reiterados golpes -sea con elementos contundentes o sin ellos- a Vergagni que le causaron dos heridas cortantes en región mandibular inferior. Por último, golpearon e impactaron en numerosas oportunidades y con extrema violencia la cabeza de Vergagni con un premio otorgado al nombrado; que sirvió de elemento homicida, el cual tenía gran peso, alta cinética y fuerza de impacto (caracterizado por ser duro y por presentar brazo metálico dorado símil bronce, base de madera maciza y placa dorada que rezaba "Bruno Vergagni mejor productor 2° Tandil Cine..."). 

Se sostuvo en la imputación que los asesinos actuaron en forma segura y sin riesgo para sí mismos frente a un Vergagni incapaz de oponerse o defenderse contra la agresión física descripta que éstos desplegaron. En concreto, los sujetos aludidos no sólo lo atacaron por sorpresa y a traición -tal como además lo venían planeando en el sitio y antes del hecho- sino también aprovecharon la evidente y extrema vulnerabilidad psicofísica de la víctima que redujo al mínimo el control consciente de sus movimientos o su reacción ante esa brutal y desmedida agresión. Ese estado de Vergagni se debió fundamentalmente a que había consumido previo a su muerte bebidas alcohólicas en exceso.

Lo robado

Luego del asesinato, los señalados se apoderaron de las pertenencias de la víctima: la suma de seiscientos a mil dólares estadounidenses, un Iphone 7, un celular Samsung S8 abonado, un celular Samsung modelo SMJ111M, un celular motorola, un celular marca Samsung Note 9, una notebook marca "Lenovo" (inventariada de la Unicen), una Notebook "Sony Vaio", una valija de viaje color azul marca Primicia con calco que se lee "C5N", una mochila color negro y verde marca Gremond, una mochila color gris y negro marca Convoy, y prendas varias,  un reloj pulsera, una planchita de pelo color negro, una máquina de cortar pelo, entre otras cosas. 

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