Paro de colectivos en La Matanza tras el brutal ataque a un chofer: “Así no se puede trabajar”
Los trabajadores de la línea 378 y otras líneas del oeste bonaerense realizan un paro de 24 horas en reclamo de mayor seguridad. El sábado a la noche, un colectivero fue atacado con un arma blanca durante un robo en Isidro Casanova.

La línea 378 de colectivos no presta servicio este lunes como medida de fuerza tras un violento asalto a uno de sus choferes en Isidro Casanova. El ataque ocurrió el sábado por la noche, cuando un delincuente abordó la unidad simulando no tener dinero para pagar el boleto y luego desfiguró con un arma blanca al conductor.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailEl paro fue convocado por el cuerpo de delegados de la empresa Almafuerte, que también nuclea las líneas 218, 284, 325, 622 y 628, por lo que ninguna estará en funcionamiento durante toda la jornada. Además, los trabajadores anunciaron una marcha para este martes a las 11 hacia la plaza de San Justo bajo el lema “Ya basta, queremos trabajar tranquilos”. También se sumarán choferes de la compañía La Cabaña.

Un ataque que casi termina en tragedia
El hecho ocurrió alrededor de las 21.45 del sábado, cuando el chofer levantó a un pasajero que pidió viajar sin abonar el boleto. Según la víctima, el hombre conversó con él durante todo el recorrido y, al llegar al final del trayecto, lo atacó brutalmente: lo cortó en varias partes del rostro, le robó sus pertenencias y huyó a pie.
El conductor fue atendido por una ambulancia del SAME y luego denunció el hecho. Las heridas fueron profundas y requirieron varios puntos de sutura. “Casi lo degollaron”, describió un compañero. Otro delegado, Gabriel Gusso, fue tajante: “No lo mataron de casualidad. Si lo cortaban un poco más abajo, lo podrían haber matado”.
Reclamos por seguridad y falta de respuestas oficiales
El reclamo de los trabajadores va más allá del hecho puntual. “Hace un mes tuvimos el mismo problema con otro compañero”, advirtieron. También cuestionaron el accionar de las autoridades: “Nos prometieron más presencia policial, pero solo estuvieron dos días y se fueron. No tenemos bandera política, queremos una solución”.
Uno de los puntos más criticados es la discontinuidad en el monitoreo en tiempo real dentro de las unidades. “Se había destinado presupuesto para instalar cámaras en los colectivos, pero la Provincia no renovó el contrato de cobertura vía satélite. Solo graban, pero no permiten prevenir”, explicaron desde la UTA.
Además, apuntaron contra la deuda en subsidios a las empresas. “El dinero enviado por el Gobierno fue usado para cubrir deudas viejas y no se destinó a renovar la cobertura de cámaras. Así no se puede seguir. Es un desastre”, concluyeron.