Volvió el típico café de la mañana
Ayer volvieron a abrir sus puertas los sitios gastronómicos y, a pesar de que la mañana fue sumamente lluviosa, algunos tandilenses optaron por volver a tomarse el café de mediamañana en su sitio habitual.
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En el Figlio de la calle San Martín, desde las 9, empezaron a atender a sus clientes que poco a poco se fueron ubicando en distintas partes del salón, todos separados, atentos a su lectura o simplemente mirando hacia fuera, disfrutando de ese momento vedado por la cuarentena.
Juan Pradere, encargado del lugar, contó que se han organizado muy bien para esta reapertura y están todos con ánimos de hacer las cosas bien para cuidarse y cuidar al cliente.
¨Queremos que la gente se sienta cómoda cuando venga, pero tenemos muchos protocolos que cumplir por el bienestar de todos¨, reveló, mientras señalaba el puesto de higiene ubicado en la entrada con los elementos de sanidad correspondientes y las reglas a cumplir. Asimismo, en cada una de las mesas y baños los usuarios disponen de alcohol en gel para las manos.
Además, reveló que deben tomar los datos de cada cliente que ingresa y que dispusieron todo el mobiliario como para conservar la distancia de dos metros por mesa.
En este sentido, contó que previo a la pandemia tenían una capacidad para ubicar unas 40 mesas, como para sentar entre 140 y 160 personas, pero ahora debieron reducir esa disposición y pueden llegar a ubicarse 88 clientes sentados en 22 mesas.
Por otro lado, detalló que son unos cinco los trabajadores que están actualmente atendiendo, cada uno con una función específica. Uno de ellos, por ejemplo, se ocupa únicamente de la recepción como para orientar a los que llegan y que todos se sientan cómodos.
¨Algo de gente ya ha venido. Ni bien abrimos dimos ingreso a algunas personas que son clientes de siempre y fue un reencuentro lindo¨, contó y admitió que extrañaban mucho la actividad. Reveló, también, que para ellos lo que se da allí es como un ritual, donde ya conocen a quienes se acercan habitualmente y han generado un vínculo muy lindo.
