Reclamo vecinal
Vecinos de Villa Galicia se reunieron para expresar su preocupación ante una ola de inseguridad
Se llevó a cabo en el Centro de Salud Comunitaria del barrio, en encuentro del que formo parte el concejal Nicolás Carrillo. Aseguraron que en los últimos meses han aumentado los robos en los hogares y en la vía pública, como así también los actos vandálicos, por lo que tomaron la decisión de juntar firmas para presentar un documento en el Concejo Deliberante.
Hastiados de la inseguridad a cualquier hora del día, un grupo de frentistas se reunió en la tarde del jueves con el concejal Nicolás Carrillo en el Centro de Salud Comunitaria Lisandro de la Torre del barrio Villa Galicia, para trasladarle la preocupación por la problemática y pensar en conjunto la forma de visibilizar lo que ocurre, con la esperanza de que la situación cambie. Fueron invitados representantes de la comisaria Tercera, pero diez minutos antes avisaron que no podrían asistir debido a un allanamiento que debieron realizar.
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Vandalismo y delincuencia
La barriada aseguró que en los últimos meses los robos, actos vandálicos y de violencia se multiplicaron por toda la zona, poniéndolos en una alerta constante que no les permite descansar tranquilos. Denuncian falta de iluminación, cámaras del Municipio que no funcionan, y una escasa presencia policial que hace que los delincuentes se paseen a plena luz del día robando en la calle e ingresando también a los hogares.
Una de las vecinas comentó que hace algunos días llego por la noche a su casa, y se encontró una camioneta estacionada afuera de su casa que le resultó sospechosa, al acercarse descubrió que la reja del hogar había sido violentada y abierta, por lo que decidió no ingresar y refugiarse en lo de su vecina, ya que suponía que había alguien adentro y el de la camioneta “le hacía campana”, a los minutos salió observó por la ventana de la vivienda lindera como un individuo salió corriendo y se subió rápidamente al vehículo. Le robaron un reloj, perfumes, celulares, “y algunas cosas más que prepararon para salir y no llegaron a agarrar”.
En octubre del año pasado hicieron una celebración en el mismo salón donde se llevó a cabo el concilio, para festejar el aniversario del barrio. Al otro día, descubrieron que habían abierto a patadas la puerta trasera del lugar, pero no lograron se llevarse mucho porque solo quedaron cubiertos y algunos vasos.
A su vez, desde el centro de salud, les acercaron una nota sabiendo de la reunión, donde solicitaron mayor presencia policial los días sábado, domingo y lunes después de que abren a las 6. 20, ya que muchos jóvenes llegan alcoholizados y producen destrozos en la zona, como así también intentos de robo, de hecho la empleada administrativa cierra con llave su despacho aun en horario laboral, por temor a una emboscada.
Anteriormente ya habían realizado este pedido en el Municipio, y por un breve lapso de tiempo un patrullero custodiaba la sala, pero no duró más que algunos días. El horario nocturno es uno de los temas más preocupantes, ya que el desenfreno del alcohol desinhibe a los jóvenes, quienes comenten diversos actos vandálicos y delictivos, poniendo en vilo al barrio.
Reflexionaron acerca de las razones de este incremento delictivo, llegando a la conclusión de que otra de las razones, además de la nocturnidad y la cercanía al boliche bailable, es la cantidad de transito que hay en la zona, la cual permite que los delincuentes puedan hacer lo suyo y escaparse rápidamente camuflados entre la gran cantidad de autos que circulan tanto por Del Valle, como por las calles internas.
Además, expresaron que la cercanía con el barrio La Movediza, donde la inseguridad también es moneda corriente, facilita que los malhechores se acerquen a delinquir al barrio, y vuelvan rápidamente con el botín en su poder.
Concluyeron que por más que la confianza en el accionar de los efectivos policiales sea escasa, deben denunciar los hechos por más leves que sean, ya que esto permite que la situación se visibilice, las fuerzas de seguridad se vean presionada a actuar, y los datos sobre los sospechosos queden asentados en la dependencia, caso contrario, la situación no hará más que empeorar.
Por último, juntaron firmas entre todos los presentes, para llevar un documento al Concejo Deliberante, exponiendo los reclamos, solicitando que se informe cuáles son las cámaras que funcionan, cuáles no, y como pueden arreglarse, mayor iluminación y patrullaje en la zona.