"Una alegría tremenda": empezó la obra para llevar agua potable a La Movediza II

Comenzaron los primeros movimientos de una obra más que esperada por la barriada de La Movediza II, la extensión de la red que llevará agua potable a los vecinos del lugar. Durante la mañana, en la esquina de Azucena y Falkner, las máquinas iniciaron el trabajo de apertura de zanjas que permitirá posteriormente la colocación de los caños.

“Es una alegría tremenda porque vivir sin agua es terrible. En este momento los vecinos de la calle Pacheco y Alvarado están sin agua, no les llega. Y la verdad, prohibirle a tus hijos que tomen un vaso de agua porque tenés que racionarla, es terrible”, señaló la referente barrial Paola Quero.

En concreto, la obra que tiene un plazo de ejecución estimado en 60 días supone la extensión de 1095,61 metros lineales de red de agua y 46 conexiones domiciliarias con sus respectivos medidores. Beneficiará a alrededor de 100 familias en las dos manzanas comprendidas por las calles Falkner, Alvarado, Azucena y Eduardo Rodríguez. 

En la sesión del 22 de junio pasado, el Concejo Deliberante aprobó por unanimidad la única oferta de la licitación presentada tras dos licitaciones fallidas. La misma fue adjudicada a la empresa Guillermo Andrés Maggiori, por un monto de 8,7 millones de pesos financiados desde el Estado Nacional, por la Secretaría de Integración Socio Urbana (SISU) a través Registro Nacional de Barrios Populares (Renabap). La iniciativa se produjo en el marco de la Ley 27.453, que busca regularizar y brindar derechos básicos a las zonas que forman parte de dicho registro.

Tras aprobarse en el Legislativo, el Ejecutivo firmó el contrato y finalmente ayer se dio inicio a los trabajos. Se trata de una demanda histórica de los vecinos de la barriada, cuyo reclamo se remonta a más de una década atrás. 

“Una alegría tremenda”

“Acá están haciendo todo lo que es la pasada de los caños y se están abriendo las zanjas que van por la línea municipal para cerrar todo por donde irá la red”, relató Paola Quero, presente en el lugar durante los inicios de los movimientos.

“Hace muchísimos años veníamos pidiendo la red de agua potable para La Movediza II. Y después de mucho tiempo, con el acompañamiento del Movimiento Evita, del concejal Nicolás Carrillo y otras instituciones, logramos que la Municipalidad presentara un proyecto a la SISU y se aprobara. Hacía rato que tenían que haber empezado, pero no se conseguían los materiales, así que ahora se consiguieron y arrancaron la obra”, agregó la vecina.

Tras señalar que la obra supone “una alegría tremenda” para la barriada, Quero precisó que a la fecha hay diversas zonas que se encuentran sin agua. La calle Alvarado entre Pacheco y Falkner, sostuvo, “ayer no tenían agua, y era desesperante. No llegamos hasta el viernes que vuelvan a pasar los aguateros, porque el lunes había llovido y no pasaron. Tuve que comunicarme con ellos para que vinieran hoy, porque las familias no llegan con el agua, porque tenemos unos tanques que no llenamos con ese  agua, y más cuando llueve”, lamentó.

La situación, sumó Quero, es angustiante para muchas familias de la zona. Algunas cuentan con muy poca presión, y otras directamente no cuentan con agua y dependen del apoyo de los camiones destinados a suplir la falta del servicio.

“Estamos hablando de un derecho básico y universal como el agua, no de otro derecho de urbanización del barrio, que también faltan, sino de lo esencial que es el agua. Poder tenerla creo que es un logro y una alegría inmensa para todo el barrio, le va a cambiar la vida a todos. Vamos a dejar de racionar, y de decirle a los nenes que no le podemos hacer una mamadera porque tienen que esperar a que salga un poco de presión”, expresó.

La cisterna inaugurada en abril, agregó la vecina, no afectó a la zona de La Movediza II. Consultada por si produjo algún tipo de beneficio, planteó que “a nosotros no, hay familias que no tienen agua. Hace años que no les sale una gota de agua, y yo que estoy en la primera cuadra tampoco tengo, el fin de semana este no hubo en todo el fin de semana agua, y la presión es muy poca también”, concluyó.