Estafa virtual
Un vecino denunció que una cuenta de Instagram utiliza la dirección de su casa para cometer estafas
Miguel Ciolfi, propietario de un departamento ubicado en 14 de Julio al 400, contó que al menos una treintena de vecinos de Tandil se han acercado en lo que va del año para consultar por prendas y zapatillas que supuestamente vende en un showroom o porque directamente han sido víctimas de una estafa virtual. Dijo además que Fiscalía y Policía no le toman la denuncia porque él no es directamente damnificado. “La denuncia tienen que hacerla quienes fueron estafados”, aseguró.
Un vecino de la ciudad denunció que una cuenta de Instagram que vende indumentaria en forma online desde José León Suárez utiliza la dirección de su domicilio para cometer estafas a clientes.
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Se trata de Miguel Ciolfi, propietario de un departamento ubicado en 14 de Julio al 400, a donde al menos una treintena de vecinos de Tandil ya se han acercado en lo que va del año para consultar por prendas y zapatillas que supuestamente vende en un showroom o porque directamente han sido víctimas de una estafa virtual.
“Hay una página en Instagram que se llama vip.coronado, que publica una mercadería importada muy buena, a buen precio, y que envía a gran parte del país”, dijo Ciolfi a “El resumen”, por ECO TV y la 104.1 FM.
“Esa persona dice que nosotros tenemos un showroom, con horarios a la mañana y horarios a la tarde, para visitar los productos que exhibimos en Tandil en la calle 14 de julio 477”, agregó.
“Acá han venido muchísimas personas a averiguar cuál es el showroom y a decir que pagaron el producto, pero que el producto no les llega”, comentó Miguel.
El desfile comenzó este verano. “Venía gente a buscar zapatillas u ojotas que había comprado, pero eso no nos llamó la atención”.
“Pasa que ahora, con ropa de invierno, que es más cara, la gente se preocupa y viene a averiguar”, aseguró.
Ciolfi –propietario pero no morador de la vivienda, ya que quien allí vive es su hermana Cristina- intentó realizar la denuncia ante distintos organismos policiales y de la Justicia, sin obtener hasta el momento resultados satisfactorios.
Primero probó suerte en la Fiscalía local, luego en la Comisaría Primera de la ciudad y finalmente ante una oficina de Ciberdelitos que funciona en La Plata. En todos los estamentos le dijeron lo mismo: que no puede radicar una denuncia porque él no es un damnificado.
Y si bien consideró que “somos indirectamente damnificados”, entiende que “la denuncia tienen que hacerla quienes fueron estafados”.
También se dirigió a la Policía Federal, donde le comentaron que “no se trata de un delito federal; esto es una persona que está en provincia de Buenos Aires cometiendo fraude en la provincia de Buenos Aires”, según indicó.
Con la intención de terminar de una vez por todas con esta penosa situación, Miguel les pidió a algunos de quienes fueron estafados que realicen ellos mismos la denuncia.
“De todas maneras yo denuncié en la página, que sigue funcionando”, sin obtener respuesta.
Seguimiento a la responsable
Según relató el vecino, todo comenzó en el verano pasado pero “ahora se intensificó porque los montos son más importantes y la gente quiere confirmar (antes de comprar), recibir el producto que pagó o verificar si realmente existe” el sitio consignado por la cuenta en la red social.
“Hasta el momento habrán venido 30 personas, en cualquier horario del día. Incluso ha venido gente del barrio, que sabe que esto es un departamento y no otra cosa”, comentó Ciolfi.
Además dijo que, de los consultantes, “algunos compraron y pagaron; nos han enviado los tickets de pago. Incluso algunos vinieron muy alterados, creyendo que uno es cómplice”.
“Pero miren –remarcó- acá no hay ningún showroom, no hay ningún negocio”.
Para tratar de dar con la persona que estaría cometiendo la estafa, Miguel contrató a una firma que brinda el acceso a documentos, registros e información pública a través de distintos contenidos y servicios y ésta le proveyó algunos de los datos de quien figura en los tickets de venta.
De esta manera, él conoce el nombre y apellido de la propietaria de la cuenta bancaria a que las personas le transfirieron el dinero y sabe que se trataría de una joven con domicilio en la localidad de José León Suárez.
Tanto Miguel como su hermana Cristina realizaron copias de ese material y se lo entregan a todas las personas que se acercan a consultar.
“Si pienso en positivo, alguna autoridad tiene que intervenir, hay oficinas de ciberdelitos”, dijo Miguel pero –agregó- “no hay nada, ninguna institución que nos pueda defender”.
Finalmente, el vecino comentó que descree de que su dirección haya sido difundida al azar. “Algún pariente, conocido o amigo tienen acá”, concluyó.