Había sido infraccionado y logró que limpiaran sus antecedentes al descubrir una irregularidad en el procedimiento
Víctor Hugo Conforti había sido infraccionado en marzo por circular sin el seguro de su carro. Le secuestraron el carnet de conducir y le dijeron que para recuperarlo debía abonar en Dolores. No obstante, decidió estudiar la Ley y descubrió que había una irregularidad. Tras 512 días de reiteradas cartas y reclamos, le comunicaron que limpiarían sus antecedentes y que le devolverían la licencia.
El tandilense Víctor Hugo Conforti, quien actualmente reside en Villa Cacique por cuestiones laborales, se comunicó con El Eco de Tandil para dar a conocer un confuso episodio que atravesó meses atrás con la Policía Vial local y que, tras una serie de engorrosos reclamos valederos, logró solucionar.
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Conforti había sido infraccionado el 2 de marzo de este año cuando circulaba por la Ruta Provincial 74 con un carro que no tenía seguro. En el cruce con la Ruta 30, personal policial lo detuvo y le pidió la documentación. Al no tener el papel mencionado, le secuestraron la licencia de conducir, pero lo dejaron seguir circulando.
“La situación me resultó extraña porque quitándome el carnet me colocaban en una posición irregular para continuar manejando. Sin embargo, la Policía no puso objeción en que lo siguiera haciendo. Solo me labraron una infracción y me dijeron que debía concurrir a la ciudad de Dolores para pagar y recuperar la licencia”, narró.
Contó que se negaron a identificar por escrito en el acta el juzgado interviniente y que, a contramano de lo que el común de la gente opta por hacer -pagar voluntariamente o viajar a Dolores-, él decidió ir por el proceso de juzgamiento y “ahí empezaron a saltar todas las chispas”.
“Me estudié a fondo la Ley 13.927 y un Decreto de Provincia. Está claro que Tandil no es jurisdicción de Dolores en estos casos sino que es el Tribunal de Faltas Municipal de Tandil, que lo rechaza continuamente sin justificación jurídica alguna”, clamó.
Tras las averiguaciones pertinentes y los contactos con vecinos, logró determinar que “la Policía incurre en una recurrente negligencia al no identificar en el acta el juzgado competente” ya que de esa forma impide que los infraccionados ejerzan la defensa en el justo proceso.
Asimismo, aseveró que el accionar de los uniformados implica “una maniobra meramente recaudatoria que roza la extorsión”, y explicó cuál es la mecánica que utilizan: “El personal detiene vehículos y ante cualquier falta retiene el carnet. Le indica al conductor que para recuperarlo debe ir a Dolores y realizar el pago voluntario. El vecino, al quedarse sin licencia y con el descuento que se ofrece por abonar de manera voluntaria, efectúa la transacción sin cuestionar”.
Pero Conforti no tomó esa vía sino que intentó “detener esta práctica injusta”. Si bien el camino no fue fácil, ya que debió contactarse con diferentes dependencias, logró finalmente su cometido.
“Actúan de manera desinteresada”
Víctor Hugo se interiorizó y se asesoró en el marco normativo de la Ley de Tránsito 13.927 y el decreto 69/2020, “que determinan la competencia territorial del Juzgado de Dolores”.
“Pude informarme que en los casos de lugares que no cuentan con existencia o jurisdicción de Juzgado Administrativo de Infracción de Tránsito Provincial, como es el caso de Tandil, los municipios, a través de sus tribunales de faltas, son los encargados del juzgamiento de las infracciones”, contó.
A raíz de ello, elevó diferentes misivas a los juzgados, fiscalías, defensorías e incluso al Municipio, generando un expediente personal de, aproximadamente, 200 fojas, pero lamentablemente nadie se hizo cargo de su problema.
“Tengo un expediente de 200 fojas en donde intervienen el Juzgado de Faltas de Tandil, el Juzgado Correccional, la Fiscalía de Asuntos Especiales de Azul, la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires, la Defensoría del Pueblo de Tandil, la Secretaría de Protección Ciudadana, la de Legal y Técnica y el intendente Miguel Lunghi. Pero nadie se ocupa, no sé por qué. Seguramente todos actúan un poco desinteresados o corporativamente. Siempre hacen alusión a las competencias y les cuesta avalar a la del ciudadano tandilense”, se lamentó.
Señaló que la Defensoría local tiene “intenciones” pero que no toma postura respecto al incumplimiento de la Ley. Subrayó que no espera que resuelva nada, porque no es su tarea, pero sí que observe la irregularidad porque están perjudicando a ciudadanos tandilenses.
En tanto, criticó al Municipio al advertir que “no tiene idea cómo resolverlo” y al área a cargo de Atilio Della Maggiora porque “es muy llamativo que esta Secretaría, que tiene que defendernos como institución, no se interiorice, por lo menos, y no sepa que una fuerza policial está actuando por fuera de la Ley”.
Absolución y devolución de carnet
Afortunadamente, Conforti logró su cometido y, tras 512 días de reiteradas cartas y reclamos, le comunicaron desde el Juzgado Administrativo de Infracciones de Tránsito de Dolores, a través de un mensaje de WhatsApp, que se absolvía la infracción, que limpiarían sus antecedentes en el RUIT y que le devolverían la licencia por sistema.
“Están haciendo incorrectamente las infracciones. La Policía no pudo demostrar el motivo por el que envían a Dolores, creo que es una costumbre. Pero Tandil, a través de su Municipalidad, es la encargada del juzgamiento de estas infracciones y no lo hace”, remarcó.
Añadió que la Ley así lo determina y que lo que ocurre perjudica a una importante cantidad de personas.
“Yo ya solucioné mi caso personal, pero quisiera que se conocieran todas estas irregularidades y circunstancias que llevan a una falta de respuesta y solución administrativa”, concluyó.