Violencia
Un remisero golpeó a un inspector de Tránsito cuando le quiso labrar una multa
El hecho ocurrió el viernes al mediodía en la puerta del Colegio Sagrada Familia de la ciudad, cuando un remisero estacionado en un lugar indebido se resistió a que le realizaran la multa correspondiente. El agente agredido sufrió “heridas de carácter leve” pero el hecho evidencia la violencia a la que en ocasiones se debe enfrentar el personal de Control Vehicular.
Una escena de suma violencia se registró el viernes al mediodía, en las inmediaciones del colegio Sagrada Familia de la ciudad, cuando un remisero que estaba en infracción golpeó en la cabeza al inspector de Tránsito que se disponía a labrarle una multa por estacionar en un lugar prohibido.
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Según el reporte policial, el agente agredido, identificado como Mauro José Muñoz, recibió golpes de puño en la cara por parte de Raúl Alberto Bidagain, por lo que debió ser atendido en un centro de salud donde se le realizaron los estudios correspondientes.
El director de Control Vehicular de Tandil, Walter Villarruel, contó por su parte que el agresor había estacionado su auto en doble fila sobre la mano izquierda de la calle Paz, algo que en esa zona está prohibido por ordenanza municipal.
“Alrededor de las 12.30, un vehículo remís se estacionó a la altura de la escuela primaria SAFA, por Paz casi llegando a Sarmiento, con una pasajera que supuestamente iba a la clínica Paz”, le dijo Villarruel a El Eco de Tandil, y agregó que “es sabido que en ese lugar no se puede estacionar a la izquierda. Quienes lo hacen es para que el pasajero descienda rápidamente y siga su camino”.
“El inspector le comunicó que no se podía estacionar allí y el remisero hizo caso omiso. Se generó un flujo de tránsito importante porque quienes venían atrás no podían continuar transitando”, señaló el funcionario municipal y amplió: “El inspector se acercó, le pidió que retirara el vehículo y, como el conductor se negó y se negó también a mostrarle la documentación, el agente sacó el talonario para infraccionar. Cuando se disponía a realizarle la multa, el remisero se bajó, le tiró el talonario al piso y empezó a darle golpes de puño en la cabeza”.
“Por suerte, tenemos el video de la cámara del Municipio que registró toda la secuencia y donde se ve claramente que el remisero atacó a golpes de puño al inspector”, aseguró Villarruel.
La denuncia quedó radicada bajo la carátula de “Lesiones leves” en la Unidad Fiscal de Instrucción (UFI) 8 que está a cargo de Gustavo Morey.
Según el reporte policial, Muñoz denunció el viernes que “en puerta del colegio Sagrada Familia, sito Paz 684, está realizando control vehicular, estacionando doble fila vehículo marca Fiat, modelo Siena, dominio AB079MG, conducido por Bidegain Raúl Alberto obstruyendo el tránsito”.
Cuando “solicita al conductor que se retire –continúa el informe-, Bidagain desciende del vehículo, arrojándole un golpe de puño en el rostro a Muñoz, para luego retirarse del lugar. Muñoz aporta informe médico donde refiere ‘traumatismo’, siendo lesiones de carácter leve”.
Otros episodios violentos
Villarruel explicó además que, el del último viernes, “era un control habitual, rutinario. Siempre controlamos que los automovilistas dejen a los chicos en la escuela y sigan su viaje, que no se queden detenidos sobre la izquierda”.
Y relató que, lamentablemente, no se trató de un episodio aislado. “Estamos sufriendo, como ya nos ocurrió en otra época, mucha violencia, con situaciones que nos generan inseguridad a la hora de trabajar”, señaló.
En ese sentido, contó que el miércoles de la semana pasada, en la intersección de las calles Patagonia y Beiró, alrededor de las 15, un motociclista exhibió una cuchilla cuando le quisieron retener el vehículo en uno de los operativos denominados “dinámicos” en los que las motos de la Dirección de Control Vehicular circulan por la ciudad para, eventualmente, detectar infracciones.
“El motociclista no tenía licencia, casco, patente y se resistía a que le retuvieran el vehículo. Y encima sacó un arma blanca”, dijo Villarruel.
“Por suerte, en el lugar se encontraba una persona allegada que lo calmó”, agregó.
El viernes por la tarde, en otro operativo, un motociclista perdió el equilibrio y cayó del rodado cuando inspectores querían aplicarle una multa en la esquina de Trabajadores Municipales y Pujol por circular con el caño de escape libre.
“El conductor terminó enredándose con la moto de los agentes y se cayó. Encima nos echó la culpa a nosotros. Pero no tenía nada en regla; lo que sí tenía -por suerte- era el casco puesto”, contó Villarruel.
Y destacó que “en todos los casos se trata de personas que están visiblemente fuera de la norma. Es decir que se da siempre en infractores que no tienen los papeles correspondientes o que saben que se les va a retener el vehículo”.