Tras retomar con la atención personal, se incrementaron las consultas en la OMAI
La Oficina Municipal de Asistencia para Inquilinos retomó la atención personal y, según mencionó Matías Martínez Marini, quien está a cargo del área, las consultas se incrementaron. Al respecto, informó que la gran mayoría de ellas refieren a la nueva ley de alquileres y al decreto que congela el precio y suspende los desalojos.
Luego de varios meses en los que solo trabajaron a través de canales digitales y telefónicos, la Oficina Municipal de Asistencia para Inquilinos retomó la actividad presencial y, según anunció Matías Martínez Marini, quien está a cargo del área, las consultas se multiplicaron.
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Durante buena parte del 2020, en el marco de la pandemia del coronavirus y de las medidas adoptadas para prevenir los contagios, la OMAI solo estuvo atendiendo vía email, WhatsApp y telefónicamente.
“Ya desde hace un tiempo hemos retomado la manera presencial de atención, aunque no hemos dejado de utilizar los otros medios. Pero esto ha hecho que se incrementara de manera considerable la cantidad de consultas que se venían recibiendo, más en un año tan particular como el que dejamos atrás”, señaló Martínez Marini en comunicación con el programa Cosas que Pasan, que se emite por Eco TV y Tandil FM 104.1.
Asimismo, indicó que en este 2021 también habrá algunas novedades respecto al tema inmobiliario, teniendo en cuenta que ya varios contratos comienzan a firmarse bajo la nueva ley y que se prorrogó hasta el 31 de marzo el DNU que congela los alquileres y suspende los desalojos.
“Fue un año difícil en el que se ha apostado mucho al diálogo, al tema de la mediación; a lo que yo siempre denomino el principio de esfuerzo compartido. El 2020 fue ciertamente difícil para todos, y entre ese segmento de personas afectadas están los inquilinos que se encontraron con complicaciones a la hora de pagar sus alquileres o las obligaciones contraídas”, sostuvo.
Incluso reveló que desde que se presentó la Oficina, a fines de abril de 2019, desde el área comenzaron a llevar una estadística de las denuncias y los reclamos recibidos y que, en este último tiempo, hubo un gran cambio. En ese aspecto, aseveró que últimamente lo que más se registró fue el pedido de asesoramiento y de información sobre el DNU y la nueva ley de alquileres.
“Las consultas más que nada pasan por el contenido del decreto y la nueva ley. Se acercan cuando hay relaciones directas entre locatarios y locadores, porque cuando hay un profesional en el medio, brinda algún asesoramiento respecto a estas normas”, aseguró.
Aclaró que uno de los temas más comunes se relaciona con las deudas que se generan por el diferimiento de pagos y manifestó que si bien los desalojos están prohibidos, en algunos casos se notificó a los inquilinos mediante carta documento por la deuda que se estaba generando.
Respecto a ello, hizo una aclaración: “Si es por diferencia de precio, es decir que justo había un cambio en el valor locativo pero el locatario optó por seguir pagando el canon anterior, porque así se lo permite el decreto, entonces esa diferencia se paga más adelante y no conlleva interés de ninguna índole. En cambio, si hay directamente una falta de pago se puede cobrar un interés compensatorio por el diferimiento del pago que no puede exceder la tasa que fija el Banco de la Nación Argentina para los plazos fijos a 30 días”.
Relación entre locatarios y locadores
Remarcó Martínez Marini que, a diferencia de lo que ocurrió en otras localidades, en Tandil no hubo mayores inconvenientes entre las dos partes implicadas en la relación locativa y repitió que lo que primó fue el principio del esfuerzo compartido, que se basa en que cada uno ceda una parte y “no salgan los dos tan lastimados”.
Explicó, de cualquier forma, que eso dependió mucho también de cómo venía la relación entre ambos y trazó un paralelismo con una pareja: “Arrancan sin conocerse y en el transcurso del tiempo se va desarrollando ese enlace que va a injerir en cómo se llegue a los acuerdos”.
Por otra parte, contó que en nuestra ciudad mayoritariamente se llegó a acuerdos en muy buenos términos y que hubo una muy buena predisposición tanto de los locadores como de los locatarios.
Empero, destacó que ello sucedió en aquellos inmuebles en los que su alquiler no representaba el único ingreso para el arrendador ya que “nos hemos encontrado con que hay muchas personas que arrendan su vivienda y con eso alquilan otra cosa. Entonces dependen, en gran parte, de ese ingreso para pagar su renta. Así se produce una cesación de pagos y terminan afectadas otras partes debido a que ese propietario que alquiló su casa también tiene que conversar o mediar con quien le alquila a él.”.
Nivel de endeudamiento registrado en Tandil
Pese a que el DNU otorga la posibilidad de no pagar los aumentos que se registraran durante la emergencia sanitaria, lo cierto es que ello genera una deuda que será difícil de saldar en un futuro. No obstante, sostuvo el titular de la OMAI que el nivel de endeudamiento en nuestra ciudad no loa ha percibido tan grande.
“Entiendo que lo que ocurrió en Tandil es diferente a lo que pasó en otras ciudades, porque por lo que he leído, se ven niveles de endeudamiento muy fuertes”, comparó.
Aclaró, de todas formas, que igualmente mucha ciudadanos tandilenses han contraído deudas y que recién ahora la situación pareciera comenzar a normalizarse teniendo en cuenta que hay más actividades económicas permitidas y que “hay un poco de oxígeno”.
En ese sentido, compartió lo expuesto por el concejal del Frente de Todos y referente de la Red de Inquilinos Tandil, Juan Arrizabalaga, quien había comunicado en diálogo con este medio que es necesario que el Gobierno nacional comience a pensar en una política de desendeudamiento.
“Habría que buscar medidas y herramientas para aquellas personas que dentro de dos meses, si no se renueva el decreto, se van a encontrar con un estado de situación ciertamente muy difícil, teniendo en cuenta que se va a producir un cuello de botella. Porque van a tener que abonar el canon locativo actual más la deuda contraída”, marcó Martínez Marini y concluyó: “Y eso me parece que no es un tema menor, que habría que ir viendo cómo trabajarlo; habría que buscar alternativas para que esto no desencadene una serie de cartas documento intimando desalojos”.