Educación
Tras 5 meses, la Escuela 2 volvió a tener gas, pero elevaron un informe con otras problemáticas edilicias
Sostuvieron que es "un alivio", pero elevaron un informe para dar a conocer otras problemáticas
Tras 5 meses sin gas, la Escuela 2 recuperó el servicio. Fue luego de que se hayan colocado los medidores y realizado las pruebas de seguridad correspondientes. Sin embargo, continúan los reclamos por las condiciones edilicias del establecimiento.
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Por ese motivo desde la comunidad educativa elaboraron -con la asistencia de un profesional privado- un informe con el que determinaron las mejoras necesarias, y que elevaron a las autoridades del Consejo Escolar. Entre otras complicaciones, la situación generó una considerable pérdida de matrícula.
“Es un alivio, pero no dejamos de expresar y de hacer visible todo lo que conlleva no hacer las cosas a tiempo. Tenemos que dar vuelta la página, ahora podemos contar con los calefactores, con el gas para poder hacer la leche, con el termo, con agua caliente, con la cocina. Pero seguiremos por más obras que son necesarias y trabajando para la comunidad educativa”, expresó la directora Gabriela Peñin en diálogo con El Eco de Tandil.
En junio pasado, tras detectar una situación de riesgo en la caldera, Camuzzi retiró los medidores del establecimiento. La comunidad educativa se movilizó para que los responsables solucionen con celeridad el tema. A mediados de dicho mes realizaron una masiva asamblea que culminó con un corte de tránsito y manifestación sobre la avenida España, que apuró la llegada de las autoridades del Consejo Escolar. En el lugar, el propio presidente del organismo anunció el llamado a licitación para las obras.
Durante los meses que se extendió la situación, la escuela adoptó un régimen de cursadas por turnos, en donde algunos alumnos concurrían a clase dos o tres veces por semana según correspondiera. La medida permitió no perder el año, pero también tuvo sus efectos adversos. A la fecha calculan que la institución perdió alrededor de 60 alumnos, aproximadamente dos secciones completas.
Hacia comienzos de septiembre las obras se encontraban concluidas casi en su totalidad, por lo que retomaron la presencialidad. Sin embargo transcurrió un mes y medio más hasta que se colocaron los medidores, el pasado martes. Durante la jornada de ayer no se dictaron clases en la escuela, con motivo de realizarse las pruebas de seguridad correspondientes. Finalmente, el conjunto de los alumnos volverá a las aulas.
“Hay otras cuestiones”
“Recién diez y media se pusieron a prender los calefactores”, informó la directora con respecto al esperado trabajo de parte del Consejo Escolar tras meses sin contar con el servicio.
“Mañana (por hoy), vamos a dar clase porque no podemos seguir suspendiendo. Ya llevamos casi 40 días. Hicimos una media, una análisis estadístico y los chicos perdieron entre 35 y 40 días de clase por lo que va toda esta situación”, lamentó. “Tenemos una pérdida bastante importante de matrícula, más o menos unos 60 alumnos. Si lo comparamos a secciones, son dos secciones que se perdieron”, agregó la directora.
Peñín planteó como “un alivio” la concreción de la obra, pero se refirió también a otra gran cantidad de mejoras necesarias para el establecimiento, y al informe que elaboraron a los fines de dar a conocer el estado de situación a las autoridades del Consejo Escolar.
“Junto con la Asociación Cooperadora se hizo un informe importante, interesante, con todo lo que queda por arreglar. Porque esto no son solamente cuestiones de calefacción, sino que hay otras cuestiones. De hecho no tenemos luz ahora, por un desperfecto. Toda esta instalación se recalentó y ayer se cambió un disyuntor. Toda esta situación trajo complicaciones e hizo visible la vulnerabilidad a la cual está la escuela”, sostuvo.
Por tal motivo, precisó, realizaron “un informe con un arquitecto privado de todo lo que nosotros pedimos para que se resuelva en el mes de enero o febrero”. Tras concretar el estudio, lo presentaron mediante Mesa de Entrada al Consejo Escolar.
La directora concluyó señalando que “es un alivio, por lo menos, contar con gas. Cambio de gestión va a haber, pero los próximos que ingresen van a tener que hacerse cargo de todo lo que queda”.