Transportistas no descartan solicitar un aumento extraordinario de boleto
Los incrementos de los últimos meses golpearon duramente al sector y desde la Cámara de Transporte manifestaron las dificultades que enfrentan para cubrir los costos de mantenimiento del servicio y sus empleados. "No podemos pagar los aguinaldos", expresó el titular de la entidad. Además, se mostró de acuerdo con que se prorrogue la concesión del sistema.
En medio del pedido realizado por el Ejecutivo al Concejo Deliberante para prorrogar hasta por un año la concesión del transporte urbano de pasajeros que vence en febrero de 2020, los transportistas acusan un fin de año muy complicado debido a las constantes subas de combustible y a la imposibilidad de hacer frente a los costos de mantención del servicio.
Recibí las noticias en tu email
Daniel Albanese, presidente de la Cámara de Transporte de Tandil, en diálogo telefónico con el ciclo radial “Dulce o amargo” (104. Tandil FM), se refirió al tema y afirmó que el sector planteó recientemente al Gobierno comunal sus inquietudes acerca de las dificultades para afrontar el pago de los aguinaldos. Los transportistas no descartan pedir un aumento excepcional de tarifa -como sucedió el año pasado-para poder solventar los gastos si no hay otras alternativas.
“Nos pidieron el estudio de costos para ver la realidad del sector, pero estamos muy mal, lo que más nos impacta es la suba continua de combustible. Es más caro en el canal mayorista que el precio en el surtidor”, explicó.
El valor del boleto
El pasado 28 de marzo el Concejo Deliberante, con el voto de la mayoría oficialista, aprobó el cuadro tarifario del transporte urbano de pasajeros que planteó un incremento escalonado en tres tramos. Así, desde ese entonces, el boleto plano pasó de 16,29 (valor previo al aumento) a 18,29 pesos; a 20,29 desde el 2 de mayo; y a 22,29 pesos desde el 1 de julio.
Albanese señaló que si bien es imposible fijar una tarifa impopular porque nadie usaría el servicio y atentaría contra los usuarios, advirtió que hay un desfasaje del 63 por ciento en cuanto al valor del boleto actual y el que debería cobrarse si se tienen en cuenta todos los costos producto de los aumentos y devaluaciones del último tiempo. En este escenario, la tarifa plana debería estar por encima de los 30 pesos.
“Un aumento de tarifa excepcional es una alternativa si no hay otras. No visualizamos muchas por ahora, quizás pedir una ayuda vía subsidio extraordinario, porque va a ser difícil sostener el transporte y pagar a los empleados. No podemos pagar los aguinaldos. Algunas empresas en otras ciudades comunicaron que si no había ayuda estatal no iban a poder pagar los aguinaldos”, sostuvo.
La prórroga de la concesión
Por otra parte, manifestó su acuerdo con la solicitud de prórroga de la concesión del servicio, al hallarla razonable en un contexto que no posee certezas con respecto a las políticas en la materia que adoptarán los nuevos gobiernos provinciales y nacionales.
El titular camarista consideró que para realizar el nuevo pliego de concesiones es preciso tener como referencia los lineamientos que dispondrá la gestión, sobre todo en cuanto a los subsidios al área.
“Un pliego de concesión debe definir extensiones de recorrida, cantidad, calidad, tipo de unidades. Hay que tener claras ciertas cuestiones de subsidios y sostenimiento del servicio”, aclaró.
Sin políticas subsidiarias evaluó que será muy difícil garantizar el funcionamiento y la accesibilidad del sistema. En función a cómo se subsidia deberán delimitarse las exigencias al proveedor del servicio, el nivel de calidad, las posibilidades de extensión de recorridos y frecuencias, y bajo qué condiciones operará el servicio de transporte urbano.
“Todo depende de las decisiones de la nueva gestión”, expuso Albanese, quien recordó que la Cámara presentó ante el Deliberativo local varias propuestas –que están en estudio- para mejorar y optimizar el servicio.
