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Tiempos de cuarentena
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Señor Director:
En estos días de cuarentena, tan preocupantes para todos por la pandemia, el aislamiento y la situación económica, algunas familias, como en mi caso, hemos recurrido al servicio de entrega a domicilio de Supermercados Monarca, ante la imposibilidad de ir al Súper.
Quiero destacar la atención esmerada de los empleados, la mayoría chicos y chicas jóvenes, que desde la recepción del pedido, hasta la entrega a domicilio, demuestran una empatía y amabilidad que seguramente excede la función por la que se los contrata. En nuestro caso todas las veces, nos recibieron el pedido con amabilidad y paciencia, respondiendo las consultas amablemente, luego la entrega se realizó dentro de los horarios pactados, en todos los casos facilitando el pago, con el medio que sea. En una oportunidad, quien recibió el pedido en casa, no encontraba la tarjeta de débito para abonar y el muchacho dijo que dejaba el pedido y que pasaba luego de nuevo a cobrar, cosa que así sucedió y se solucionó. Los artículos, prolijamente embalados y ordenados, todos con cajas en buen estado y con cinta de embalar para su seguridad, la cantidad de errores, son muy bajos, por no decir cero. Para cerrar la descripción del proceso de entrega a domicilio, los muchachos se ofrecen a entrar las cajas a la casa o ayudar. En nuestro caso, le conteste que gracias, que no hacía falta, y me contestó que no le molestaba ayudar, así como en otros pedidos ayudó a gente mayor que no podía.
Me imagino la alegría de gente que vive sola y no puede salir de su casa y recibe con semejante amabilidad su pedido, lo importante que debe ser para ellos. Por lo tanto quiero destacar y felicitar a los empleados del Supermercados Monarca, que realizan su tarea en estos momentos tan difíciles, con absoluta eficiencia y amabilidad, imagino que también, debe haber una estructura que fomenta esa forma de trabajar y un buen clima interno de trabajo para que actúen de esa manera aunque nadie los esté mirando. Y por último quiero destacar a la dirigencia máxima de tal empresa, entendiendo que la filosofía de, más que brindar un ‘servicio’, si no en ‘Servir’, debe comenzar desde allí.
Felicitaciones, para toda la empresa, en estos tiempos complicados, las buenas acciones y noticias hay que difundirlas. !Nada está perdido!
Oscar Ferrari
DNI 18155317
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Es mejor prevenir que curar
Señor Director:
El Covid 19 no es un riesgo laboral propiamente dicho, es un riesgo para la salud pública pero está muy claro que afecta la gestión laboral y empresaria en general.
Como sabemos, los especialistas en salud pública ante la carencia de tratamientos eficaces nos recomiendan medidas preventivas para enfrentar este mal, consistentes principalmente en higiene y aislamiento social, es decir aplicar el conocido dicho “es mejor prevenir que curar”.
Felizmente las autoridades de distintos partidos, ámbitos y niveles han coincidido lográndose el también conocido axioma “cuando trabajamos juntos se logran milagros”.
Con mucha satisfacción observamos que en nuestra ciudad y zona no tenemos nuevos enfermos hace más de un mes.
Lamentablemente hemos padecido una intoxicación informativa de acciones y medidas preventivas no siempre correctas que generalmente causaron temor, el caso más típico fue el de las mascarillas o tapabocas. Nos falta, a mi entender, una disciplina social de respeto y acatamiento a las informaciones y medidas oficiales.
Pero el tiempo pasa y la vida debe continuar. Debemos tratar de retornar a la normalidad (¿a la nueva normalidad?). Poco a poco se van reiniciando actividades, flexibilizando restricciones, se escuchan pedidos, influencias y reclamos corporativos, gremiales, económicos, etc. que influyen en las decisiones políticas y técnicas referidas a la salud pública. Así observamos un sin número de reclamos para flexibilizar restricciones, para retornar a la actividad de distintos sectores donde parecen mezclarse las prioridades sanitarias, económicas, sociales, particulares, etc. de rubros considerados esenciales con otros que no parecen serlo así observamos reclamos de servicios públicos, industriales, construcción, otros servicios, turísticos, gastronómicos, hoteles alojamientos, etc.. En esta etapa las consideraciones técnicas de los especialistas y los axiomas citados al comienzo de prevención y trabajo en conjunto ya no parecen aplicarse con el mismo rigor que al inicio de la pandemia.
Por lo expuesto anteriormente, propongo que reflexionemos al respecto e invitarlos a que como sociedad tomemos las siguientes acciones:
-Consideremos y acatemos las indicaciones de las autoridades oficiales, tratando de evitar intoxicación informativa que puede conducirnos a errores y temores infundados.
-Las soluciones a los problemas requiere acciones técnicas específicas y adecuadas por lo tanto es muy importante escuchar y acatar las recomendaciones de quienes estudiaron y entrenaron, por ejemplo.
< Si estamos ante una emergencia sanitaria es primordial la opinión de médicos sanitaristas, infectólogos, etc. y autoridades sanitarias. No debe confundirse las citadas opiniones con las consideraciones mediáticas, sectoriales, lobbies empresariales, lobbies sindicales, etc.
<Para restablecer la actividad económica es necesario y conveniente la opinión de economistas, preventores de riesgo y médicos sanitarios de forma que se priorice a aquellas actividades que generan la mayor actividad económica con el menor riesgo sanitario.
<Para establecer protocolos por actividad y metodologías preventivas de trabajo es necesaria la opinión de los preventores de riesgos laborales, en particular los especialistas en Higiene y Seguridad Laboral, prácticamente no considerada hasta el presente en particular en organismos oficiales municipales, provinciales y nacionales, entidades bancarias, educativas, etc. todos con alta presencia de personas y por ende elevado riesgo sanitario.
-Por último siempre tener presente que estamos en emergencia sanitaria, que “trabajando juntos se logran milagros” y que “prevenir es mejor que curar”
Muchas gracias
Ing. José Luis Segura
Matricula CIPBA 35473
