Sistemas lidera las preferencias en la Unicen pero las carreras tradicionales mantienen sus inscripciones

A lo largo del tiempo, la elección de carreras universitarias ha ido mutando acorde a los contextos sociales y a la aparición de nuevas áreas de especialización. No obstante esto, siempre hubo carreras llamadas “tradicionales” que logran captar el interés del público masivo y que nunca pierden vigencia: derecho, medicina, veterinaria y ciencias económicas suelen ser las más convocantes.

Pero tímidamente se cuelan otros perfiles que dan respuesta a nuevas necesidades y demandas del mercado laboral. Ante la consulta de El Eco de Tandil, la Secretaría Académica de la Universidad Nacional del Centro informó cuáles son las quince carreras más elegidas por los estudiantes este año, hasta el 9 de junio inclusive. En total, 5035 estudiantes se inscribieron este 2023 para ser parte de la Unicen y vale destacar que la matrícula ha crecido un 8 por ciento en los últimos 5 años, un fenómeno que puede explicarse gracias al trabajo sostenido de la institución y su cada vez más profunda penetración en la sociedad. 

De este modo, vale reseñar que la reconocida casa de estudios superiores tiene tres sedes regionales: Sede Central -con asiento del Rectorado- en Tandil y las sedes de Azul y Olavarría, así como una subsede en Quequén. Asimismo, posee 10 facultades y la Unidad de Enseñanza Universitaria de Quequén. En las unidades académicas se distribuyen alrededor de 19 mil alumnos que cursan algunas de las carreras cortas, carreras de grado, carreras de articulación de posgrado y las diplomaturas que ofrece la institución, que en 2024 cumplirá medio siglo de vida. 

La gente del futuro 

Al igual que el año pasado, la lista está encabezada por la Tecnicatura Universitaria en Desarrollo de Aplicaciones Informáticas (Tudai) que dicta la Facultad de Ciencias Exactas y que este cuatrimestre contó con 880 ingresantes. La carrera de pregrado tiene una duración de 5 cuatrimestres para Tandil y de tres años para el resto de las extensiones áulicas, y en poco tiempo picó en punta a la hora de las preferencias. 

A tono con el devenir del escenario actual, esta  formación universitaria le permite al graduado adquirir habilidades para desarrollar de forma independiente aplicaciones personales o servicios particulares en la web, así como participar como miembro en proyectos de mayor complejidad, capacidades altamente valoradas en el ámbito laboral. 

La segunda opción es Ingeniería de Sistemas, de la misma unidad académica, con 515 ingresantes. Dicha carrera de grado lleva varios años de consolidación y se convirtió en un faro en la región. Además, el sueño del “Silicon Valley” tandilense traccionó una gran cantidad de recursos al sector del software, a partir del dictado de esta carrera y de la posterior radicación de empresas del rubro. La alta demanda que el perfil informático tiene en el mercado del trabajo y los elevados salarios que promete el sector, redundan en un crecimiento cada vez mayor de esta ingeniería. 

El podio se completa con la tradicional Medicina Veterinaria, que este cuatrimestre tuvo 373 ingresantes, una carrera que es un puntal de la universidad por su prestigio y trayectoria.

Las tradicionales, siempre al frente 

A las previamente mencionadas, la siguen Medicina, que se dicta en la Facultad de Ciencias de la Salud en Olavarría, con 338 inscriptos, y después se registra una caída abrupta en el número. El quinto puesto se lo llevan dos carreras: la Licenciatura en Administración, un clásico de la Facultad de Ciencias Económicas tandilense y Abogacía, en Azul, cada una con 183 estudiantes anotados. 

Contador Público reportó 153 ingresantes, seguida por la Licenciatura en Educación que ofrece la Facultad de Ciencias Humanas, con 142 alumnos nuevos en 2023.  Se trata de un ciclo de licenciatura virtual destinado a graduados, sobre todo de profesorados, y es una de las ofertas académicas que se dicta bajo requisitos especiales de admisión. 

Completan la nómina de las 15 más elegidas Gestión Tecnológica, Enfermería, Ingeniería Agronómica, ciclo de licenciatura en Gestión Ambiental, Relaciones Internacionales, Administración Agraria y Teatro. 

De esta manera, las carreras que conforman la mencionada lista presentan perfiles diversos. Si bien el área de Informática capta más estudiantes en esta región a diferencia de lo que sucede en otras universidades, pero el interés por este nicho es cada vez más mayor y responde a la salid laboral y las demandas del mercado. Este conjunto de carreras se alinea más al perfil de profesionales que el país requiere, de cara a un mercado globalizado atravesado por la lógica de una nueva revolución industrial. 

Por otra parte, las carreras consideradas tradicionales continúan en los primeros puestos pero se afianzan nuevos intereses; los futuros profesionales se proyectan más versátiles y en sintonía con los cambios constantes de la coyuntura actual. 

Una universidad en movimiento 

El Eco de Tandil dialogó con la secretaria académica de la Unicen, Natalia Giamberardino, quien junto a Gabriel Montaruli, responsable del área de Estadística, analizaron el tema.

En esta línea, Giamberardino expuso que “se ve desde hace años, pero después de la pandemia se profundizó más, el auge de las carreras tecnológicas, con la informática como base, pero también se ve que las tradicionales siguen siendo una opción para los estudiantes: Veterinaria, Medicina Abogacía, Administración, con números de inscriptos que se mantienen año a año”.

Asimismo, refirió que en agosto la matrícula va a variar porque hay unidades académicas que abren inscripciones a mitad de año, y enfatizó en el positivo crecimiento de la plantilla de estudiantes en toda la universidad.

En tanto, explicó que “la Tudai es muy demandada, tiene extensiones áulicas utilizando la mediación tecnológica hasta el 49,9 por ciento, que es lo que permite la reglamentación, las ingenierías más clásicas se siguen eligiendo y las humanidades también. La Facultad de Humanas tiene muchos ciclos de complementación con requisitos especiales, muchas capacitaciones para docentes y graduados de terciarios con un sistema institucional de educación a distancia que regula la oferta académica, mediado por tecnología o modalidad hibrida y con condiciones especiales”.

Si bien la presencialidad marca el rumbo en todas las carreras, algunos trayectos admiten la modalidad híbrida y es también un desafío a futuro diseñar una oferta académica a distancia que se adapte a las demandas del contexto. 

Al respecto, la titular de la Secretaría Académica detalló: “La universidad tiene que responder a lo que se está requiriendo por parte de los estudiantes, de lo laboral y de lo que el país necesita. Tenemos que seguir aggiornándonos, es un desafío pensar en carreras nuevas. Por ejemplo,  Logística es de las más nuevas y se dicta en la subsede Quequén, es demandada laboralmente pero todavía no está muy instalada la posibilidad de estudiarla. A veces van más a lo seguro y la verdad que la logística es un expertise que se requiere en todas las empresas. Vamos repensando la oferta siempre, hay facultades que mantienen el número o crecen y mantienen sus carreras, sus graduados y la inserción laboral”. 

Inclusive, hay carreras como Sistemas y Enfermería, en las que el mercado capta a los estudiantes en el segundo años ante la demanda de mano de obra especializada.

Desafíos y fortalezas

Con base en los desafíos de la gestión Giamberardino, que proviene del área de Ciencias de la Educación,  apuntó que hay que actualizarse siempre y seguir trabajando en los planes de estudio, sobre todo en su revisión.

“Hay que evaluar las duraciones de las carreras, las reales y no las teóricas, e incorporar las horas estudiante en nuestros planes de estudio. Son las horas que le lleva al alumno en estudio, no sólo enfocarse en las horas de cursada si no revisar las formaciones y la duración de las carreras. Hay también algunos  trayectos formativos de diplomaturas con título secundario y otras superiores, que son muy interesantes porque son cortas. El desafío es poder pensar en ofertas más cortas y títulos intermedios, que muchas carreras ya los tienen”, sintetizó.

Por último, valoró los equipos de trabajo de la dependencia a su cargo y de toda la universidad para llevar adelante las gestiones que la sostienen y sostuvo que “hay muchas cuestiones a atender en un año complejo, con opciones que den respuestas a lo que la sociedad requiere en cuanto a la formación, y también el país y la formación profesional en sí misma”.