Ricardo Gil Lavedra presentó su libro en Tandil

Ayer, el reconocido jurista Ricardo Gil Lavedra llegó a Tandil para presentar su libro La Hermandad de los Astronautas en un encuentro que se celebró en el Comité de la Unión Cívica Radical y que contó con la presencia del intendente Miguel Lunghi, de su par de General La Madrid, Martín Randazzo, funcionarios del Gabinete y vecinos.

La presentación estuvo a cargo de Ligia Laplace, primera presidenta mujer de la sede radical, que expresó que es “un honor y un privilegio” contar con la presencia del jurista, para luego repasar algunos detalles del Juicio a las Juntas, el contexto y el reconocimiento a quienes formaron parte.

La hermandad de los Astronautas ofrece un repaso de los entretelones del Juicio a las Juntas Militares que gobernaron el país durante la última dictadura. Gil Lavedra, que integró el tribunal que las juzgó, brinda una visión única y valiosa sobre este crucial momento de la Justicia argentina.

Un episodio clave en la historia  

Al abrir su presentación, Gil Lavedra confesó que le resulta “muy grato” estar presente en Tandil, una ciudad “tan hermosa y hospitalaria”, y enseguida se enfocó en los detalles de la publicación, en la que trató de establecer la manera en la que se organizó el Juicio a las Juntas, un proceso judicial de “características inéditas”.

Desde la tarima y frente al público tandilense, el abogado definió que fue un hecho “bisagra en la transición democrática argentina”, que no conoce precedente. 

En esa primera parte, el exdiputado nacional se enfocó en el contexto y en las condiciones que permitieron el desarrollo del juicio “porque se pierden de vista los alcances de la decisión de Raúl Alfonsín”. 

Así, resaltó que el proceso ordenado por el expresidente debe ser analizado a la luz de aquel momento. En efecto, señaló que “no había precedentes en el mundo” en llevar adelante este tipo de actos, en uno de los primeros países de la región que recuperar la democracia.

“Los militares no querían juicio, los empresarios y la iglesia tampoco. El discurso común era que no había que mirar para atrás y ni buscar cosas que dividan a los argentinos”, reseñó. 

Por eso, valoró la “intuición y audacia” del exmandatario, que tomó una decisión “contra lo normal”, pero que se convirtió en “el origen de todo”.

“Sin Alfonsín no hay nada”, enfatizó Gil Lavedra, que avanzó con una presentación que capturó la atención del público con detalles de un momento clave en la historia del país. 

El proceso

En comunicación telefónica con el ciclo radial La Mañana de El Eco (104.1 Tandil FM, EcoTV y El Eco Streaming) Ricardo Gil Lavedra adelantó detalles del encuentro que encabezó en la ciudad sobre un libro que se presenta como una suerte de memoria de un episodio histórico que “quedó incrustado en la transición democrática argentina”.

En la previa a su llegada a Tandil, contó el modo en que se gestó su obra al señalar que entre 2017 y 2018 una editorial le solicitó que escribiera sobre el Juicio. “Era un proyecto que iba postergando”, dijo y durante la pandemia, con más tiempo libre, comenzó a escribir.

Unos años después, incluso en medio del éxito que tuvo la película Argentina, 1985, la redacción tomó un nuevo impulso “porque era el momento para dejar un testimonio. Finalmente lo terminé”.

La Hermandad de los Astronautas, el título elegido, hace referencia a una metáfora que le pertenece a uno de sus colegas. Durante aquellos años, “repetía que era como si los seis jueces estuviéramos en una nave espacial en la cual afuera pasaban meteoritos, estruendos, y nosotros estábamos encerrados”.

“Nuestra misión no era alunizar sino dictar sentencia. Como los astronautas, dependíamos uno del otro, era una tarea colectiva en la cual el aporte de cada uno era vital para la misión”, describió.

De allí mencionó que “surgió la relación especial, esa confianza mutua que uno tiene que dispensarse”, creando una “especie de hermandad, una unión muy fuerte”.

Por eso, cuando tuvo que elegir un título para su libro, que habla de una obra colectiva, “me pareció adecuado poner la metáfora”.

“Cuando uno enfrenta circunstancias extraordinarias, como fueron esas, va forjando un vínculo muy especial, de confianza recíproca muy fuerte”, por eso consideró que el concepto “hermandad” está bien utilizado para reflejar el vínculo.

El Juicio a las Juntas Militares

“Me parece que fue un hecho muy importante, fundante en la transición democrática argentina, porque permitió que la democracia comenzara a edificarse sobre la base del imperio de la ley, del Estado de derecho, del principio de la impunidad”, definió Gil Lavedra.

Entonces, expresó: “Hay una regla básica de cualquier democracia que es que todos somos iguales ante la ley y los más poderosos tienen que responder sobre sus crímenes frente a la ley”.

En definitiva, manifestó que “fue una sucesión de acontecimientos afortunados que salieron bien, pudiendo salir mal. Sobre la base de una decisión audaz, con una enorme intuición, como la que tuvo Alfonsín de iniciar el enjuiciamiento”.

Para finalizar, reivindicó la importancia del sistema democrático, que “también tiene un principio básico que es el pluralismo, que es respetar las ideas del otro”.

Ricardo Gil Lavedra, además de su destacada trayectoria como jurista, es una figura fundamental en la lucha por los derechos humanos y la justicia en el país. Su participación en el Juicio a las Juntas Militares no sólo marcó un hito en su carrera, sino que también significó un avance importante en el proceso de memoria, verdad y justicia.