Preocupación en el CPA por la falta de designación de un nuevo director a cargo de la dependencia
La situación de acefalía se mantiene desde principio de mes. El equipo que integra el espacio que funciona en Pellegrini al 800 dijo desconocer las razones por las cuales no se renovó el contrato al pastor José García ni se designó a otro profesional. “Es inentendible”, dijo Ángel Orbea a este Diario.
El Centro Provincial de Atención de las Adicciones, que desde hace cuatro años funciona en el Centro de Día “Tita Brivio”, Pellegrini 886, como resultado del proceso de inclusión en dependencias de Salud Mental del Municipio, se encuentra sin director a cargo desde el 1 de septiembre.
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Al frente del espacio dependiente del Ministerio de Salud de la Provincia se encontraba el pastor José García, quien el último día hábil de agosto se retiró de la función al cumplir con su contrato. Desde entonces, no hay novedades sobre su reemplazante.
Ante la demora en la designación del nuevo director, el equipo del CPA se puso en alerta por la situación actual en medio de un contexto de pandemia que modificó el trabajo y el esquema de atención de los pacientes.
Consultado por El Eco de Tandil, el psicólogo Ángel Orbea, que coordina las funciones de la dependencia, dijo que “llevamos un mes y todavía no se hizo el nombramiento”, y expresó su desconocimiento. “Estamos preocupados en el equipo por esta acefalía”, enfatizó.
La pandemia
La pandemia “nos cambió completamente” el funcionamiento del área y la situación se profundiza ante la falta de un funcionario a cargo. “El CPA es un espacio que interactúa y coordina con distintos sectores de la población”, dijo y agregó que tiene que estar inserto en la ciudad, en especial en los territorios con espacios e instituciones vinculadas a la educación, Atención Primaria de la Salud. “Y esa tarea la debe coordinar un director”, señaló.
“Llevamos casi un mes y todavía no se hizo el nombramiento; no entendemos por qué”, señaló a este Diario el profesional, que indicó que el equipo del CPA “hace muchos años que funciona y tenemos una experiencia como para compartirla con las autoridades de la Subsecretaría de Salud Mental y Consumos Problemáticos. Y no entendemos por qué no se ha nombrado a un director todavía”.
Pese a esta circunstancia, Orbea sostuvo que “seguimos trabajando”, pero insistió en la necesidad de asignar a un profesional con el perfil adecuado en el cargo. “Más en este momento, donde la pandemia generó un redimensionamiento institucional en todos los planos del Sistema de Salud”, alertó y dijo que, con el personal reducido, la tarea recae en los que continúan bajo un esquema de funcionamiento que se ajusta a los parámetros que impone la pandemia.
La tarea en el CPA
Por otro lado, Orbea sostuvo que desde marzo continúan con un abordaje de manera remota, con entrevistas para atender las urgencias e internaciones. “Estamos con un trabajo diario de 8 a 14, en muchos casos con consultas nuevas”, dijo y explicó que “nunca en una consulta se puede diagnosticar y determinar cuál es la cuestión. Siempre hay que dar otra para, a partir de allí, evaluar las posibilidades”.
“La pandemia transformó totalmente el trabajo en el CPA y en el sector de Salud Mental y de todo el sistema sanitario. Este año hemos tenido más de 300 consultas nuevas, más los que están en tratamiento”, concluyó.
Actualmente, el Centro Provincial de las Adicciones funciona en Pellegrini al 800, donde se encuentra la Dirección de Salud Mental.
“Desde el Foro de Salud Mental vimos la posibilidad de integración de recursos cuando no había un Sistema de Salud como el actual”, recordó Orbea sobre un proceso que se demoró y que finalmente se concretó un tiempo después. “Se avanzó en un trabajo integrado y sumó el soporte técnico y edilicio del Sistema Integrado de Salud Pública. Eso se consolidó con los años ya que, en términos administrativos, la estructura depende del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires”, cerró.
