Problemas con el gas
Por una fuga de gas afuera del establecimiento, continúan suspendidas las clases en la Escuela 53
Desde el Consejo Escolar aseguraron que “la pérdida estaba afuera de la escuela”. También señalaron que el malestar físico referido por alumnos y docentes días atrás estaba vinculado a la presencia de monóxido de carbono en una de las aulas. Camuzzi retiró el medidor hasta tanto se solucionen los problemas y hoy tampoco habrá clases.
Por una fuga de gas detectada en el exterior de la institución, la Escuela Primaria N° 53 “Eduardo Olivero” mantiene suspendidas las clases, en ambos turnos, desde el viernes pasado y los directivos esperan volver “pronto” a la presencialidad.
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La vuelta a clases “es inminente”, confiaron ayer desde el Consejo Escolar de Tandil y señalaron que “se está trabajando para cumplir con el pedido de la empresa proveedora y lograr la habilitación del servicio en la mayor parte del edificio, lo que permitiría retomar las clases durante esta semana”.
Ayer, la presidenta de ese Cuerpo, Carmen Núñez, trató de llevar tranquilidad a la comunidad educativa integrada por docentes y familiares de los alumnos. “Dentro de la escuela no hay ninguna fuga de gas”, aclaró.
En diálogo con “La Mañana de El Eco”, por ECO TV y la 104.1 FM, la titular del Consejo de Tandil contó que, el jueves pasado, inspectores de la empresa Camuzzi retiraron el medidor del colegio debido a que “no daba la hermeticidad”.
“No hay pérdida de gas dentro de la escuela y recién el jueves tardecito encontraron una pérdida de gas afuera de la escuela en la cañería externa”, explicó Núñez y agregó que “frente a la escuela hay una T que va hacia adentro; ahí es donde encuentran una pequeña fuga de gas”.
“Ya se trabajó con eso, con las indicaciones que dio el inspector de Camuzzi”, reiteró la funcionaria.
Y comentó que “mañana (por hoy) los alumnos también (permanecerán) sin clases. La idea es poder trabajar tranquilos, sin los chicos dentro de la escuela”.
La semana pasada, una supuesta fuga de gas en el establecimiento alertó al personal directivo de la institución ubicada en calle Ana Twesdale 1220, en el Barrio Falucho.
El domingo, la directora de la entidad educativa, Candelaria Rivas, envió una nota a las familias en la que expresó que “el día 28/5 recibimos un llamado telefónico de un personal de la empresa Camuzzi informando que se encontraba en el exterior del edificio escolar, ante el llamado de una familia de la escuela, comentando que en el mismo había olor a gas” y que, por ende, se procedió al retiro del medidor.
En el texto, Rivas dijo asimismo que desde el Consejo Escolar “enviaron personal matriculado para evaluar y proceder en relación a nuestra solicitud, no encontrando fuga de gas en cañerías ni en los artefactos”.
También comentó que se comunicó con ella Carmen Núñez, quien le informó que el día miércoles 29 se harían presentes los gasistas matriculados para revisar los artefactos y toda la instalación.
“Desde ese día, han estado y siguen trabajando para poder dejar en condiciones dichas instalaciones, a la espera de una nueva revisión desde Camuzzi y la restitución del medidor en el edificio escolar”, aseguró Rivas.
Y sostuvo que esos profesionales “han realizado diversas pruebas de hermeticidad, observando una fuga y tratando de encontrar el lugar específico para dar solución a dicho problema”.
“Esperamos que pronto podamos retomar la presencialidad en la escuela, brindando y garantizando las condiciones óptimas para todos y todas”, concluyó la directora de la institución.
Problema de hermeticidad
Por su parte, en diálogo con El Eco Multimedios, Núñez precisó ayer que “hace 15 días que estamos trabajando desde el Consejo Escolar en el tema de gas en la Escuela 53”.
En principio –relató-, como algunos alumnos y docentes refirieron malestares físicos, como dolor de cabeza o irritación ocular, dos gasistas matriculados se acercaron en distintos momentos al establecimiento para revisar las instalaciones y ninguno halló una fuga de gas.
Pero el miércoles por la noche –continuó Núñez- se comunicaron desde la empresa Camuzzi para informarle del retiro del medidor “porque no les daba la hermeticidad”, relató.
“Eso significa que Camuzzi se lleva el medidor pero nos da un tiempo para poner en funcionamiento, en norma, lo que tiene que ver con la hermeticidad”, dijo la titular del Consejo y agregó: “como la hermeticidad siguió dando mal, se trabajó todo adentro en la escuela y recién el jueves, tardecito, encontraron una pérdida de gas afuera de la escuela en la cañería externa”.
Ocurre –según la consejera del bloque Juntos- que “frente a la escuela hay una T que va hacia adentro; ahí es donde encuentran una pequeña fuga de gas”.
“Ya se trabajó con eso, con las indicaciones que dio el inspector de Camuzzi”, remarcó.
Monóxido de carbono
Sobre los malestares descriptos previamente por estudiantes y docentes, Núñez aseguró que se revisaron todas las estufas y se detectó la presencia de monóxido de carbono en el ambiente.
“Cuando se desarmaron los calefactores, (los profesionales) se dieron cuenta de que el tiraje está podrido, así que picaron toda la pared. En este momento se están cambiando los tirajes porque ese monóxido de carbono estaba entrando a las aulas”, detalló.
Y añadió que “la gasista matriculada ya estuvo en Camuzzi, está haciendo los planos de la escuela porque no estaban en la empresa, más allá de que la fuga se terminó y se está trabajando dentro de los dos salones con las salidas de los calefactores”.
Además, estimó que se trata de un problema reciente, ya que no fue detectado en la prueba del funcionamiento de los calefactores realizada al comienzo del ciclo lectivo.
“Cuando se hizo el encendido de calefactores, el proveedor no encontró ese problema”, señaló Núñez, y atribuyó la podredumbre del tiraje a “el paso del tiempo”.
“Estos calefactores llevan años puestos ahí, están metidos dentro de la pared, así que hubo que picar la pared para poder sacarlos. Ya la zinguería está en marcha”, aseguró.
Mientras tanto -se indicó desde el Consejo- se continuará trabajando en la readecuación de la parte de la instalación que quedaría temporalmente inhabilitada, y que se encuentra en la zona de la cocina, biblioteca y otras dependencias que no incluyen aulas.