Reunión clave el lunes
Por la sequía y las heladas, productores locales esperan que declaren la Emergencia Agropecuaria
La escasez hídrica de los suelos, las bajas precipitaciones y las heladas, afectan a la cosecha fina y los productores necesitan prórrogas impositivas. También bregaron por medidas adicionales de acompañamiento para aliviar al sector frente a las pérdidas.
Ante las adversidades climáticas que complicaron el escenario del campo, desde Tandil esperan que haya un visto bueno para que se declare el estado de Emergencia Agropecuaria en el Partido.
Recibí las noticias en tu email
Los productores estiman que habrá, en principio, mermas del orden 30 por ciento en las cosechas. Además, puntualizaron que las heladas perjudicaron severamente los cultivos, incluso más que la sequía; en Tandil hay sembradas 112.575 hectáreas de trigo, cebada y alpiste que corren riesgo. En las últimas semanas, tanto la Sociedad Rural como la Federación Agraria reclamaron medidas urgentes para contener el panorama.
Nélida Sereno, concejal del Frente de Todos e integrante de la Federación Agraria filial Tandil, en contacto con este Diario detalló que el 21 de octubre se reunió en la sede del INTA la Mesa de Emergencia local, que agrupa a representantes del Municipio, entidades agropecuarias, cooperativas, Banco Nación, Banco Provincia y Ministerio de Desarrollo Agrario para abordar el tema.
En el encuentro, el organismo nacional presentó un informe técnico que exhibía la “preocupante” situación en cuanto a la escasez hídrica de los suelos y las esporádicas lluvias en la zona, en un contexto agravado por las temperaturas bajo cero que, aún en noviembre, siguen aquejando a Tandil.
Al respecto, señaló que “después de esa reunión se resolvió solicitar la incorporación del expediente a la Comisión Provincial de Emergencia y Desastre Agropecuario (Cedaba) para que avale el pedido y se pueda declarar la Emergencia”.
Evaluación del pedido
Hubo una reunión en La Plata el 31 de octubre, presidida por el ministro de Desarrollo Agrario bonaerense, Javier Rodríguez, en la que se analizaron los informes técnicos y las correlativas solicitudes de distintos municipios para obtener las prórrogas impositivas que extiende la medida, pero no alcanzaron a tratar la problemática local.
“Entró también el pedido de Tandil, Carlos Tejedor, Luján y General Paz, pero como no hubo tiempo de hacer la evaluación correspondiente, serán abordados en la siguiente reunión, el 14 de noviembre”, expuso Sereno, quien se mostró confiada en que Tandil se incluya bajo este paraguas y pueda acceder a determinados beneficios, que sirvan para atenuar el impacto del clima en los rindes económicos.
“El Ministerio y la comisión provincial no dudan en recomendar que se declare la Emergencia. Contempla a los productores con afectación mayor al 50 por ciento y si las pérdidas superan el 80 por ciento, se declara el desastre agropecuario”, precisó.
La normativa de Emergencia Agropecuaria expresa que uno de los principales beneficios de la emisión del certificado es que les otorga a los productores prórrogas para el pago de deudas impositivas provinciales por 180 días, mientras que el certificado de Desastre Agropecuario otorga la condonación del impuesto inmobiliario rural por el mismo lapso. En sintonía, se habilitarían prórrogas en los vencimientos de los créditos bancarios para no incurrir en moras.
A grandes rasgos, Sereno subrayó que también se necesitarán medidas adicionales para paliar los embates de la problemática climática, a través de créditos. “Necesitamos financiamiento para los productores, acorde a sus ciclos productivos y con tasas de interés que pueda pagar”, consideró.
Siembra y ganadería
En tanto, en referencia a las precipitaciones que tuvieron lugar hace 15 días, la también productora consignó que “la lluvia vino muy bien y es una ayuda, porque favoreció para largar la siembra de maíz que estaba atrasada".
En contrapartida, agregó que “siempre" en noviembre se esperan heladas y se estiran los ciclos de siembra, pero no sopesaron la magnitud del evento climático, que complejizó el cuadro por encima de lo previsto.
Por otro lado, remarcó que el sector ganadero tampoco atraviesa un buen momento por el impacto directo de la sequía y las heladas tardías en las pasturas y la forrajería. Es decir, los productores no tienen recursos para alimentar a los animales y muchos optaron por liquidar la hacienda antes de lo previsto. En tal sentido, explicó que la falta de alimento repercute además en los índices de preñez, porque los vientres no están bien nutridos. En consecuencia, como se ya se ha mencionado, habrá menos terneros en la próxima campaña.