Persiste el conflicto de los médicos con IOMA y algunos especialistas ya se bajaron del convenio
Traumatólogos y obstetras locales decidieron no atender más a través de la obra social y podrían agregarse otros profesionales. Reclaman actualización de honorarios, pago de deudas y una reestructuración del nomenclador de prácticas. Diego Macagno, presidente del Círculo Médico local, aseguró que es la única prestadora que presenta siempre problemas y que los ofrecimientos "no alcanzan a la más baja de las prestaciones del resto de las obras sindicales del país".
El problema de larga data entre IOMA y los profesionales médicos parece no poder arribar a un punto de consenso. En las últimas horas, a nivel central, la Agremiación Médica Platense rechazó la intimación del Defensor del pueblo, Guido Lorenzino, que los instaba a volver a atender a los afiliados de la obra social, porque se venció el plazo de 60 días para negociar un nuevo convenio, mientras que el mediador sostenía que el cuerdo continuaba vigente.
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En la localidad la situación también es álgida y, si bien algunos galenos siguen trabajando con la prestadora, los traumatólogos y la mayoría de los obstetras decidieron de manera particular “bajarse” del convenio, ante los reiterados inconvenientes que presenta la entidad estatal a la hora de cumplir con sus obligaciones, y próximamente podrían sumarse otras especialidades.
El titular del Círculo Médico de Tandil, el cirujano Diego Macagno, conversó vía telefónica con el programa de radio “Cosas que pasan” (104.1. Tandil FM) y trazó nuevamente un panorama yermo en torno al diálogo con las autoridades de IOMA y los avances en la regulación de los acuerdos entre las partes.
“Está todo mal, no se resolvió nada en estos dos meses y las propuestas siguen siendo insuficientes. Es un problema que arrastran desde hace años, no hay obra social sindical de mayor o menor cuantía que tenga estos problemas, los médicos están cansados”, expresó. Vale reseñar que la cartera de servicios de salud posee una plantilla de 25 mil afiliados en la ciudad y, junto a PAMI, son las obras sociales que más cantidad de usuarios concentran.
En tanto, aclaró que la decisión de diversos especialistas de cortar la atención no responde a una determinación de la gremial médica, sino a la voluntad personal de “no malgastar su tiempo y conocimiento en algo que no es reconocido”.
Los problemas de siempre
Por el momento, no existe una instancia real de negociación que permita consensuar aumentos de honorarios. Desde la institución plantean duplicar este valor, pero según los profesionales “no alcanza a la más baja de las prestaciones del resto de las obras sindicales del país”.
Asimismo, otro de los frentes de conflicto es el nomenclador de prestaciones, cuya reestructuración es urgente porque hay numerosas prácticas que no están contenidas allí y que la entidad no permite facturar.
“Es simplemente ponerles un código para que el médico, cuando las ejerza, las pueda facturar. Ahora, si se la cobra al paciente lo acusan de cobro indebido. No permiten facturarlas pero hay que seguir haciéndolas, estamos cansados de decirlo”, graficó Macagno.
Además, en el marco de las desavenencias actuales, sigue latente el temor de los médicos frente a una eventual modificación del esquema de atención, a la que en su momento definieron como un intento de “pamizar” el sistema. Al respecto, el referente del Círculo puntualizó que se pretende asignar cápitas de prestaciones en las cuales el afiliado quedará cautivo de un profesional o establecimiento. Es decir, va a perder la libertad de poder elegir con quién quiera atenderse y dónde internarse.
“Ponemos el hombro para mantener esta relación y se cansaron las bases más que las instituciones. No sé cómo sigue, nos tendrán que llamar, pero no hay credibilidad con quienes gestionan la obra social. Hay que sentarse sin prejuzgar y analizar seriamente lo que se plantea; analizar las actuaciones, los honorarios, los nomencladores, las prestaciones. Así se darían cuenta de la situación y podrían hacer algo para solucionarla”, expuso.
Una relación poco fluida
En julio último, los profesionales le reclamaron al Instituto de Obra Médico Asistencial una parte de la facturación total que corresponde en términos de honorarios por diversas prácticas y prestaciones.
En este sentido, recordó que luego de una serie de desencuentros, se celebró el 21 de julio una reunión con el presidente de IOMA, Homero Giles, que resultó infructuosa. “No pudimos volver a tener contacto y no resolvieron nada. En el encuentro adujeron problemas de internet, el presidente ni estuvo, saludó y se fue, no logramos nada”, añadió.
Así, ante la persistencia de los problemas y la sensación de deambular por un sendero sin salida en el que las problemáticas se producen a repetición y la burocracia lesiona todos los intentos por mantener las prestaciones, Macagno aseveró que los médicos locales están enojados por los reiterados destratos y contemplan la factibilidad de rescindir todo tipo de acuerdo con la mutual. En esta especie de contienda, advirtió que los únicos perjudicados son los galenos y los afiliados.
“Los sindicatos docentes y municipales deberían salir a reclamar, porque están directamente afectados. Si están alineados políticamente con el Gobierno provincial, que se banquen la pelusa”, concluyó.