Tandil
Otra estrella amarilla recuerda a una víctima fatal y reedita el reclamo sobre la 226
Estrellas Amarillas acompañó a la familia del hombre atropellado por un auto en cercanías de la rotonda de Falucho.
Desde ayer, una estrella amarilla pintada sobre la Ruta Nacional 226, en inmediaciones de la rotonda con Falucho recuerda a una víctima fatal y busca concientizar a los automovilistas con miras a reducir la siniestralidad vial. La acción fue impulsada por la ONG, que acompañó a la familia de Luis María Marconi, el hombre de 90 años embestido por un auto cuando intentaba cruzar la traza nacional en abril pasado.
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El recordatorio que quedó sobre la cinta asfáltica también puso de relieve la discusión en torno a la problemática de la 226 en el tramo urbano, que sigue sin resolverse a pesar de las alternativas en estudio.
La familia pintó la señal sobre la cinta asfáltica, mientras que la colocación del cartel que indica que allí perdió la vida una persona deberá esperar ya que requiere otro trámite de autorización. Además de la familia, vecinos e integrantes de Estrellas Amarillas, estuvo presente personal de Corredores Viales, de Vialidad y de Seguridad Vial nacional, que colocó balizas y ordenó el tránsito para evitar mayores complicaciones.
“Por mi papá”
El dolor por la pérdida llevó a la familia a indagar sobre las acciones que impulsa la ONG que busca generar conciencia sobre la problemática vial. Así, a través de las redes sociales, una de las hijas de la víctima se puso en contacto Hernán Mansilla para conocer el trabajo que realiza junto a un grupo de personas.
A casi cuatro meses del hecho, cumplió con los trámites correspondientes para llevar a cabo la acción y dio el primer paso para involucrarse en una problemática que requiere un abordaje urgente.
“Es hacerlo por mi papá”, confesó entre lágrimas, Liliana Marconi. En diálogo con El Eco Multimedios explicó que una de las razones por las cuales decidió junto a su familia tomar una postura activa a partir del trágico hecho es para que los vecinos “tomen conciencia”.
“Mi papá tenía 90 años, pero era una persona totalmente sana y con muchas ganas de vivir”, contó y dijo que un mes antes del accidente “festejamos su cumpleaños y decía que iba por los 100 años”.
Su “único hobby” era “hacer los mandados”, por lo que era habitual que cruzara la ruta, incluso, más de una vez por día. “Desde hace más de cuarenta años que vive en el barrio, siempre cruzó”, sostuvo.
“Que hagan algo, por favor”
Al enfocarse en la problemática vial, la hija de Luis María Marconi demandó al Municipio, y en espacial al concejal de Juntos Mario Civalleri, que “rechaza toda propuesta de Estrellas Amarillas”, que “haga algo en esta Ruta porque mucha gente ha perdido la vida”.
En esa línea, graficó que los vecinos cruzan a pie y en bicicleta en forma constante con el riesgo que eso implica en un sector donde el tránsito vehicular es alto. Por eso, pidió que “tomen conciencia”, y que “se pongan en lugar de las familias y hagan algo, por favor”.
Luego, planteó que “vemos que en otras ciudades” abordaron las problemáticas de las rutas que se convierten en barreras urbanas ante el crecimiento poblacional. “En las rutas que cruzan otras ciudades hay semáforos, sendas peatonales y otras medidas”, observó y lamentó que en Tandil no se encuentren soluciones. “Muy bonitas las plazas y los paseos, pero estamos perdiendo muchas vidas”, por lo que imploró que “por favor” las autoridades tomen medidas para que “no se pierdan más vidas en esta ruta”.
Sobre el caso, contó que uno de sus hermanos tuvo oportunidad de ver el material captado por las cámaras de seguridad que registraron el trágico hecho. En ese sentido, detalló que “se ve cuando mi papá mira para cruzar y una camioneta sube desde Falucho a la rotonda, a una velocidad normal”. Es decir que “terminó de pasar la camioneta y el auto que venía por la ruta apareció de la nada”.
“Suponemos que, al ver que la camioneta circulaba despacio, se largó a cruzar, pero termina de pasar y aparece el auto, a una velocidad que no era la que indica los carteles porque si no mi papá estaría vivo”, lamentó Marconi.
“¿Cuántas estrellas amarillas más vamos a pintar?”
En marzo del año pasado, a raíz de un siniestro vial en el que perdió la vida un hombre mientras circulaba en bicicleta por la rotonda de la 226 y Actis llevó a un grupo de frentistas a iniciar una campaña con miras a lograr la adhesión suficiente que permita gestionar medidas antes las autoridades nacionales.
La propuesta fue impulsada por Sergio Palahi, un vecino de Villa Gaucho que ayer acompañó a la familia de Marconi. En esta oportunidad, volvió a referirse a la “terrible” situación que padecen a diario los tandilenses que circulan por el tramo urbano.
El constante flujo de automóviles convierte al cruce en uno de los más conflictivos de la zona urbana de la traza nacional y, en horarios pico, por la mañana y hasta cerca de las 13 y entre las 17 y las 19, superar el distribuidor es una tarea compleja.
“No hay sendas peatonales ni espacios seguiros para cruzar. La ruta quedó en un lugar de la ciudad muy incómodo”, reflejó, para luego referirse a los “trastornos” que causa en la movilidad de las personas.
Palahi se preguntó “¿hasta cuándo vamos a seguir esperando? ¿Cuántas estrellas amarillas más vamos a pintar?”, por lo que demandó respuestas urgentes que aborden la compleja situación del tramo urbano.
El siniestro vial
El incidente ocurrió el lunes 10 de abril por la noche, alrededor de las 21, cuando el conductor de un Peugeot 208 (patente AE 321 OA), Matías Prado (44), embistió a Luis María Marconi, a poco de salir de la rotonda de la avenida Falucho.
El cuerpo sin vida del hombre quedó sobre la banquina, debajo de una arbolada del espacio verde público que separa la colectora sur con la Ruta, a metros de una de las salidas de la rotonda.
El automovilista, que viajaba acompañado por un menor, detuvo su marcha a escasa distancia, sobre la cinta asfáltica. La unidad presentó marcas y roturas en el parabrisas, óptica y carrocería del lado derecho.
Uno de los proyectos en estudio
Pasaron poco más de tres meses desde el último encuentro con los responsables de la Dirección Nacional de Vialidad en el que el Ejecutivo retomó el proyecto de elevación de la ruta en el tramo urbano para revertir la conflictividad y mejorar el tránsito.
A pesar de las gestiones, por el momento no se descarta ninguna alternativa, incluso la que oportunamente impulsó la administración comunal para reformar la rotonda de Actis -por la que circulan 41 mil kilómetros a diario- junto a un esquema de semaforización para resolver la urgencia.
Sin embargo, para Estrellas Amarillas resulta central que Tandil avance con su propia agenda ya que Vialidad no tendría proyectadas obras en el corto plazo para la ciudad.
La iniciativa impulsada por la ONG apunta a la urbanización de la traza y la variante por un trayecto alternativo por rutas provinciales (la 30 y 74).
La propuesta cuenta con el aval de una veintena de instituciones educativas, deportivas, religiosas y asociaciones civiles de la ciudad, y se respalda en experiencias que otras ciudades aplicaron con recursos de Vialidad Nacional en todo el país.