Consumos problemáticos
"Nunca el que consume es un delincuente"
Entrevista con el subsecretario de Prevención, Investigación y Estadísticas en Materia de Drogas de la Sedronar, Rafael Villanueva.
Rafael Villanueva, El subsecretario de Prevención, Investigación y Estadísticas en Materia de Drogas de la Sedronar, visitó Tandil. Junto al concejal Nicolás Carrillo, participó de una reunión de intercambio con organizaciones que trabajan en la ciudad abordando el tratamiento y la prevención de consumos problemáticos.
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Luego se dirigió al festival cultural Casa Pueblo, que se llevó a cabo en dicho espacio de acompañamiento comunitario.
La sede de Casa Común, ubicada en Villa Laza, fue el lugar adonde Villanueva se reunió con referentes del CPA, de la organización Vientos de Libertad y de La Pastoral de Adicciones del Obispado, poniendo en común aspectos vinculados a la realidad de Tandil en relación a los consumos problemáticos.
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Allí recibió a El Eco de Tandil, medio al que brindó una entrevista en la que se refirió a distintos puntos de una problemática compleja sobre la que diversos referentes locales han expresado su preocupación por su crecimiento en la ciudad.
-Llegaste a Tandil no sólo por una reunión de intercambio, sino también para formar parte de un festival cultural ¿Cómo se vincula esto con tu rol en la Sedronar?
-Bueno, estamos acá para acompañar a Nicolás Carrillo y a todos los compañeros y compañeras de Casa Pueblo que están haciendo una actividad, que tiene que ver con reconstruir algo que para nosotros desde el trabajo del Sedronar, es fundamental. Porque son los lazos comunitarios, las redes comunitarias la única forma de abordar con los consumos problemáticos.
--Viajás y recorrés el país, conocés la problemática a nivel nacional. ¿Cómo ves al tema de los consumos en este último tiempo?
-La Problemática de consumo está involucrada en el problema de la desigualdad social, en el problema de la exclusión social y en el problema de la falta de oportunidades. Para nosotros es fundamental arrancar por ahí porque creemos que cuanto mayor es la crisis, mayores son las dificultades para el desarrollo de nuestro pueblo en general. Y mayores grados de consumo y de problemáticas asociadas al consumo hay. Entonces vemos una situación muy compleja, vemos una situación de mucho consumo, de inicio de consumo a muy corta edad, y vemos que la forma de vincularnos en general con las sustancias ha sufrido importantes modificaciones también a partir de la pandemia y ese contexto del aislamiento que costó mucho atravesar para todos.
-¿Qué se puede hacer al respecto?
-Creemos que se puede hacer un esfuerzo, y se viene haciendo desde el Estado Nacional. Un esfuerzo para coordinar el trabajo de Estados provinciales, municipales y las organizaciones en construir espacios comunitarios que empiecen a dar respuesta modificando un poco la mirada. Porque el problema de consumo muchas veces se vio como un problema individual y de números, cuando en realidad es un problema de toda la sociedad. Partir de esa mirada nos permite que las personas que están atravesando situaciones complicadas se sientan menos solas.
-¿Antes había una mirada más punitivista sobre el tema?
-Lo primero que hay que decir es eso, que nunca que el que consumen es un delincuente. Hay que desarmar ese señalamiento público que solía haber. Y lo segundo que también decimos es que el Código Penal no rescató a nadie. Una persona que está atravesando un problema de estas características lo que necesita es la escucha, el acompañamiento, necesita un tratamiento profesional, un abordaje comunitario, una perspectiva de derechos humanos de la salud mental.
Pero no necesitan señalamiento público como delincuente o una criminalización desde las fuerzas de seguridad. Realmente en esta gestión hemos modificado esa mirada, esa forma de abordaje. Y creemos que también lo hicimos con muchas prácticas punititivistas de instituciones de tratamiento. La verdad que en ese sentido estamos muy contentos porque no sólo abrimos un montón de instituciones para acompañar, como son casas de atención acompañamiento comunitario que acá en la ciudad hay varias. Sino que también modificamos prácticas de instituciones que ya existían.
-¿Cómo ves esta situación en Tandil?
-De forma cotidiana y periódica venimos trabajando con todas las organizaciones comunitarias. Nicolás Carrillo viene acompañando y pensando cómo hacer presente el esfuerzo del Estado nacional y del Estado provincial en esta ciudad. Es fundamental para ambos Estados que haya en la ciudad organizaciones como Casa Pueblo, que puedan hacer esfuerzos para que lleguen las iniciativas. La ciudad atraviesa un contexto difícil con situaciones de alta vulnerabilidad en muchas personas.
Ese esfuerzo hay que replicarlo y se replica con el trabajo del Sedronar. Para nosotros la única forma de dar respuesta a esta situación compleja que sabemos que vivimos como país en general tiene que ver con eso, amalgamar el esfuerzo de dirigentes de organizaciones con el esfuerzo del Estado nacional y provincial para que estén presentes las políticas públicas que tienen que estar en el territorio, para que la gente tenga acceso a las mismas