19 y 20 de noviembre
Minga, la feria de editoriales independientes que apuesta a nuevas experiencias políticas y culturales
El evento se realizó en 2019 con gran convocatoria y tendrá su segunda edición el fin de semana largo en el Centro Cultural Universitario. La iniciativa nuclea a 60 stands y decenas de sellos independientes, además de una feria gráfica, tres librerías, charlas y talleres. Busca rescatar el espíritu de autores como Di Paola, Soriano y Gombrowicz, apuntando a generar experiencias por fuera de los relatos culturales más tradicionales de la ciudad.
El próximo fin de semana se reeditará la experiencia Minga, con la segunda feria de editoriales independientes, que tendrá lugar el sábado 19 y el domingo 20 de noviembre de 14 a 22 en el Centro Cultural Universitario (CCU), ubicado en Yrigoyen 662.
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Sesenta stands, decenas de editoriales, tres librerías locales, feria gráfica, talleres y charlas-debate son parte de la nueva apuesta de un colectivo preocupado por romper con los discursos dominantes e invitar a la comunidad con otras propuestas, más bien disruptivas.
La iniciativa surgió desde la biblioteca Juan Antonio Salceda, librería La Bullanga, Secretaría de Extensión de la Universidad Nacional del Centro, Área de Género y Área de Medios Audiovisuales de la Unicen, y este año se sumaron las librerías Hola, La casa azul y El gato Neftalí.
Así, Minga surgió en 2019 como un rescate a toda una tradición contrahegemónica de la ciudad. En este sentido, la primera edición se materializó con base a tres aniversarios importantes para la cultura tandilense: los 50 años de la muerte de Witold Gombrowicz, el escritor polaco que vivió en esta ciudad; 30 años desde que Osvaldo Soriano dejara Tandil con la editorial que se llamó “Semana Chanta”; y finalmente el aniversario de la muerte de Jorge Di Paola Levin, de quien tomaron el nombre de la feria, en homenaje a su primera novela que fue lanzada por Editoriales La Flor.
Otros mundos posibles
La primera feria se llevó adelante durante la Semana Santa de 2019 y resultó un éxito de público. La pandemia interrumpió los planes en los dos años posteriores y en 2022 la organización decidió traerla de vuelta. No obstante, se desarrollaron diversas actividades en este lapso para mantener el fuego encendido.
Al respecto, Gisela Giamberardino, una de las organizadoras, en conversación con El Eco de Tandil profundizó que la elección de Soriano, Di Paola y Gombrowicz se trataba de tres personajes “con una propuesta política y cultural que se vio interrumpida”. En sintonía, se abocaron a la tarea de recuperar dicha experiencia y habilitar nuevos discursos, por fuera del relato habitual de la cultura serrana.
“A la primera feria la hicimos apostando a convidar a la comunidad de Tandil con otro tipo de experiencias editoriales, con otros autores y otras temáticas, para interrumpir ciertos relatos culturales de la ciudad”, explicó.
En tanto, también detalló que los catálogos de las editoriales independientes proponen temáticas novedosas y géneros disruptivos, que hablan de derechos humanos, de género, de cuestiones migrantes, de clases sociales y de sexualidades, entre muchas otras temáticas, no habituales en las vidrieras del circuito más comercial.
El circuito alternativo
En abril de 2019 la circulación de ciertas editoriales y títulos era todavía limitada, sólo la librería itinerante La Bullanga disponía de una oferta alternativa. A la fecha, el escenario por suerte cambió y ya son más los espacios que pusieron a disposición de los lectores tandilenses este tipo de material.
De este modo, el escritor y también organizador, Martín Di Lisio, señaló que “se abrieron estos espacios para refrescar temáticas y abordajes, además se da este vínculo con el editor y las distribuidoras, que redunda en un mayor conocimiento”.
El acervo de editoriales independientes argentinas creció exponencialmente en la última década y posee derechos de autores de primera línea y de prestigiosas obras, un fenómeno que ganó espacio a la par de los nuevos consumos culturales. Asimismo, la necesidad brindar respuestas por fuera del esquema mainstream de los grandes grupos editoriales multinacionales, evidenció que precisaban otros dispositivos de publicación y distribución.
Otra arista de interés es el acceso a las traducciones y la oportunidad de hacer circular la palabra venciendo la barrera idiomática. Existen diversas editoriales que apuestan a hacer traducciones de textos de cultura japonesa, narrativa china o rusa, entre muchas otras, que restituyen clásicos o habilitan nuevos títulos de ensayística y narrativa
"Ahora las grandes editoriales van a buscar autores a las independientes, es una cabeza de playa en todo sentido”, ahondó Di Lisio.
Y agregó que “esta vez hay librerías que ofrecen eso, hay cultura gráfica y dialogamos con otra propuesta que es ‘Volcancito’, el festival gráfico de Tandil, y son encuentros que hacen falta”.
La frontera
El evento se propone como un lugar de encuentro para “oír ladrar el lenguaje de la frontera”. La cita, parafraseada, pertenece a la escritora y activista Gloria Anzaldúa, y es el lema de la feria.
“Nos interesaba rescatar este slogan y lo seguimos usando. En 2019 era todo medio desde la frontera, pero en este tiempo se condensaron y visibilizaron experiencias editoriales que en ese entonces eran minoritarias”, indicó Giamberardino.
Así, se generó un espacio de cruce entre autores, público y experiencias de autogestión que los organizadores esperan reimpulsar cada año, con un cronograma de actividades en el medio. La frontera entendida como un espacio que posibilita el encuentro y no que separa, que habilita nuevas voces y discursos.
“Es estratégico que exista Minga, que se fortalezca, nos gusta que en Tandil haya un espacio que invite a otro tipo de modos, de relatos y experiencias, porque es diferente a lo que se ofrece en otros lugares”, apuntó.
Di Lisio no formó parte del equipo que se puso al hombro la primera feria, pero en esa ocasión sí pudo observar el nivel de lectura, de curiosidad y de conocimiento del público lector local, que lo llevaron a involucrarse en la iniciativa.
“Lo hacemos voluntariamente y hace cuatro meses que nos reunimos todos las semanas. Queremos dejar las bases sentadas para las próximas ediciones, y saber qué hacer y qué no, pero hay todo un trabajo previo de meses. Además, hay tanta actividad que si no comprometés a los editores y autores a que vengan, después no pueden porque tiene la agenda completa”, expuso el escritor.
La feria
La apertura será el sábado 19 con una panel integrado por la reconocida escritora local Patricia Ratto, el artista plástico Cristian Segura y la periodista Ivy Cángaro, y versará justamente sobre el texto que dio nombre al evento y su autor, Jorge Di Paola.
El cronograma de propuestas y talleres puede consultarse en las redes de la feria, @MINGA.Tandil.
La entrada y todas las actividades son de acceso libre y gratuito. La feria es completamente autogestiva y recibe algunos aportes de la Unicen, del Instituto Cultural de la Provincia, y de privados, como la Cooperativa Geneos y el Banco Crediccop.
La lista de invitados que van a acompañar esta segunda edición de Minga es de lujo e incluye nombres tales como Alejandra Kamiya, Pamela Terlizzi Prina, Silvina grupo, Eugenia Zicavo, Marcos Almada, Julia Rosemberg, entre otros.
Si como decía Di Paola “es poco el finito para el deseo”, al menos el deseo de Minga estará contenido en los dos días que durará la feria, al compás de los libros y todas las formas de arte.