Miguel Ponce advirtió que hacia mayo, si el comportamiento social no cambia, habrá cinco mil casos activos

Siguiendo las mismas proyecciones e interpretando de la misma forma que el año pasado la información, el doctor en Ciencias de los Materiales, Miguel Ponce, advirtió que la situación epidemiológica de Tandil se agrava de modo pavoroso.

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Precisó que desde el 30 de marzo en adelante, con una base de 100 casos promedio, la pendiente “va a una velocidad alarmante”. Lo confirmó en una entrevista con el programa “Cosas que Pasan” que se emite por Tandil FM (104.1) y compartió el cuadro de curvas que muestra cómo se disparará la curva de contagios si no se toman a conciencia los recaudos requeridos.

Puntualmente, reveló que llama la atención cómo día a día esos puntos van creciendo sobre una línea recta que “nos conducen hacia los cinco mil casos activos para mayo”, si se mantiene el comportamiento social que se lleva hasta el momento.

“El año pasado fue una olita”

Cabe recordar que desde el año pasado el experto viene dando a conocer sus proyecciones, que de hecho resultaron muy acertadas durante la primera ola, lo que respalda que el panorama avizorado no diste de lo que realmente vaya a suceder.

“Cualquier actitud que se tome hoy, se va a ver reflejada dentro de 15 días, entonces esta proyección empieza a variar en función del comportamiento social”, sostuvo.

En este sentido, aseveró que la gente tiene que sostener cuidados ya sabidos, reunirse lo menos posible y tratar de acompañar a los que sí o sí tienen que salir a trabajar, ya que también señaló que “el colapso económico lo tenemos delante de nuestras narices”, así como también la falta de vacunas.

Por ende, subrayó que el panorama no es bueno, y tradujo que “simplemente” lo que las gráficas están diciendo es que hay que cuidarse porque lo que viene es realmente complicado. “No lo tomemos como el año pasado”, insistió, advirtiendo que eso  “fue una olita” y el futuro inmediato avizora algo mucho más grave.

Las camas, el frío y una advertencia

Según explicó, el crecimiento es logarítmico y a través de eso lo que se puede hacer, considerando la cepa del 2020, es sacar un porcentaje de esos cinco mil activos cuántos van a necesitar una terapia intensiva por día.

Siguiendo esa ecuación y considerando que actualmente con casi 900 casos activos hay poco más de 50 camas de terapia y generales ocupadas, podría estimarse que con cinco mil casos activos se requerirían en torno a 300 lugares en los centros de atención.

Si se presta atención, mencionó que a la primera curva la hizo los primeros días de abril, ya a mediados de mes los puntos se fueron alineando arriba de su proyección. “No hubo una variación en el comportamiento que lleven a un decaimiento de la velocidad de contagios en los últimos días, sino que va perfectamente por arriba de la curva que conducen a los cinco mil activos para mayo”, constató y reforzó la impronta de advertirle a la gente lo que se viene.

Recordó que el año pasado los primeros casos fueron en agosto, con la llegada de la primavera, alertando que ahora se está con una pendiente mayor y recién comenzando el otoño, donde la temperatura comienza a bajar y la humedad relativa del ambiente empieza a subir.

Esto, sumado a conceptos nuevos como es la existencia del virus en ambientes cerrados y el requerimiento de poder airearlos, entre otras cosas, van en contraposición a la necesidad de calefaccionarlos en una ciudad fría como Tandil. “Ninguno de esos parámetros lamentablemente van a favor de la humanidad”, planteó.

A cambiar la conducta

Como todavía no puede cerciorarse de que en la ciudad haya presencia de las nuevas cepas, aclaró entender que lo que se está viendo actualmente en el crecimiento de curvas son parámetros donde hay un comportamiento social que tiene mucho que ver en ese incremento.

De hecho, sostuvo que si estas nuevas variables se llegaran a filtrar en la ciudad, porque ya andan cerca, la curva se va a acentuar mucho más, como también la complejidad de la situación.

Si bien habló de relajación, también dijo que hay que entender que la gente está estresada y señaló un aspecto positivo a rescatar relacionado que a pesar de la cantidad de actividades al aire en el verano, los casos bajaron. Entonces, también tiene que ver con un tema climático y pidió evitar las reuniones prolongadas en espacios cerrados.

“La curva es para concientizar a las personas de lo que se viene y que no esperemos que el Estado tome decisiones que nadie quiere tomar, cuidémonos para ayudar a la sociedad”, expresó.