Miguel Lunghi asumió su sexto mandato y planteó los desafíos, obras y proyectos para la gestión

En la sala principal del Teatro del Fuerte colmada, Miguel Lunghi asumió su sexto mandato consecutivo como Intendente de Tandil.  Tras la jura, tomó la palabra para brindar un discurso del que aclaró que no se trató de un “plan de gobierno”, sino del “esbozo de una idea acerca de los próximos cuatro años de gestión”.

En el mismo celebró las cuatro décadas de democracia, señaló que continuará trabajando por la autonomía municipal, planteó la importancia de generar suelo urbano, sostuvo que se analizará el Plan de Desarrollo Territorial, y precisó obras públicas a realizar en el período entrante.

El Intendente ató las expectativas, ideas y “buena parte de los proyectos” a la situación económica del país, y en ese sentido expresó que “deseamos que el ciclo político que comienza consiga los mejores resultados, revierta esta inquietante situación económica y nos permita concretar, con créditos imprescindibles, las obras de infraestructura que Tandil necesita”.

Tal como fue anunciado, el teatro de calle Fuerte Independencia fue el escenario donde poco después de las 19 se dio inicio a la sesión constitutiva del Concejo Deliberante, que había entrado en cuarto intermedio tras la sesión preparatoria. El público –autoridades, funcionarios, representantes de diferentes organizaciones de la sociedad civil y vecinos-, ocupó la totalidad de las butacas del auditorio en una ceremonia marcada por la emoción de la celebración de los 40 años de democracia.

El acto incluyó la jura de los concejales entrantes, la elección de autoridades del Legislativo, la proyección de un video por las cuatro décadas transcurridas desde la llegada de Raúl Alfonsín a la presidencia de la Nación, y la asunción de los secretarios y subsecretarios del Municipio.

“Tenemos democracia desde hace 40 años y la queremos para siempre con nosotros”, destacó Lunghi –luego de una ovación de parte de los presentes- durante el comienzo del discurso en el que agradeció a “los vecinos de Tandil que nuevamente me han conferido el grandísimo honor de elegirme como el intendente”.

El primer mandatario local aseguró asumir el compromiso del cargo “con la misma energía y la misma responsabilidad de la primera vez, en aquel diciembre de 2003”. Y en la misma línea sostuvo que “llegué a la intendencia hace veinte años viviendo en la misma casa de siempre, austeramente, y me voy a ir de la misma manera en términos materiales, pero con el regalo más hermoso que llevo en mi corazón, el afecto de mis vecinos, sean del color político que sean”.

Con la “Marca Tandil” como bandera, Lunghi celebró “hasta la última letra” el Acuerdo del Bicentenario, reiteró su pedido por la autonomía municipal, y planteó la necesidad de analizar el Plan de Desarrollo Territorial “respetando irrestrictamente la Ley de Paisaje Protegido que supimos conseguir”.

En cuanto a obras proyectadas se refirió al segundo Parque Industrial, el Polo Logístico de Transferencia –para limitar el acceso del transporte pesado al radio urbano- el Centro de Convenciones, a la Planta de Biogás en el Relleno Sanitario, la Planta Norte de Tratamiento de Efluentes, la nueva Central de Monitoreo, el edificio del IPAT , el Conservatorio, y a los Consultorios Externos del Hospital Municipal.

“Otra cuestión muy importante será la creación de suelo urbano, también considerada una política de Estado, habida cuenta de la necesidad de vivienda que padece buena parte de la población”, agregó en otro pasaje.

“Está claro que lo urgente y lo importante aparecen como una encrucijada en el horizonte más cercano”, sumó en referencia al nuevo período político a nivel nacional. “Todos tenemos claro el valor simbólico en que se ha convertido la Marca Tandil, para nosotros el alma de nuestra identidad. Nuestro deber es cuidarla”, concluyó el Intendente. 

La jura de los concejales

La sesión constitutiva que inauguró la nueva conformación del Concejo Deliberante comenzó luego de entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino. Acto seguido se aprobó el dictamen de la comisión de poderes que resolvió la inexistencia de incompatibilidades para la asunción de los concejales electos, y  pasó a tomarse juramento a los ediles entrantes. Para eso, cada uno fue pasando al frente por orden alfabético, previa lectura de sus respectivos currículum vitae.

Así juraron, por el bloque Juntos María Haydeé Condino, Juan Pablo Frolik, Andrea Pezzi y Matías Tringler. Por el bloque del Frente de Todos lo hicieron Federico Martínez, Noelia Domenighini y Severiano Mon, mientras que por Alternativa Tandil lo hizo Matías Meli. Juraron además los concejales Federico Sánchez Chopa y Luján Fiego, representantes del partido Acción Tandilense y electos en la boleta de La Libertad Avanza.

Posteriormente se eligieron a las autoridades del Legislativo –línea sucesoria de la Intendencia-, y tal como se había dado a conocer en los últimos días, se aprobó por unanimidad la continuidad de Juan Pablo Frolik en la presidencia. Por su parte Condino –propuesta por el concejal Mario Civalleri- ocupará la vicepresidencia primera y Nélida Sereno –propuesta por el concejal Darío Méndez- la vicepresidencia segunda. El presidente del cuerpo invitó a las vicepresidentas a acompañar la sesión ubicándose en el estrado principal, para luego elegir como secretario a Diego Palavecino.

El acto incluyó un reconocimiento a los concejales que culminaron su mandato durante el año en curso. Juan Arrizabalaga, Marcos Badillo, Juan Manuel Carri, Cristian Cisneros, María Haydeé Condino, Juana Echezarreta, Daiana Esnaola, Juan Pablo Frolik, Guadalupe Gárriz y Sofía López de Armentia recibieron su medalla, lo mismo que Bernardo Weber-quien desde comienzos de 2022 se encontraba de licencia- y Walter Fernández –que tuvo un breve paso por el recinto reemplazando a Carri-. 

El nuevo gabinete

Tras la sesión constitutiva se proyectó un video en homenaje a los 40 años de democracia. El eje del mismo fue el discurso de asunción que el presidente Raúl Alfonsín brindó el 10 de diciembre del año 1983, leído por voces de vecinos y vecinas de la ciudad. Entre estudiantes secundarios y representantes de los distintos sectores, sumaron su participación Ligia Laplace, Roberto Mouillerón y Petra Marzocca. 

Luego se dio paso a la jura y asunción del nuevo gabinete de secretarios y subsecretarios, que confirmó lo anunciado desde el Municipio a fines de noviembre pasado. En concreto oficializaron los cargos Julio Elichiribehety y Miguel Ángel Lunghi (hijo) como jefe y vicejefe de Gabinete respectivamente.

También asumieron Alejandra Marcieri al frente de la Secretaría de Gobierno, Luciano Lafosse en Planeamiento y Obras Públicas, Juliana Teerink en Desarrollo Humano y Hábitat, Claudio Biset en Economía y Administración, Marcela Petrantonio en Desarrollo Productivo y Relaciones Internacionales, Vanesa Frías en Protección Ciudadana, Javier López en Legal y Técnica, y Cecilia Martens en la presidencia del Sistema Integrado de Salud Pública.

Además, la subsecretaría de Gobierno quedó a cargo de Mariano Martina, la de Desarrollo Humano y Hábitat de María Eugenia Civalleri, la de Economía y Administración de Raúl Moyano, la de Cultura y Educación de Alejo Alguacil, la de Infraestructura y Obras Públicas de Sebastián García, la de Servicios y Espacios Verdes de Claudio Fuentes, la de Protección Ciudadana de Rubén Frassi, la de Innovación de Leonardo Matías Ibarra Jiménez y la de Comunicación y Vinculación Institucional de José Ignacio Romero. En la vicepresidencia del SISP asumió Claudio Martínez Crovetto.

Las perlitas de la asunción

Los más aplaudidos

La ceremonia en el Teatro del Fuerte tuvo una significativa carga emotiva por el aniversario de la recuperación democrática. Pero también por la presencia de familiares, compañeros, correligionarios y amigos de concejales y funcionarios que comenzaron ayer sus funciones.

Entre los más aplaudidos estuvieron el flamante subsecretario de Gobierno Mariano Martina –hasta el momento director de Juventud-, la secretaria de Desarrollo Humano Juliana Teerink y el subsecretario de Comunicación José Ignacio Romero. Los tres se ganaron la preferencia del público, que se hizo notar con sus vítores cuando los funcionarios subieron al estrado.

La mención a los partidos

Previo a la jura y asunción de los concejales entrantes se leyó una breve biografía –currículum- de cada uno de los ediles que pasó a sumarse al Legislativo. Más allá de los datos de color, y lo interesante de conocer los recorridos profesionales y políticos que antecedieron a su llegada al Concejo, resultaron llamativas algunas menciones a los partidos de pertenencia de cada uno, y no a los espacios por los que fueron elegidos.

Tal fue el caso de Noelia Domenighini, a quien la locutora nombró como “electa por el Frente Renovador”, aunque lo fue por Unión por la Patria. Y algo similar ocurrió con Federico Sánchez Chopa y Luján Fiego, de quienes se reafirmó su pertenencia a Acción Tandilense pero no así al partido que dio nombre a la boleta que integraron, La Libertad Avanza.

El secretario con más trabajo 

Ya distendido por la sucesión de varios de los secretarios a los que tomó juramento, el Intendente Miguel Lunghi no dejó pasar la oportunidad y cuando fue el turno del funcionario a cargo de Economía y Administración, Claudio Biset, le advirtió que “en 2024 vas a tener mucho trabajo”.

Más allá de las risas de la audiencia, se sabe que la economía a nivel nacional es compleja y los anuncios realizados por el presidente recién asumido no auguraron mejorías. Quizás por eso, durante su discurso, Lunghi “abrió el paraguas” en un par de ocasiones para atar la suerte de las obras proyectadas al rumbo y el destino de la situación financiera del país.

La mención a Rogelio (y a Matías)

El discurso que desde el Municipio compartieron con la prensa obvió un pasaje que probablemente el Intendente haya incorporado sobre la marcha, y fue el agradecimiento al diputado nacional Rogelio Iparraguirre por sus gestiones en obras públicas para la ciudad.

El ex candidato a la Intendencia por Unión por la Patria ya había sido saludado por Lunghi al inicio de su discurso, cuando agradeció también la presencia del flamante diputado provincial Matías Civale. Por lo menos en la primera ocasión las palabras oficiales no se olvidaron del legislador bonaerense que sumó la ciudad, como en algunas ocasiones lo hicieron con Melisa Greco, que acaba de culminar su gestión en el recinto de la Provincia.

Gino e Indalecio

Fue el presidente del Concejo Deliberante quien antes de dar por finalizada la sesión, agradeció a los presentes y en particular a los ex intendentes Gino Pizzorno e Indalecio Oroquieta.

Quizás hayan llegado las repercusiones del acto en conmemoración de los 40 años de Democracia, donde además de algunas omisiones a concejales que pasaron por el Legislativo, se corrió la voz de que los otrora primeros mandatarios fueron ubicados “al fondo del salón”.

El discurso completo de Miguel Lunghi

En primer lugar, quiero esta noche celebrar con ustedes que estemos cumpliendo los 40 años de democracia, el máximo período de continuidad en las urnas en la historia del país, epopeya que en octubre de 1983 llevó a la presidencia al Dr. Raúl Alfonsín y que a lo largo de cuatro décadas, con gobiernos de signos políticos diferentes, se ha convertido en el tesoro de la República. Tenemos democracia desde hace 40 años y la queremos para siempre con nosotros.

En segundo lugar quiero expresar mi agradecimiento para los vecinos de Tandil que nuevamente me han conferido el grandísimo honor de elegirme como el intendente de la ciudad.

Asumo este compromiso con la misma energía y la misma responsabilidad de la primera vez, en aquel diciembre de 2003. Y lo asumo con gratitud, con humildad y con la vocación de trabajo intacta, sin mella, con ese motor que mueve mi vida y que representa mucho más que gobernar: es la pasión por Tandil, una expresión que he repetido muchas veces pero cada vez que la enuncio vuelve a resignificarse: llegué a la intendencia hace veinte años viviendo en la misma casa de siempre, austeramente, y me voy a ir de la misma manera en términos materiales, pero con el regalo más hermoso que llevo en mi corazón: el afecto de mis vecinos, sean del color político que sean.

Hemos pasado cuatro años muy duros, con una pandemia en el medio, que cegó vidas, emprendimientos y proyectos, y que puso a prueba la madera de la que estamos hechos los tandilenses: no nos venció ni el coronavirus, ni el miedo ni la tristeza.

Superamos juntos la peor tragedia en la historia contemporánea, llevando adelante lo que para mí es el hilo de oro que une la potencia de la ciudad: la gestión asociada entre lo privado y lo público, los dos sectores a la par, porque de esa sinergia conjunta nace el desarrollo, el progreso, y la máxima aspiración que sostuve el 4 de abril de este año, al pie del monumento al fundador, en la celebración del bicentenario de la ciudad: hacer de Tandil una tierra de oportunidades.

También, en esta hora, celebro hasta la última letra de lo que fue el Acuerdo del Bicentenario que sellamos con la Universidad Nacional del Centro y más de un centenar de Instituciones. Ese acuerdo nos permitió actuar y entender la ciudad desde una mirada diversa y plural, y merece su continuidad en el tiempo, a tono con los nuevos desafíos que la realidad nos propone.

Un discurso de asunción no es un plan de gobierno, pero sí es el esbozo de una idea acerca de los próximos cuatro años de gestión en un momento político también nuevo para el país.

Nosotros creemos hoy más que nunca en la necesidad concreta de que las autonomías municipales sean lo que tienen que ser, es decir la posibilidad de manejar nuestros ingresos y rendir al gobierno central lo que le corresponde. Es una prédica que lleva años y que seguimos sosteniendo gobierne quien gobierne. El federalismo incluye a las autonomías municipales como un derecho irrenunciable.

En el plano local, creemos que es necesario analizar el Plan de Desarrollo Territorial, respetando irrestrictamente la Ley de Paisaje Protegido que supimos conseguir.

Podemos crecer sin afectar nuestra identidad patrimonial, y para ello nos merecemos encontrar un marco teórico adecuado al Tandil del siglo veintiuno.

También ya es imprescindible, como lo enunciamos en nuestra plataforma electoral, un segundo Parque Industrial, que dé cabida a las nuevas empresas que quieren radicarse en Tandil y las que vienen surgiendo bajo nuestro cielo.

Así como la concreción de un Polo Logístico de Transferencia, que nos permita limitar el acceso del transporte pesado al radio urbano y mejorar el ordenamiento del tránsito en la ciudad.

Por otra parte, esperamos con expectativas el tratamiento por parte del Honorable Concejo Deliberante del pliego del Centro de Convenciones, sin dudas un emprendimiento con un enorme futuro para Tandil, que seguramente se convertirá en un epicentro de sociabilidad de los negocios, de generación de empleo genuino y de mucha actividad turística.

La salud pública, como todos ustedes saben, es el corazón de la gestión comunal, y una política de Estado que se verifica en nuestro Sistema Integrado de Salud.

En este período nos proponemos concluir la construcción de los consultorios externos, y edificar el sector de Kinesiología e Infectología en el Hospital Ramón Santamarina y un sector de Internación Ambulatoria.

Otra cuestión muy importante será la creación de suelo urbano, también considerada una política de Estado, habida cuenta de la necesidad de vivienda que padece buena parte de la población.

En cuanto al cuidado del medio ambiente vamos a avanzar en la modalidad del relleno sanitario con una planta biomecánica con separación y su posterior generación de biogás, que se transformará en energía eléctrica. Una iniciativa junto a nuestra Usina, que nos llena de orgullo.

Es imprescindible avanzar en la construcción de la planta Norte de tratamiento de efluentes cloacales, ya licitada con la Provincia y una Planta Central, en tramite con la Nación.

También merece destacarse para el año 2024 la inauguración de la nueva Central de Monitoreo de Seguridad, con lo último en equipamiento tecnológico. De igual modo, tenemos planificado inaugurar los edificios del IPAT y el Conservatorio Provincial de Música… expectativas que avanzan y sueños por cumplir.

Está claro que lo urgente y lo importante aparecen como una encrucijada en el horizonte más cercano.

Creo que nuestra tarea será trabajar con ambas categorías, con la urgencia y la importancia, asignándoles el mismo tesón y una idéntica energía.

Es obvio que todas nuestras expectativas e ideas, y buena parte de los proyectos que tenemos y anhelamos llevar adelante, van a depender de la economía del país, de cómo decante la situación económica, de por si grave que hoy tenemos como contexto, y de la voluntad que el nuevo gobierno nacional exponga en sus políticas de gestión con las provincias e intendencias.

Deseamos que el ciclo político que comienza consiga los mejores resultados, revierta esta inquietante situación económica y nos permita concretar, con créditos imprescindibles, las obras de infraestructura que Tandil necesita.

Todos tenemos claro el valor simbólico en que se ha convertido la “Marca Tandil”, para nosotros el alma de nuestra identidad. Nuestro deber es cuidarla. Cuidar su medio ambiente, su seguridad, su cultura, los hábitos de aquel pueblo pequeño en que nos criamos, que no se pierden porque reflejan educación, respeto y convivencia.