Política
“Los problemas que tienen los argentinos son con la boleta de luz y gas, no con la de las elecciones”
El diputado nacional Rogelio Iparraguirre brindó su punto de vista sobre la aprobación de la Boleta Única de Papel de cara a las elecciones del próximo año. “Venir a cambiar algo de lo poco que funciona bien en este país no tiene mucha explicación”, aseguró el tandilense. También se refirió a la Marcha Federal Universitaria y afirmó que hay cosas por discutir pero que “no hay que cometer la canallada” de querer destruir las universidades.
El pasado 1 de octubre, la Cámara de Diputados convirtió en Ley el proyecto de Boleta Única de Papel de cara a lo que serán las elecciones del próximo año. La medida fue aprobada con el voto afirmativo de 143 diputados, mientras que 87 votaron en contra y hubo 5 abstenciones. El gobierno libertario celebró la medida ya que entienden que es el “fin del fraude” que representaba el sistema actual.
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Rogelio Iparraguirre dialogó con Último Bondi (104.1 Tandil FM, Eco Tv y El Eco Streaming) sobre la medida aprobada y aseguró que “los problemas que tienen los argentinos es con la boleta de luz y gas, no con la de las elecciones”. El referente peronista en Tandil señaló que el Gobierno nacional busca poner en agenda un tema que no está en la mesa de los argentinos y modificar un sistema que “es ejemplo mundial”.
“Venir a cambiar algo de lo poco que funciona bien en este país, no tiene mucha explicación”, indicó Iparraguirre sobre la modificación del sistema y luego agregó: “Tomando los últimos 40 años de democracia no ha habido nunca, jamás, ni la más mínima denuncia fundada de fraude. Llevamos ocho presidentes, un par de los cuales reeligieron, pero totalizan ocho personas, cuatro son peronistas y cuatro no. Ni que hablar de las gobernaciones y las intendencias”.
A su vez, el funcionario comentó que esta Ley responde a las necesidades del Gobierno nacional de generar una agenda alternativa para desviar el foco del “desastre social que estamos viviendo”. Entre los datos que citó el diputado nacional para describir la complicada situación actual, comentó que cayó un 17 por ciento el consumo en supermercados, que hay una pobreza del 54 por ciento de los argentinos y que en los niños alcanza al 62 por ciento, todos índices que no se registraban desde 2001.
“Me parece que todos estos problemas, que de verdad son urgentes y acuciantes, intentan ser tapados con agendas que no tienen nada que ver con lo que les está pasando a los argentinos”, afirmó Iparraguirre.
Al mismo tiempo sostuvo que no importa el sistema con el que se vote: “Las elecciones la gana la gente. Cuando la gran mayoría decide tomar un rumbo u otro, en un sistema democrático que se respeta, termina venciendo lo que la mayoría deciden”.
Discutir la Universidad sin destruirla
La semana estuvo atravesada por la multitudinaria Marcha Federal Universitaria del pasado miércoles. El pueblo volvió a salir en multitud a las calles en defensa de la Universidad y la educación pública, pidiendo que se mantenga la aprobación de la Ley de Financiamiento universitario. A pesar de esto, el presidente Javier Milei decidió vetar dicha Ley a las pocas horas de la masiva movilización.
Iparraguirre, que estuvo presente en la marcha por las calles del centro de Tandil, aseguró: “Realmente hay cosas por discutir de la universidad que tenemos. Dicho esto, no hay que cometer la canallada de que como hay cuestiones por discutir, entonces destruyamos a la universidad. Es el intento claro que hace el Gobierno”.
Entre las distintas cuestiones que merecen ser analizadas, el dirigente aseguró que hay que ver cómo se forman los cuadros profesionales que la Argentina y el sector privado necesitan. También cómo se actualizan las currículas, explicando que renovar un plan de estudios de las universidades “es una tarea casi imposible” y que “así pasan carreras que tienen dos décadas sin tocar los planes de estudios en un mundo que cambia a una velocidad abrumadora”.
A pesar de estas discusiones que entiende que hay que dar, sostuvo que “no nos tiene que llevar a cometer la canallada de avalar lo que está haciendo este Gobierno, que es desde una posición en extremo dogmática y sobre ideologizada”.
Como respuesta a esto, destacó la transversalidad que revistió la movilización multitudinaria en todo el país en defensa de la universidad. “Cuando una comunidad siente que le están tocando un interés, que trasciende la grieta ideológica, termina en la contundencia que adquirió la movilización”, concluyó.
Concretado el veto presidencial a la Ley de Financiamiento universitario, Iparraguirre será parte desde el próximo miércoles de las sesiones en donde se intentará revertir la decisión de Javier Milei y mantener lo aprobado en el Senado de la Nación.
El tandilense, que integra la Comisión de Presupuesto, aseguró que no va a haber problema con el quórum pero que hay que ser cauto en cuanto a la votación.
Luego de definir como “inmundicia” a lo que realizaron los cinco diputados radicales, autores del dictamen de la fórmula previsional que cambiaron su voto para que se mantenga el veto, Iparraguirre afirmó: “Soy muy precavido. Tengo muchas esperanzas, pero los antecedentes recientes nos muestran que hay que hacer muy cautos. Es un gobierno muy decidido, que cuando construye un enemigo no escatima en echar mano de cualquier recurso”.
Voracidad de poder
Fuera de dos de los temas centrales de la semana, el Diputado nacional tuvo tiempo para realizar un análisis global de la situación política argentina centrando su mirada en el partido que hoy gobierna el país y una comparación con el kirchnerismo en cuanto al apetito de poder.
“Es parte de lo que el peronismo tiene que recuperar pero con la gente adentro”, afirmó Iparraguirre, quien luego añadió que “hay que tener una vocación de construcción de poder, bien entendida, porque el reaseguro de eso es que sea con la gente adentro, con los sectores mayoritarios, con los sectores laburantes, jubilados, de la educación, la salud, de la ciencia. Cuando vos tenés a esos sectores de tu lado te corrigen los desvíos, pero es importante tener vocación de poder”.
En ese sentido rescató la decisión que tiene permanentemente el presidente Javier Milei y su equipo pero a su vez lamentó que esa decisión es “para hacer mal” al desarrollo argentino.
“Vocación y decisión tienen. Vengo de formar parte de un gobierno en los últimos cuatro años donde, entre otras cosas, lo que fue demostrando es una falta de decisión que responde a la pérdida de vocación de poder transformador”, concluyó Iparraguirre.