Las lluvias trajeron alivio pero persistirán las condiciones de sequía durante todo el verano

Las precipitaciones registradas el miércoles resultaron un bálsamo para la zona rural, azotada por varios meses de sequía. Lamentablemente, se trató de un evento aislado que se replicará a lo largo del verano, en el marco de una temporada seca producida por el fenómeno “La niña”.  

El Eco de Tandil conversó con la especialista en Ciencias de la Atmósfera Noemí Troche, que se desempeña como personal civil del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) en la VI Brigada Aérea, quien explicó que “persiste desde el año pasado el fenómeno ‘La niña’, que trae asociado para nuestra área un déficit de precipitaciones y un aumento de la temperatura”. 

Así, la perspectiva trimestral para noviembre, diciembre y enero pronostica un escenario inalterable en este sentido. Si bien aclaró que se van a producir en estos meses eventos que puedan registrar precipitaciones mayores a lo normal, no es una tendencia que va a ser constante durante todo el trimestre. 

En paralelo, desde el SMN informaron que el invierno 2022 en Argentina fue un 33,3 por ciento  más seco que lo normal y se posicionó como el séptimo más seco desde 1961, y el quinto consecutivo en registrar déficit de lluvias. 

Frío y lluvias 

De este modo, Troche detalló que en el caso de las lluvias de esta semana, relevadas en un amplio sector del área central del país, hubo acumulados importantes que son de ayuda para el campo, pero sin dejar de vista que el contexto general es de sequía. 

“Sirvió para humedecer el suelo, pero serán eventos aislados. Estamos dentro de un marco de sequía que se agrava porque ya lleva mucho tiempo”, sostuvo y señaló, además, que las lluvias se van a producir de manera tal que, lo que deba llover en un mes, se podría precipitar en apenas un día.

Asimismo, indicó que en Tandil la media de lluvias  para octubre es de 97 mm y que este mes quedó lejos de esa cifra. 

En tanto, refirió que las temperaturas están muy variables y que se espera un descenso del termómetro para el fin de semana, con un piso de térmica el lunes. De este modo, para el comienzo de la próxima semana, se estima que la máxima rozará apenas los 13 grados y la mínima podría descender hasta los -2 grados. 

“Entrará una masa de aire frío que va a bajar la temperatura. Con la sequía, al no tener agua la atmósfera -que es la moderadora de la temperatura - y como están  los suelos secos, la mínima es todavía menor de lo habitual. Se registran aún heladas tardías y una gran amplitud térmica, hasta de 20 grados. Hay eventos que pueden dar lugar a térmicas bajas asociados a la sequedad del suelo, que no alcanza a moderar la temperatura”, pormenorizó la especialista. 

El impacto en el campo 

Por otro lado, el titular de la Dirección de Asuntos Agrarios del Municipio, Cristian Trevolazavala, enfocó que “en Tandil estamos un poco mejor que en la mayoría de la zona núcleo triguera, que sí está mal ahora”. 

En tal sentido, expuso que el año pasado se registró una cosecha récord de trigo; la campaña 2021/22 alcanzó las 22,1 millones de toneladas. Para este año, las estimaciones rondan las 15 millones de toneladas e incluso hay cálculos aún más desalentadores que vaticinan un total de 12 millones. 

“Es un número negativo importante que impacta también en otros aspectos, aunque el grano representa sólo el 12 por ciento el precio del pan, por ejemplo”, especificó el funcionario.

No obstante, precisó que la falta de agua en los suelos repercute en toda la cadena productiva que proviene del sector agroganadero. En esta línea, enfatizó que los cultivos de gruesa de la temporada estival presentan un panorama mejor, gracias a las estrategias empleadas por los productores para paliar los efectos negativos de la época cálida que se avecina. 

De esta manera, algunos productores comenzaron a sembrar de forma tardía con semillas de ciclos más cortos, con el objeto de llegar a la cosecha en tiempos normales.

“En Tandil la mayoría se largó a sembrar ahora. La lluvia de ayer (por el miércoles) fue una bendición para Tandil, permite seguir trabajando porque hay quienes sembraron con esta humedad y los favoreció. Si llueve algo en noviembre, otro poco en diciembre y un poquito en enero, de a poco se va llevando la situación, porque hay una acumulación de agua muy baja y el suelo entra en latencia, entonces empieza a retener la poca humedad  que le queda”, desglosó Trevolazavala.

Vacas flacas 

Además, subrayó que también es complejo el cuadro que atraviesa la ganadería, porque la sequía redujo a la mitad las pasturas. Es decir, no hay pasto para alimentar a los animales; una auténtica época de “vacas flacas”.

Así, describió que en este momento no se pueden hacer reservas ante la escasez de pasto, lo que redunda en complicaciones para alimentar al ganado durante el verano y el inverno venideros.

En consecuencia, el valor del animal en pie se mantiene estable desde abril, pese a que el precio de la carne en la góndola ha sufrido reiterados aumentos. 

“La oferta sobrepasa la demanda y la gente está vendiendo animales porque es difícil darles de comer. Encima las vacas están en etapa reproductiva y tienen requerimientos nutricionales que no están siendo cubiertos. Esto significa menos preñez  y menos terneros para el año que viene, es algo que lamentablemente se ve en todos lados”, puntualizó. 

Registro de lluvias

Tandil (centro): 40 mm

Base Aérea: 33 mm

Iraola: 20 mm

Gardey: 50 mm

María Ignacia: 50 mm

Barker: 40 mm

La pastora: 40 mm 

De la Canal: 25 mm

Fulton: 28 mm