El lunes había amenazado con una medida de fuerza
La UTA alcanzó un acuerdo y suspendió el paro de colectivos
El gremio confirmó que el servicio no será interrumpido al alcanzar un acuerdo.
La Unión Tranviarios Automotor (UTA), el gremio que nuclea a los choferes de colectivos, confirmó ayer por la tarde la decisión de suspender el paro anunciado el lunes tras alcanzar un acuerdo salarial con la Cámara de Transporte de pasajeros local.
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En Tandil, mientras el sistema público concesionado espera definiciones de las autoridades para transitar lo que resta del año, la delegación acató la disposición, por lo que la circulación de las unidades de las seis empresas será normal durante toda la jornada.
Como se informó, el gremio había solicitado un aumento retroactivo a junio y julio de este año sobre el conformado y viáticos de convenio, más un pago no remunerativo por los meses de marzo, abril y mayo.
En un breve comunicado, la delegación local, la junta ejecutiva Mar del Plata y el consejo directivo nacional informaron que “se llegó a un acuerdo paritario bajo las mismas condiciones” que en el AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires. “Mismo trabajo, igual remuneración”, resaltaron.
En tanto, precisaron que el viernes se procederá a la rúbrica del documento que reflejará los alcances del acuerdo alcanzado.
Por ese motivo “se ha decidido levantar la retención de tareas previstas para el miércoles (por hoy), permitiendo la normal circulación del transporte en la ciudad”.
Las claves del conflicto
Más temprano, el delegado de la seccional marplatense de la UTA Juan Pose había expuesto ante El Eco Multimedios los detalles de la medida y la problemática que dio origen al conflicto y que derivó en la convocatoria a una medida de fuerza que contemplaba la retención de tareas con presencia en los lugares de trabajo.
El dirigente sindical había señalado como razón principal la falta de acuerdo con la patronal en el marco de la negociación paritaria y el “atraso salarial importante” para los trabajadores del sector. En principio, buscaban el “mismo acuerdo” que se cerró a mediados de año para los choferes del AMBA y que “no hemos podido llegar a un acuerdo después de varias reuniones”.
Esta falta de avances desató un conflicto que trataron de evitar, pero que los dejó sin posibilidades ante el tiempo trascurrido, según argumentó. “Hay un retraso de 750 mil pesos en tres cuotas de 250 mil pesos cada una como parte de un bono paritario para marzo, abril y mayo, con un sueldo conformado en un millón de pesos”, había expuesto Pose sobre el principal punto del reclamo.
En su repaso, también hizo referencia a que después de varias reuniones en las que no encontraron una respuesta satisfactoria, observaron que los trabajadores del interior “siempre quedan discriminados” ante los arreglos para el área metropolitana de Buenos Aires y aludió a las dificultades para acercar a las partes, pese a los intentos.
“Los empresarios aducen que no pueden pagar esos montos y termina en este conflicto”, lamentó el delegado, que aseguró que “siempre pensamos en los usuarios, pero realmente las familias ya no aguantan más”.
Al reflejar el estado de situación, añadió que “nuestras familias están esperando por ese salario en un contexto de país en el que se hace todo muy complicado” y reconoció que “sabemos que siempre es complicado, pero venimos desde mediados de marzo, estamos en agosto y todavía no se pudo solucionar”.
“Creo que fuimos flexibles y se determina una medida de fuerza porque las partes se alejan mucho y después es muy difícil cerrarlo”, enfatizó ante un escenario que se presentaba complejo, pero que logró avances con el correr de las horas.
Tras ratificar que la UTA mantiene la predisposición al diálogo, circunstancia que derivó en nuevos acercamientos, Pose precisó que el salario inicial de un trabajador -antes del acuerdo- era de 670 mil pesos y detalló que “el 70 por ciento de los choferes paga alquiler y se les hace muy difícil llegar a fin de mes”.
El anuncio del lunes
El lunes, a través de un comunicado, la seccional Mar del Plata del sindicato había anunciado una retención de tareas que afectaría el servicio de transporte público de corta y media distancia.
En la ciudad, tal como lo había adelantado la delegación, los trabajadores adherirían a la medida de fuerza, de modo que no iba a haber circulación de colectivos en toda la jornada.
De acuerdo a lo informado, la suspensión de actividades se iba a llevar a cabo desde las 0 hasta las 24 de ese día como consecuencia del “fracaso en las negociaciones paritarias, la falta de compromiso de las empresas y la inacción de las cámaras empresarias y los gobernantes de turno”.
La UTA también hizo un llamado a las partes involucradas, instándolas a actuar con responsabilidad y a acordar los aumentos salariales alcanzados en otras jurisdicciones, bajo la premisa de “igual remuneración por igual tarea”.
El comunicado difundido en la víspera señalaba: “A todos los compañeros del transporte público de corta y media distancia y al usuario en general, debido al fracaso de las negociaciones paritarias, a la falta de compromiso de las empresas, las cámaras empresarias (Fatap) y a los gobernantes de turno, se realizará una retención de tareas en el ámbito comprendido por UTA seccional Mar del Plata el día 7 de agosto de 2024 en el horario de 0 a 24”.