Transporte público
La unidad a GNC extenderá su periodo de prueba
Scania confirmó a Transporte Nueve de Julio S.A. que el colectivo impulsado por GNC permanecerá en la ciudad hasta fin de mes. En un principio, la prueba iba a ser hasta el 22 de marzo pero los distintos paros obligaron a extender el periodo del ensayo.
El mes de marzo viene teniendo unas primeras semanas agitadas para el transporte público. En medio de debates y charlas por un nuevo aumento en el precio del boleto de colectivo, el cual se entiende que en esta ocasión tendría una suba considerable, la Línea 500 lanzó a la calle la prueba de una unidad impulsada por Gas Natural Comprimido con el objetivo de encontrar una opción económica que impacte favorablemente en el bolsillo del usuario. Con toda la expectativa generada, el ensayo no está arrojando grandes resultados.
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La experiencia con el coche a GNC que lleva adelante Transportes Nueve de Julio S.A. no está teniendo la continuidad deseada. La unidad solamente es conducida por dos choferes que tienen un franco semanal a lo que se le agrega los días perdidos por los paros nacionales. Por estas razones, desde la empresa le confirmaron a El Eco de Tandil que la prueba continuará hasta el 27 de marzo con el permiso de Scania, cinco días más a la fecha que se había anunciado en un principio.
Una vez pasadas las 48 horas de paro dictadas por la UTA para este miércoles 13 y jueves 14, la Línea 500 realizará una evaluación para saber bien cuánto gasta cada 100 kilómetros uno de los coches que circulan habitualmente. Luis Garrido, presidente de Transportes Nueve de Julio S.A., confirmó que “el colectivo es totalmente distinto a los que se usan en Tandil en consumo. El balance no lo pueden hacer ni la gente de Scania, por eso lo van a dejar cinco días más. Va a recorrer las calles hasta el 27 a la noche”.
Desde la empresa automotriz confirmaron que en Tandil es en la ciudad donde menos GNC gasta la unidad en cuestión. La explicación que encuentran desde la Línea 500 es que es una ciudad donde “es imposible tener velocidad comercial”.
El dato que acercaron a El Eco de Tandil es que hace diez años la vuelta tenía 25 kilómetros y se recorría en una hora y diez minutos y hoy siguen siendo la misma cantidad de kilómetros, sacando los alargues al Dique y al Cristo, pero se demora una hora y treinta y cinco minutos en completarla. “Todo eso son los lomos de burro, el tránsito, los semáforos. No levantan velocidad los colectivos y por eso están gastando menos”, comentó Garrido.
Aunque el concepto “gastando menos” puede ser interpretado positivamente de cara al impacto al usuario, la realidad es que al no contar con velocidad comercial, según contaron desde la empresa transportista, hay que compensar con más colectivos y por ende más personal: “Es preferible tener menos personal y gastar más en gasoil o más en gas”, afirmó Luis Garrido.