En Gardey
La solidaridad se hizo presente en tiempo récord para la colecta por el techo del Museo de Malvinas
La organización sin fines de lucro que está al frente del Museo de Malvinas de la ciudad sufrió un deterioro importante en sus instalaciones y lanzó esta semana una colecta para afrontar las reparaciones. Apenas algunos días después de comunicada la movida solidaria, Santiago Calvo, director del espacio, aseguró que se cubrieron los casi 300 mil pesos necesarios. “Estoy gratamente sorprendido y agradecido infinitamente”, aseguró.
El pasado jueves tomó público conocimiento la complicada situación que le toca transitar al Museo de Malvinas, ubicado en la localidad de Gardey. El que es considerado como el único museo del mundo dedicado a Malvinas, que fue creado antes de que se desarrollara la Guerra, sufrió un importante deterioro en su estructura por el paso del tiempo y hoy se encuentra afectado por las goteras que ponen riesgo las más de mil piezas de valor histórico con las que cuenta.
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Santiago Calvo, director del Museo de Malvinas, dialogó con El Eco de Tandil y explicó los pormenores de la problemática que salió a la luz durante los últimos días y tuvo una pronta resolución gracias a la solidaridad de la gente. “Desde todos lados del país, y algunos desde el extranjero, han puesto su ayuda económica. Lo que demuestra que hay muchísima gente que tiene ganas de malvinizar y que tiene el corazón en Malvinas, como todos nosotros, los que hacemos el museo”, aseguró.
La casa ubicada en la avenida Independencia de Gardey fue construida en 1913 y corresponde a la familia Vulcano, quienes cedieron el espacio sin ningún interés económico. Calvo explicó sobre esta locación: “Nosotros tenemos un gran problema, está muy deteriorado. Lo tomamos y lo fuimos reciclando de a poco, pero es una construcción muy vieja, tiene más de cien años”.
De acuerdo a lo señalado desde las redes sociales, el deterioro provocó el ingreso de agua por el techo y empezaron a correr riesgo de daño las piezas que exhiben. En las imágenes adjuntadas a un comunicado de la institución se puede observar una cubierta maltrecha, no solamente en sus chapas consumidas por el óxido, sino también en las uniones de las paredes con la estructura que conforman el techo. Por esas rajaduras es por donde se filtra el agua ante cada llovizna, sea intensa o no.
Vale destacar que la organización no recibe dinero de ningún lado, de la misma manera que tampoco paga alquiler por las instalaciones que ocupan. El lugar no estaba en buen estado y se fue acondicionando gracias a la ayuda de todos los colaboradores del museo.
“Tuve que recurrir a personas que conozcan del tema para colocar membranas en el techo, todas las que podamos. Es muy caro”, contó Calvo sobre el trabajo que se tiene que realizar en la azotea. Los profesionales consultados pasaron un presupuesto cercano a los 280 mil pesos.
El poder de las redes
A partir de este costoso trabajo que hay que llevar a cabo para preservar piezas de la historia argentina, el equipo de colaboradores del museo inició una campaña de recaudación con el fin de afrontar la reparación. “Una vez que la largué para juntar dinero para poder comprar las membranas, me sorprendí”, comenzó explicando.
“La verdad que hemos superado toda expectativa que se me podía pasar por la mente, me sorprende absolutamente el poder las redes”, siguió Calvo, que luego se mostró agradecido por el voto de confianza que brindó cada uno de los donantes para afrontar el gasto de la reparación. “Estoy gratamente sorprendido y agradecido infinitamente”, cerró.
La gratitud del responsable del Museo de Malvinas se explica a través de que una colecta de apenas unos días, donde no se indicó un monto para abonar, logró juntar la totalidad del monto requerido. “Hemos superado ampliamente las expectativas y ya tenemos un número suficiente como para encarar la obra, con la ayuda de todas las personas que han querido colaborar. Ya estamos completos, la campaña terminó”, aseguró el director.
El Museo de Malvinas Tandil está ubicado en la avenida Independencia de Gardey. Su fundación data del 19 de marzo de 1982 y está conformado por cinco salas de exposición. En un inicio, el proyecto funcionó en la casa particular de Santiago Calvo, mentor del museo.
En el total de las salas se encuentran más de mil objetos relacionados con los derechos argentinos sobre las islas Malvinas. Por cada una de sus dependencias transitan muchos héroes de la Guerra y una gran cantidad de visitantes que se acerca preferentemente los fines de semana.