La Red de Comedores Populares de Tandil expuso la crítica situación que atraviesan
Diferentes agrupaciones políticas y sociales contenidas en la Red de Comedores, evidenciaron la compleja coyuntura que viven en los casi 20 espacios a su cargo que se dedican a brindar un servicio alimentario para las familias de los barrios. Piden que se declare la Emergencia Alimentaria para fortalecer las partidas de comida que llegan a los comedores y merenderos, cuya demanda se incrementó en el último tiempo.
Organizaciones sociales y políticas nucleadas en la Red de Comedores Populares de Tandil visibilizaron la compleja situación que viven debido al aumento de la demanda en las raciones alimentarias que atienden a diario en diversos barrios de la comunidad.
Recibí las noticias en tu email
El Eco de Tandil pudo dialogar con los miembros de algunas agrupaciones que se acercaron al lugar e improvisaron una pequeña asamblea en la esquina del Municipio para resolver la contingencia presentada.
Las agrupaciones aglutinadas en esta red que ha comenzado a conformarse -Patria Grande, MTE, Movimiento Evita, La Poderosa, la CCC, el comedor de “Cacha” Cena (Mujeres sin techo) y Alimentación saludable- informaron que entre ellas suman aproximadamente 20 comedores y merenderos populares radicados en diferentes barrios de la ciudad, pero que seguramente hay muchos espacios particulares que no están con ningún movimiento político o social que sufren la crisis y a los que invitaron a acercarse para aunar criterios y un frente de lucha.
Dentro de las demandas, se encuentra el pedido de declarar la emergencia alimentaria a nivel local. Al respecto, Paula Alonso, otra de las integrantes de Patria Grande, manifestó que “a veces uno piensa que Tandil es un poco una burbuja, y no pasa lo que sucede a escala nacional, pero a crisis económica golpea, las medidas de ajuste, la falta de trabajo, la pobreza, no hay alimentación en los hogares, y somos muchas las organizaciones que estamos con comedores en los barrios”.
Ante una coyuntura que advirtieron como preocupante, señalaron que cada vez se agregan más familias pidiendo ser incluidas en las viandas diarias de comida que se entregan en los comedores y merenderos, llegando a un número estimado de 15 mil por mes.
“Las organizaciones tapamos baches, la sociedad no se entera que está pasando esto, queremos una respuesta del Municipio para reforzar los alimentos, y no sólo alimentos secos; hay mala nutrición en los barrios, mucha harina y eso no es una dieta saludable para los niños”, indicó la joven.
La declaración de la Emergencia Alimentaria, que en otros distritos bonaerenses ya está vigente, contempla que se mejoren las partidas presupuestarias para los espacios que brindan este tipo de servicio, de este modo, podrían ofrecerse más y mejores raciones que satisfagan las necesidades de las familias que hacen uso de ellos.
“Que cada familia pueda llegar a la canasta básica y sobre todo que puedan tener una alimentación saludable. Lo único que recibimos para afrontar las necesidades son los alimentos secos. En cuanto a carne, frutas y verduras, los compañeros tienen que salir a laburar aparte para comprarlo y conseguirlo”, ejemplificó Matías y acotó que mantienen un diálogo con el área de Desarrollo Social del Municipio, mientras esperan conocer qué alternativas para resolver la problemática se proponen a través del Consejo Económico y Social de reciente aprobación.
Fiamma Silva, otra de las convocadas, explicitó que se congregaron como red de comedores, y que si bien no todos se han unido, aclaró que el reclamo se hace pensando en ellos también. “El Municipio no tiene una política clara o adecuada queda todo en manos de organizaciones. El ajuste cierra con represión, así está la negativa ante los pedidos individuales y colectivos”, redondearon.